Esclava sexual.©

Capítulo 8

Antes de empezar el cap de hoy, quiero mandarle un saludito a:

@luisdum

Muchas gracias por tú apoyo, de verás gracias♡

disfruten el cap♡

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"Take a sad song, and make it better..."

Desperté ya que alguién me cantó al oído, perfectamente reconocí esa canción y quien la cantaba, salte de la cama de golpe.

—HEY JUDEEEE — Canté cerrando los ojos

—¿Te gustan The beatles?— me preguntó Brad, para darme un beso corto en los labios. — a casi ninguna chica les gustan, dicen que son muy viejos—

Reí

—¿Entonces... Soy única? —Pregunté mirandolo pícara.

—Única en tu especie —Se acercó para luego darme otro de esos besos que me mataban.

Enrolle mis brazos en su cuello, para luego darle un beso en los labios.

—¿A donde iremos hoy?—Pregunté divertida

—Iremos a... —hizo una pausa — creo que a la casa, no?

Reí

—Que tonto eres— le dedique uno de mis pucheritos

—el tonto más atractivo de esta galaxia —hizo una pose diva

—Mejor vámonos, extraño a Yoko

—Vamonos señorita Sunshine —me dedicó su hombro como en las películas ay, me muero.

. . .

—Fué muy lindo lo que hiciste Bradley, enserio, me encantó —hice una pausa — no debiste haberlo hecho.

—tonterias —pauso y siguió — todo lo hago por tí, sin ti enserio, no se que harí... —se calló al ver la sala y la cocina y sobre todo su preciada figura de más de diez mil dólares destruida en mil pedazos.

—¡¿QUIEN MIERDAS HIZO ESTO?! —joder salté del susto que me brincó

—Jefe, Bradley, menos mal que llega junto a la señorita sunshine ayer lina, se volvió loca —pauso — yo... no sé que hacer, las mucamas no han vuelto de la playa.

—Joder Avril, llama a Yoko por tu célular y diles que vengan lo más rápido posible.

Avril era la única de las mucamas que no había ido, según ella; "se sentía muy mal para ir a la playa"

Avril asintió y se fué dejandome sola con Bradley

—Sunshine debo arreglar esto—su semblante lucia serio, y sin más se fué para la habitación de Lina.

Hoy era un día de locos...

bueno, después de todo, algo bueno pasó este día.

—Señorita Sunshine —me llamo Avril —la están llamando por el télefono de la casa.

Camine unos pasos para agarrarlo, no sin antes de darle las gracias.

—¿Hola? —Nadie hablaba —¿quién es? —seguían sin hablar —Voy a colgar