Me levanto yo también y lo sigo.
Ya no esta en el pasillo me desespero
El ascensor esta bajando. Seguramente ese es él.
Miro las escaleras, debo revertir lo que dije… ahora mismo o jamás me lo perdonare.
Bajo lo mas rápido que puedo por las escaleras. Casi me caigo un par de veces.
Pero sigo y sigo
Llego hasta abajo. El ascensor ya ha llegado. Miro a todas partes, no lo veo al principio. Luego lo diviso apunto de traspasar la puerta de salida principal. No se que hacer para llamar su atención.
Miro a todas y luego me saco un zapato y se lo tiro. Con una puntería increíble va directo a su cabeza. Sorprendido se da la vuelta y mira a todos lados. Después se encuentra conmigo y me mira extraño.
- NO TE VALLAS, TE QUIERO AQUÍ, LO SIENTO, SIENTO TODO LO QUE DIJE -le grito-
Me mira un segundo que para mi parece una eternidad pero luego camina hacia mi.
En realidad corre y yo igual hacia él. Cuando estamos uno frente al otro nos besamos y nos abrazamos. Y nos amamos.
- No te vallas -le repito- siento haberte dicho eso, estaba mintiendo, yo realmente te necesito aquí, conmigo.
- No te preocupes, merecía escuchar eso -susurra sobre mi boca-
- No es cierto, me he estado desquitando contigo, lo siento. ¿Te iras?
-No lo iba a hacer, solo iba a comprar comida para que te sientas mejor, cariño. Jamás te dejaría.
-Tonto
-Te quiero, bebe
- Y yo a ti
- En serio solo ibas a buscarme comida? -pregunte apunto de caer en llanto de nuevo-
- Si, pensé que un poco de pizza te calmaría
- Solo estar en tus brazos me calmaría
- Bueno…-la línea de su boca se suavizo- debo confesar que en realidad yo tengo mucha hambre
Reí, no podía ser egoísta él había soportado horas en el hospital escuchándome llorar y debíamos comprar algo para comer aunque no tuviera ganas.
- Entonces vamos por esa pizza -le sonreí débilmente-
Caminábamos por las calles de la ciudad y podía sentir el viento chocar con mi cara y mi pelo se movía sobre mis hombros. Era una noche fría y yo no traía mucha ropa.
Pero no sentía frío, no sentía nada en realidad. Solo estaba tratando de despejar un poco mi mente pero era imposible.
Estaba muerta en mis pensamientos. Hasta que me tomaron de la mano, una mano caliente y llena de vida. Lo mire, era hermoso estar con él hacia que me sintiera un poco menos miserable en estos momentos.
- ¿Estas bien?
- No -dije con sinceridad- todo esto es demasiado para mi, mas de lo que puedo soportar
Tome una respiración profunda. Mi vida había pasado de ser “linda” a ser “desastrosa” en unas cuantas horas.
Ninguno de los dos dijo nada mas. Pero desde aquí podía escuchar a Shawn quejándose mentalmente. Cuando lo mire la pena se apodero de mi, él estaba tratando de pensar en como ayudarme y eso lo estaba frustrando. Se notaba en su expresión.
Por primera vez Shawn no tenia algo bajo su control y eso lo estaba volviendo loco
- Desde aquí te oigo resoplar -le dije-
- Que puedo hacer para que te sientas mejor?
- Nada.
- ….
- Que te quedes a mi lado me basta -le dije al final-
Las curvaturas de sus labios se fruncieron hacia un lado pero no tardo en responder
- Tu eres la cosa mas preciosa que tengo en esta tierra, no me alejare de ti ni un segundo
- Tu igual -respondí-
Llegamos hasta la pizzería y nos sentamos a esperar que nos atendieran. Segundos mas tarde un camarero estaba frente a nosotros
- De que quieres tu pizza, amor
No era el momento para emocionarme pero definitivamente “amor” era una de las palabras que agregaría a la lista de bonitas cosas que me ha dicho Shawn y las cuales me hacen feliz. En cuanto a la comida debía ser sincera, no tenia hambre o eso creía. Tenia un enorme nudo en el estomago.
- La verdad… es que no tengo hambre, lo siento
Echo un corto suspiro y luego observo al camarero que aun esperaba por nosotros.
- Dos mini pizzas de queso y dos refrescos grandes, por favor
El chico se retiro y yo no podía creerlo. ¿acaso nunca me escucha?
- Shawn, acabo de decir que no iba a comer nada
- Mira cariño me paso la vida preocupándome por ti. Pero necesito que cooperes un poco conmigo y debes en cuando tendrás que ceder. Ahora vas a comerte esa pizza y luego regresaremos al hospital ¿de acuerdo?
Tenia razón… hice una mueca en desacuerdo pero como dijo tendré que “ceder”
- De acuerdo
Cuando terminamos de comer y tomar nuestras bebidas regresamos en silencio hacia el hospital. Shawn estaba mas feliz ya que prácticamente me devore la pizza, tenia mas hambre de lo que yo pensaba y es que ahora que lo recuerdo desde la mañana que no como nada...
