Al cerrar mis ojos

Padres (Continuacion)...

Después de la golpiza que me habia dado mi padre, no lo quería ni ver, no quería estar en esa casa, no quería sentir mas dolor.

Pero no fue la única vez que fue agresivo conmigo. Sentia que me odiaba pero no entendía sus razones, yo no decidí nacer, yo no decidí venir a este mundo y mucho menos escogerlo a él de padre. Fue en esos momentos que comencé a dudar de la existencia de Dios, del todopoderoso y del que se suponía estaba siempre para ti y que escuchaba mis noches de llanto pidiendole que todo cambiara a mejor.

Creo que el Diablo fue el que me escuchaba, porque todo se fue a la mierda y cada vez era peor. Me sentía estúpida porque nadie me rescataria del infierno que estaba viviendo, ni de las burlas que acompañaron mi dolor.

Habian pasado varios días y mi boca aun estaba hinchada y con pequeños coágulos de sangre en el interior de mis labios, no fui al colegio porque no quería burlas sobre cómo me veía.

Estoy acostada en mi cama, recostada del lado derecho de mi cuerpo, escuchando música, era lo único que queria hacer en estos días, comienzo a cerrar mis ojos mientras dejo que la canción llegue hasta el fondo de mi ser.

Comienzo a recordar cómo me golpeó aquel día, luego viene a mi mente recuerdos donde me golpeó por resbalarse de mis manos un jarrón de vidrio.

- Tienes las manos llenas de mantequilla acaso?! Para que agarras esa mierda que es de tu mamá?!
(Dice mi padre al ver lo que sin querer hice)

Se va a su cuarto y cuando regresa, regresa con una cinturon de cuero grueso en su mano. El corazón se me aceleró rápidamente, sabía lo que haría, mentalmente me obligaba a ser fuerte, a no llorar ni derramar una puta lágrima menos frente a él.

Me golpeó con la correa, o mejor dicho, con la hebilla de la correa, si, esa que es de metal, me golpeó con eso lo mas fuerte que pudo, me golpeó justo en el muslo izquierdo, inmediatamente apreté tan fuerte mi mandibula que por un instante pensé que quebraría mis dientes.

Me quede parada viendo como fue capaz de hacerme eso, por un jarrón de vidrio que no vale nada. Se supone que YO sería mas valiosa que un jarrón, pero me equivoqué.

Llega mi madre y ve lo que pasó, se coloca a mi lado y me comienza a revisar, yo la dejo ya que no puedo moverme.

- Que coño te pasa a ti?! Eres loco?! Como le vas a pegar con eso?! Mira como le dejaste la pierna!!!!

Al escuchar eso de mi mamá, bajo la mirada para ver que tanto fue el daño que hizo esta vez el que es mi padre. Cuando veo lo que dejo en mi piel me quedo en blanco.

Un horrible moretón, otra marca para la lista

Me fui a mi cama, revise de nuevo mi muslo para verificar que es real, Dios!!!! Duele, duele tanto, ya no pude aguantar mas, lloré, llore tanto hasta quedarme dormida. Cada vez que hacía algo que a mi padre no le gustaba, me golpeaba, ya sea con tu cinturón o con su mano, pero jamás lloraba frente a él, por mas duro que me golpeaba no solté una lágrima, quería que darle a entender que sus golpes no me dolían, aunque realmente dolia como los mil demonios, simplemente mi orgullo no dejaba demostrarle a él, a mi padre, lo mal que la pasaba.

Marcas en mi cuerpo por el cinturón y sus manos fue lo que me quedaron de recuerdos en mi niñez. Escucharle decir que no sirvo para nada, que parezco estúpida, gafa, mongólica, escuchar sus gritos, sus insultos, toda esa mierda que un hijo no debería de escuchar, comenzaron a quedarse grabados en mi cabeza.

Comienzo a abrir mis ojos lentamente...

Me coloco boca arriba, mirando el techo, intentando comprender que he hecho mal, intentando buscar alguna excusa  para haber merecido cada golpe. Mi padre no fue agresivo solo conmigo, también lo fue con mis hermanos, nos pegaba tan fuerte que nos dejaba la marca completa de sus manos en nuestros cuerpos. Pero sentia que conmigo fue peor.

Fue difícil para mí necesitar de un padre amoroso aunque no lo era, solo recibi de el desprecio. Nunca me felicitó por mis buenas notas, nunca fue a verme practicar natación, y si se preguntan, si, practique natación por problemas de salud.

Bueno en que estaba? A si, fue difícil para mi que mi padre me negará el cariño que merecia, y no solo eso, me hacia sentir que estaba demas en esa familia.

Cada dia que pasaba me hundía mas y mas en la depresión, causando pensamientos nada bonitos, lo peor es que comencé a dañarme, dañar mi cuerpo.

Me siento como la mierda por las cosas que hice, ya nada empezaba a importarme, todo comenzaba a darme igual porque cada dia que pasaba me mataba yo misma sufriendo en silencio...

Por favor regalenme una estrellita 🌟 y dejen en los comentarios que tal le pareció este capítulo. Voy a intentar ir alargando el contenido de cada capitulo, o que piensan uds?.

Nos leemos en el proximo contenido 💕