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Despertar después de un accidente , (en este caso de un maldito ataque por aquel psicópata) no es bonito, ni cómodo , nisiquiera un poquito agradable.

Nadie se despierta con una sonrisa cuando lo levantan de la comodidad de una cama. De la feliz ignorancia que produce el estar dormido , inconsciente ,profundo en la oscuridad. Y sí lo hace, seguro que esa persona no es de éste mundo.

El dolor en mi garganta se hizo presente cuando me queje al removerme en la cama. Tenía una lija por esófago.

Me moví incomodo. Todos mis huesos tronaron cuando me estire y mis músculos agarrotados se tensionaron.

Esto era una real mierda. Tenía un genio de mil demonios.

- maldito sol - susurré girando mi cuerpo. Pero algo me hizo abrir los ojos de golpe. ¡Y no ! No era una linda cabeza de rizos , tampoco una cálida mano.¡ Nada de esas mierdas ! Era un maldito pie frente a mi cara. Una pata enorme .

-¿Pero qué ?- toque hasta con terror uno de sus dedos. Y seguí subiendo mi mirada a la pierna a la que pertenecía aquella extremidad. Y luego al tronco y todo el cuerpo, dueño de esos miembros. Sentado sobre un incomodo sofá, con la cabeza colgada a un lado. ( Eso iba a dar un dolor infernal de cuello ) con sus brazos cruzados en su pecho y las piernas estiradas sobre mi cama. Dado así que desde mi posición lo primero que veía eran sus piernas. Estaba el alfa durmiendo profundamente.

Realmente profundo.

-¿Qué hace aún aquí ?- susurré sin poderlo creer, no tenía explicación razonable para su presencia ,y menos para sus atenciones. No habíamos quedado bien cuando me fui de su aldea. Nisiquiera habíamos hablado ni puesto en algún acuerdo.

Y pese a todo eso , él estaba aquí .

-¡Cristofer !- lo llame suavemente. Sí seguía durmiendo así , iba a tener mil dolores.

El niño lindo se estiró con pereza y su pie quedó estampado en mi cara. ¡Si genial ! Si ya tenía mal humor. Esto acababa de joderme.
Me entró esas ganas malvadas de tirarlo de esa silla de un golpe.

Pero todo quedo olvidado cuando lo ví suspirar con pereza e hizo un mohin con su boca antes de acomodarse en otra posición y seguir durmiendo.

Sonreí. Cristofer era demasiado tierno, joven , agradable y aún siendo un alfa , no siempre lo demostraba con su presencia. Todos podían sobrevalorar ese rostro. Pero su tenacidad y carácter contaban un cuento muy distinto.

-¡Hey ! ¡Cristofer!- esta vez lo llame un poco más fuerte. Sentí como mi voz sonó rasposa y forzada.

Los ojos del alfa se abrieron de momento ,casi asustado. Ví que el lobo pensaba levantarse , así que lo detuve .

-hey calma... No pasa nada grave- le dije suave.

- matthew ¿Cómo te sientes ?- me preguntó sacando sus graciosos pies de mi cama. Se acomodó en la silla.

- bien ...en lo posible. Me duele todo , pero es soportable. ¿No sabes si hay agua por ahí ?- le pregunté , tratando de levantarme .

- si, si , en la otra mesa de noche, espera te la alcanzó- se ofreció de inmediato , levantándose y dirigiéndose a una pequeña mesa que había frente a la cama.

El vaso de agua fue puesto en mis labios en segundos y la frescura inundó mi ser.

- ¡Ay! Jamás me supo tan delicioso un vaso de agua - susurré mirando a Cristofer. El hombre estaba más serio que de costumbre. Aún así no despegaba su mirada.

-¿Todo bien alfa ?- le pregunté en medio una sonrisa.

Cristofer cruzo sus brazos antes de negar y sonreír.

SilencioDonde viven las historias. Descúbrelo ahora