Este pueblo es realmente pequeño, nunca creí que me encontraría con ella en mi salón de clases. Aunque al parecer solo existe un grupo para cada grado escolar en el colegio, así que era inevitable.
Con todo, de verdad no creí que me recordaría. Una vez mas, me doy cuenta de lo mucho que destaco siendo el chico nuevo en un lugar como este, en el que prácticamente todas las personas se conocen entre si.
Voy a la cocina y sobre la barra me encuentro con la bolsa de pan que compre ayer en la panadería del pueblo. La tomo y me encuentro con que aun quedan una pieza. ¡Cierto, el oso! Es el bizcocho con forma de oso que Eliza término por venderme ayer.
Había planeado llevarme únicamente un panquecito relleno, solo para satisfacer mi curiosidad y para corroborar la calidad del pan a la venta. Si aquella era la única panadería en Lirio Blanco, era mejor que me fuera acostumbrando al sabor de sus panes.
Estuvo bien, el panquecito era suave y la fruta estaba fresca. ¿Pero, esto? ¿Un osito de pan? Se me antoja como algo mas bien cursi, si no fuese por lo forma tan entusiasta en que Eliza me ofreció su producto, jamas lo hubiera comprado.
Es el tipo de chica al que no se le puede dar un no por respuesta, ya entiendo por que la pusieron a cargo de la atención al publico. ¿Panaderia estrella fugaz, dijo? Estoy seguro que no ponía nada de eso en el letrero de la entrada. ¿Acaso se lo habrá inventado ella?
Levanto la pieza de pan y la observo con cuidado, Eliza había invertido mucho tiempo en la elaboración de este oso, de eso no me queda la menor duda, especialmente después de nuestra extensa platica de ayer.
Durante varios minutos me relato cada detalle de la elaboración de este producto, desde el como amasó la harina hasta el como hizo el decorado. Aunque curiosamente había omitido hablar del relleno, lo describió únicamente como "una cosa roja". Temo un poco que le pusiera algo raro, por eso no me lo había comido aun.
Aunque después de semejante esfuerzo para consolidar una venta ¿Como podía negarme a adquirir uno? ahora me estoy preguntando ¿Habra valido la pena? Aun si no había puesto nada raro en la receta, la verdad es que... bueno, el panque había estado bien, pero no era particularmente destacable.
Le doy una mordida al bizcocho y me quedo boquiabierto. El sabor era muy diferente al panquecito que había comido antes. Tenia un tacto refinado, su textura era suave casi se derretía en mi boca y la «cosa roja» que Eliza mencionó no era simple frijol dulce como yo me había imaginado en un principio, por el contrario, era un mezcla de frutos como fresa, frambuesa, quizá algunas moras. ¡Con que a eso se refería con cosas rojas!
El nombre no importaba pero aquella combinación de ingredientes creaban una amalgama de sabores, dulce pero sutil, además tenía un ligero toque de frescura, como a menta.
Este pequeño bocadillo de una panadería local no tenia nada que envidiarle a las mas prestigiosas cafeterías de las grandes ciudades.
Di otro mordisco y antes de darme cuenta devoré el bizcocho por completo. Ahora mismo me estaba arrepintiendo de a ver juzgado a Eliza como una simple pueblerina. Esta chica tenia talento, si no la hubiese conocido en persona, habría jurado que esto provenía de mano de un estudioso de la gastronomía con altas notas escolares.
¿Como algo así pudo venir de manos de una chica tan...? ¿Como, decirlo? ¿Rustica?
Hoy cuando entre al salón no hizo mas que gritar en cuanto me vio. Al principio ni si quiera la había reconocido, pero ese entusiasmo desbordante es inconfundible. No creo que haya una persona mas efusiva en todo Lirio Blanco.
Conteste a su saludo de forma mas bien reservada, pero esto no parece haber mermado su animo, por que aun después de mi presentación ante toda la clase y ya habiendo comenzado la lección, no dejaba de tratar de llamar mi atención lanzando pequeños trozos de papel hacia donde yo estaba.
Durante la hora de almuerzo logre evitarla y al terminar el día me las ingenie para que no se percatara de mi presencia. Pero Eliza parece lista, no podre evadirla por siempre.
Miro la bolsa de pan vacía y me doy cuenta de una verdad irrefutable. Un nuevo encuentro entre nosotros es inevitable, su repostería es probablemente lo mas interesante en este pueblo. Mañana, mañana supongo que hablare con ella.
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Senderos | Temporada 01 [Terminado]
RomanceCuando Taylor, un muchacho de ciudad, se ve obligado a mudarse al campo. Cree que su vida no podría ir peor, sin embargo tras conocer a Eliza , la hija del panadero local. Se enciende la chispa de amor que llevara a ambos por senderos desconocidos p...