UNILATERAL (Min Yoon Gi)

14

—largo de aquí – dice Hye poniéndose de pie, al instante los chicos la detuvieron

—ya se van? Pero acabamos de llegar–

Taehyung se acerco lentamente a mí y me susurró al oído que corriera lo más lejos posible, Hye me miró cómplice del plan y luego todos corrimos en la misma dirección.

No es como si esos idiotas me hubieran causado miedo, pero repito nuevamente, no sé qué esperar de ésta clase de personas

Corrimos lo más rápido posible, los idiotas esos nos seguían sin rendirse, pero la adrenalina que me invadía en ese momento era explosiva. Mirar a Hye correr de esa manera me resultaba muy divertido, ya que ella no borraba esa hermosa sonrisa de su rostro, y qué decir de su hermanito, que lanzaba a un lado todo lo que se cruzaba por su camino, dejando atrás cientos de obstáculos

Hye abrió con un fuerte golpe la puerta de una casa que amenazaba con destruirse, todos nos refujiamos dentro de ella y cuidamos no hacer ruido para que no nos descubrieran. Pero mi respiración no me permitía ser el más discreto, nunca me había sobre esforzado tanto físicamente

—tranquilo amigo, no quiero que tu corazón se detenga, traeré agua–

Taehyung fue por agua dejándonos solos a Hye y a mí

—qué fue todo eso? Les... Pasa muy seguido?–

—no, ellos no son de por aquí, pero vienen eventualmente para jodernos nuestra ya miserable vida–

—ésta es tu casa? –

—así es, linda no?– dijo sonando lo más sarcásticamente posible —nada que ver con tu elegante departamento–

No supe que contestar, así que me mantuve en silencio hasta que apareció Taehyung con el agua

—todo esto me ha dado hambre, a ustedes no?–

—a ti todo te da hambre Tae, deberías mantener tu mente distraída para no pensar sólo en comida–

—en otras palabras, no hay comida– contestó él suspirando

—y viven sólo ustedes dos?– pregunté para destruir el silencio sepulcral que se había formado

—así es, después de que asesinaran a nuestros padres. Ahora sólo estamos mi hermanita y yo–

—oh, lo siento, yo no...–

—no te preocupes, está bien, indaga todo lo que quieras–

Cómo? Qué quiso decir con eso? Que soy un entrometido? Mierda Yoongi, no dejas de cagarla

Taehyung se puso de pie y abrió una puerta, de la cual yo tenía una clara vista, era el baño. Él abrió uno de los cajones y sacó algo, pero no logré ver qué era. Desvié mi vista hacia otro lado antes de que alguno de los dos me viera, luego abrió otra puerta y cerró después de entrar.

Estaba exhausto, así que me mantuve un rato más sentado antes de irme, Hye no pronunció una sola palabra y Taehyung no salió de la habitación

Ya era bastante incómodo no tener un tema de conversación con la chica que estuve buscando, así que agradecí que salvaran mi trasero y me despedí

Hye no se movió de su lugar, sólo se echó a reír y negó con la cabeza

—pues... Ya sabes, si algún día huyes de alguien... Puedes llegar aquí –

Ahora fui yo quien rió, y me fui sin más, caminando hasta mi hogar.

[...]

El cielo estaba gris, las calles desiertas, un ligero viento chocaba contra mi cara, y se sentía malditamente bien.

Amo los días lluviosos desde que tengo uso de razón, tal vez por la ausencia de personas en las calles, o por  su frescura, la hermosa melodía de las gotas de agua aterrizando sobre el asfalto, o el inigualable olor que emana de la tierra cuando está mojada. No lo sé, pero realmente disfruto de estos días.

Eran casi las cinco de la tarde, los chicos me habían acompañado a mi cita mensual con el médico, quien sigue hablando con demasiada confianza y no tarda en dar mi alta.

Decidí regresar caminando, ya que el día era prodigioso, no podía simplemente subir al auto de Jin y perderme de lo que la naturaleza nos estaba regalando.

Las gotas de agua comenzaron a caer sobre mi cuerpo, mis pasos siguieron  pausados, me faltaban aproximadamente diez cuadras para llegar al edificio cuando observé a Hye recargada en un poste de luz, cautivada por el cielo; la lluvia caía sobre su rostro pálido, era hermosa, la lluvia caía cada vez con más abundancia.

Me acerqué a ella sin mediar palabra, estaba embelesada, ni siquiera notó mi presencia, o eso pensé

—sabes que es lo mejor de los días lluviosos? – preguntó —su color–

Respondió antes de que yo pudiera hacerlo

—su color?–

—sí, es la exacta cantidad de luz que se necesita–

—que se necesita para qué? –

—para ver mejor las cosas, no una luz que destaca todo los defectos, si no una luz neutra que oculta las imperfecciones, haciéndolo todo más hermoso –

La lluvia comenzó a arreciar, ella simplemente se dio la vuelta y caminó en dirección contraria a la que yo me dirigía, intenté detenerla pero ella me ignoró

—si ves a mi hermano dile que lo espero en casa!–

Seguí mi camino, ahora a un paso un poco más apresurado, y al doblar la esquina de la calle donde vivía, miré a Taehyung de pie justo a la mitad de la calle, de un instante a otro cayó de rodillas, el color se fue de mi rostro y corrí hacia él, tenía un mal presagio, pero fuese lo que fuese, lo protegería.