Capítulo VI - I've got a feeling

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Como ya era costumbre, cuando Taylor volvió a casa no halló a nadie allí. Sin embargo, a diferencia de la mayoría de los días, hoy su mente estaba ocupada en otro asunto.

Tal cuál había prometido, Constance hablo con Eliza y el pequeño mal entendido que se suscitó durante el almuerzo quedó atrás. Sin embargo, Taylor estaba seguro de que aquello no había enmendado del todo la situación. Por el contrario, estaba seguro de que Eliza se había visto obligada a fingir una sonrisa con tal de evitar más preguntas y mantener aquella apariencia jovial que la caracteriza.

Taylor pasó de la comida y fue directamente a su habitación. Una vez allí comenzó a hurgar entre unas cajas que aun no había desempacado tras la mudanza.

Durante este proceso continuó reflexionando sobre lo ocurrido. No lo admitió públicamente, pero si Constance había dicho la verdad, él también quería escuchar a Eliza cantar. Desde el principio se había percatado de que detrás de aquellos arrebatos de alegría desmedida se ocultaba una voz dulce y delicada.

Sin embargo, aquel tema definitivamente era un tabú para Eliza. La sola mención de asunto por parte de Constance le había hecho modificar su semblante.

Taylor no se sentía en condiciones de juzgar su comportamiento porque, después de todo, el mismo no estaba dispuesto a sincerarse con todo el mundo respecto a ciertos temas.

No obstante, hace poco gracias a Eliza, pudo externar aquellos sentimientos que había estado reprimiendo respecto a la muerte de su madre. Y de alguna forma deseaba brindarle el mismo apoyo a ella.

Tras varios minutos, finalmente halló lo que estaba buscando y supo como podía acercarse a Eliza. Una vez experimentada esta revelación decidió partir de inmediato a su casa.

Mientras tanto, Eliza se encontraba en una pequeña colina no muy lejos de su hogar. Estaba recostada allí, mirando el cielo y disfrutando de la suave brisa del viento en su rostro, cuándo algo llamo su atención. Se trataba de un sonido en la lejanía que iba aumentando de apoco. Cuando agudizó el oído descubrió que se trataba de música, una canción que le resultaba bastante familiar.

- ¿Tom?

De inmediato se levantó y comenzó a buscar en los alrededores el origen de aquella melodía. Pronto descubrió a un chico tocando la guitarra al pie de la colina. Estaba sentado sobre las ruinas de lo que alguna vez fue una pequeña barda de piedra. Eliza se acercó cuidadosamente y llamó a su atención desde atrás.

- No sabia que tocabas la guitarra, Taylor.

El chico concluyó la canción, bajó el instrumento y respondió sin darse la vuelta.

- Sentí ganas de practicar un poco, hacia muchos años que no lo hacia.
- ¿De verdad? Porque eres muy bueno, podrías llegar a ser un gran músico.
- Lo se, eso mismo solía decir mamá.

Eliza enmudeció ante esta respuesta.

- Sabes, esta es la primera vez que toco desde el día en que murió.

Taylor se hecho un poco hacia atrás y miro hacia el cielo.

- Había olvidado lo bien que se siente.

Eliza salto la barda y se sentó a su lado, intentó tomar su mano pero antes de lograrlo Taylor continuo su discurso.

- Gracias, Eliza.
- ¿Gracias, por que?
- No creí que volvería a tocar. Pero tras la charla que tuvimos siento que estoy listo para hacerlo de nuevo.
- Me alegro mucho, Taylor.
- A mamá le encantaba escucharme tocar la guitarra. Sabes, Cuando murió no creí que encontraría otra persona para la que quisiera tocar.
- Taylor....

Tras un breve silencio Eliza continuó

- ¿Tú sabias que yo estaba aquí?
- Fui a tu casa y tu madre me dijo que te encontraría aquí. Así que decidí improvisar un poco.
- Eso no sonaba para nada improvisado
- ¿Te refieres a esto?

Taylor toco un par de notas, recuperando la melodía anterior.

- Es una canción sencilla
- No del todo
- ¿Entonces la conoces?

Eliza no respondió solo se levanto y dio la espalda al chico, Taylor no esperó mas por la respuesta y comenzó a tocar.

- «I've got a feeling, a feeling deep inside» - Cantó, Eliza, casi susurrando
- «Oh, yeah» - Respondió , Taylor a tono
- «I've got a feeling, a feeling I can't hide» - Continuó esta vez en voz alta
- «Oh, no»

Taylor aceleró el ritmo de la canción

- «Everybody had a hard year»
- «Everybody had a good time»
- «Everybody had a wet dream»
- «Everybody saw the sunshine»
- «Oh, yeah, oh, yeah» - Cantaron ambos a coro

Así continuaron durante un par de minutos y cuando la canción término, Taylor bajo el instrumento nuevamente e intento hacer contacto con la chica.

Eliza tenía el rostro lleno de lágrimas.

- Eliza, yo

La chica no respondió, enjugo su llanto y salio corriendo rumbo a su hogar.

Senderos | Temporada 01 [Terminado]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora