》Subaru Sakamaki y tú《
□Shorthistory□
"Ese día tuve suerte, suerte de que alguien me sujetara y me impidiera cruza la calle. Pero ahora tengo vergüenza, había volteado para agradecerle y accidentalmente nuestros labios rozaron. Entonces huí y al lle...
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Y sin dudarlo, Subaru abrió la puerta a toda prisa. Esos llamativos ojos rojizos se toparon con un frágil cuerpo en el piso, retorciéndose de dolor mientras soltaba algún que otro quejido. ¿Cómo él pudo llegar a estar así? ¿Cómo? Subaru se preguntaba constantemente, por un momento se sintió inútil por no ser capaz de protegerlo.
— ¡Shinbashi! —gritó mientras iba a socorrerlo.
Le ayudó a sentarse, el estado de su cuerpo era débil, temblaba sin cesar.
— ¡Esos desgraciados!
(T/n) tomó tiempo para reencorporarse, con velocidad estudió a la persona que tenía enfrente suyo.
— ¿Estás bien? ¿No te han lastimado? — ella preguntó.
Tocó sus hombros asegurandose que no le doliera ninguna parte de su cuerpo, suspiró aliviada al ver que no tenía nada. Subaru quedó atónito al ver como Shinbashi se preocupaba más por él que por sí mismo.
— ¡Acaso eres idiota! —exclamó el albino— Yo era su objetivo, no te metas en algo que no te incumbe.
— Lo siento —murmuró cabizbaja—, al escuchar que esos dos lo iban a lastimar, yo actué sin pensar.
Lentamente (T/n) levantó la cabeza y se esforzó en mostrarle un sonrisa. Pero eso no hacía que él se sintiese tranquilo, ver sus mejillas inflamadas no le ayudaba a relajarse, le daba colera.
— Además, a medida que me golpeaban he contraatacado con una patada en la ingle —levantó su pulgar arriba.
Su mano le dolía, ella fijo su mirada, estaba lleno de rasguños y mugre.
— Esto es extraño para mí.
¿Por qué él era así? Subaru le fastidiaba que ni él mismo se diera cuenta de lo grave que está.
— Lárgate.
— Pero la pelicula —dijo (T/n).
— Es suficiente por hoy, no necesito hacer esto —miró con frialdad—. No vuelvas a invitarme, Shinbashi.
— Pero, Suba-.
— Sí te quedas conmigo podrías ser lastimado por este tipo de cosas, contigo aquí mis defensas bajan.
Sí Shibashi seguía con él, seguro esto volvería a pasar. Subaru no se arriesgaría a que otra vez ocurriera.
— No vuelv-.
— ¡Cierra la boca! —exclamó (T/n).
Sus manos cubrieron por completo la boca del albino, quien tenía una expresión llena de sorpresa, pero que rápidamente paso a una gruñona.
