Lo que me hace falta... (Camren)

Los Ángeles

Camila Pov:
Después de estár todo el día con Austin y almorzar con Lucy tuve que despedirme, pues mi vuelo salía a las 11 pm.
- Amor -Dije desanimada ya que me tenía que despedir de él.
-Qué? -Dijo muy despreocupado, creo que se golpeó o algo porque lo veo muy tranquilo.
-Amm... Ya me tengo que ir -Dije esperando a que se acuerde de lo que ésta pasando.
-A dónde te vas? -Preguntó concentrado en su celular.
-Pues a Los Ángeles -Dije en un tono muy obvio.
-En serio te vas? -Dijo un poco confuso.
-Claro que sí idiota, por qué crees que hoy lloré al despedirme de Lucy?
-Lloraste? -Preguntó aún más confundido.
-Eres un imbécil -Dije con total enojo al ver que ni siquiera se dió cuenta de eso.
Estaba a punto de irme, cuando sentí que me agarró del brazo y me acercó a su cuerpo.
-Espera nena, no te vayas, perdón, hoy he estado muy distraído -Dijo eso acercándome aún más a él.
Estaba a punto de responderle cuando le llegó un mensaje, no quería ser desconfiada pero cuando vio su celular alcancé a ver que era de una chica. Después de eso, él me soltó y empezó a escribir.
-Con quién hablas? -Dije un poco desconfiada.
-Amm... Este... Mmm solo unos amigos, nadie importante amor. Ahora... En que estábamos? -Dijo acercándose a mí otra vez.
-En que me iba Austin. Hablamos luego -Dije muy enfadada porque sabía que me estaba mintiendo.
-Hey! Espera no te puedes...
No lo dejé terminar la oración porque ya había cerrado la puerta de su casa.

Después de unas largas 6 horas de vuelo donde lo único que hice fue escuchar música y pensar en que debería romper con Austin por ser tan imbécil, al fin habíamos llegado, eran las 7 am y ese día tenía que ir a conocer el instituto a las 8 pero obviamente iba a ir a las 3 de la tarde porque habíamos llegado hace media hora. Así que cuando apenas llegué a nuestra nueva casa, lo único que hice fue buscar mi cuarto y dormir por unas 8 horas para recuperar el tiempo perdido de sueño en el vuelo.

Lauren Pov:
Después de una aburrida mañana en el instituto, decidí que por la noche iría a algún bar para acostarme con alguna chica, drogarme o emborracharme.
Era la última en el salón y cuando estaba a punto de salir veo que una de mis mejores amigas: Dinah, se acerca a mí.
-Hey Lorenzo -Dijó Dinah dándole un mordisco a su manzana.
-Hey imbécil -Dije con un tono agresivo.
-Wow, Alguien no ha tenido un buen día -Dijo sin dejar de sonreír.
-Estaba teniendo un gran día antes de que llegaras -Dije muy fastidiada.
-Ahora qué hice aparte de haber nacido? -Dijo intentando bromear.
-Es en serio Dinah, sabes que odio que me llames Lorenzo -Dije metiendo mis cuadernos en mi bolso.
-Ya cálmate Lorenzo. Bueno qué vas a hacer hoy?
-En la tarde dibujar o algo así y en la noche... -Dije con una sonrisa pícara.
-Sabes que odio que hagas esas cosas, además tenemos tarea de química y matemáticas -Dijo bastante seria para como es Dinah.
-Esas cosas no me importan, además a fin de año les paso un buen dinero y bum! Ya pasó a último año -Dije guiñándole el ojo.
-Eres una imbécil Jauregui, la vida no es así de fácil, además tus papás no te van a dar el dinero para que te gradués de esa forma -Dijo bastante enojada y dejando de comer su manzana.
-Wow cálmate Dinah! Y en lo de mis papás... Te equivocas. Me dan lo que yo quiera ya que nunca me prestan atención, entonces solo les digo: Necesito dinero y me lo dan ni siquiera preguntando para qué.
-Jauregui eres una idiota, además, tus papás han intentando hablar contigo últimamente, que no quieras es otra cosa.
-No voy a volver a hablar con ellos como si nada hubiera pasado, ahora sólo necesito su dinero y ya.
-Lauren...
-Mejor cambiemos de tema. ¿Quieres venir conmigo en la noche? -Dije saliendo del salón acompañada de Dinah.
-Ja! Ni siquiera lo pienses, y a diferencia tuya, yo sí tengo que hacer mi tarea.
En eso Dinah tenía razón, ella no tenía tantos recursos como yo, no era pobre pero tampoco tenía tanto dinero.
-Bueno ya, entonces... ¿Nos vemos mañana? -Dije ansiosa por ya irme a mi casa.
-Tenlo seguro Jauregui, bueno adiós, te amo. Cuídate -Dijo preocupada.
-Si mamá, te amo bye.
Y así me despedí, yendo decidida a pasar una gran noche.