Capítulo 4: No manches

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-Ease-

Otra vez, (T/n) caminaba por los pasillos del colegio, ignorando a los demás alumnos y todo iba relativamente bien hasta que

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Otra vez, (T/n) caminaba por los pasillos del colegio, ignorando a los demás alumnos y todo iba relativamente bien hasta que ...

— ¡Hey, Shinbashi!—llamó una voz familiar.

¿Quién era? Ella miró por donde provenía la voz y al ver quien era se alarmó. ¡Un secuaz de Tsukasa! ¿Acaso iba a cobrar venganza?
Sea lo que sea, ella rezaba en su sitio esperando a no ser golpeada.

—Tranquilo, lo pasado pisado —sonrió para calmar sus nervios.

Pero ocultaba algo, sus manos escondían algo ... ¿Pero qué?

—Ten, ponte esto —dijo.

Reveló aquel objeto y lo colocó encima de la cabeza de (T/n) ... ¿U-Una Peluca? Oh, perfecto, tenía una peluca sobre otra peluca, definitivamente diez de diez.

—¿Y esto? —arqueó la ceja ante la confusión—¿Qué es lo que piensas hacer?

Ella miró como la persona en frente suyo sacaba su celular del bolsillo.

— Vamos a sacarnos una foto —dijo.

Aún así, ¿para qué la peluca? Era imposible que ella no lo mirara extrañado.

— Es solo para impresionar a mis amigos, además alardeé un poco de que tengo novia —rascó su nuca— y con la cara de niña que tienes me ayudarías mucho.

(T/n) rió forzudamente, después de todo ella es una chica y no tiene pito. Exacto ... No tiene pito, shh.

— Haz una pose como las de Sailor Moon.

Ella suspiró resignada, ni siquiera había aceptado, pero que más daba, no tenía nada que hacer.

— Increíble, realmente pareces una chica.

Y sin darse cuenta, todo se convirtió en una sesión de fotos. Aunque con el paso del tiempo se cansó.

—Oye, ¿no crees que ya son suficientes?

—¡Oh! Perdona —rió por debajo apenado—. Esta será la última, seguro es horrible verte como chica.

— Ok.

(T/n) iba a finalizar con broche de oro la sesión, así que hizo una de las tantas poses de Sailor moon, pero ...

¡Joder! Su mano golpeó a alguien de atrás. Esperaba que aquella persona no estuviera enfadado con ella. Sin más, giró lentamente a ver a esa persona, topándose con el inigualable Subaru ... ¿¡Subaru!?

— Y-Yo —soltó temblorosa.

Aquella dura mirada que tenía puesta el albino en ella no le ayudó para nada. Ella no podía estar tranquila.

¿¡Me enamoré de un chico!? ||Subaru Sakamaki||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora