Capítulo 6

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Jayden

Luce espléndida recién despierta y con ese nivel de histeria. Esa melena rubia, con esos ojos turquesa hacen que no me canse de mirarla. Lleva puesto un corpiño rojo, que combina con su braga. La deseo tanto, pero no puedo creer que me hay creído capaz de aprovecharme de su estado.
La tuve que obligar a que me escuche, porque no podía dejar esa impresión que ella habia obtenido sobre mi.

Me dio cinco minutos para poder explicarle que soy todo menos un degenerado.

Después de que me haya insultado en todos los idiomas y que hizo dos fondos blancos de vodka, veo como se desploma en el sillón.

La gente se comenzaba a ir. Sus amigos, el colorado y la chica de pelo rosa suben a una habitación de la mano. El chico con el que estaba hablando anteriormente, ligó con una morena y por lo que entendí se fueron a un motel. Y el chico del Range Rover, que por cierto estaciono en mi jardín y rompió unas plantas que cuestan más que su camisa blanca, salió con un grupo de chicas hacia afuera.

Yo seguía en la misma posición, mirando como dormía despatarrada en el sillón, que no me dí cuenta que se hizo las 5 de la mañana, y que todos ya se habían ido, a excepción de algunos tipos que yacían inconscientes en el piso de mi living.

El impulso de protegerla fue más fuerte que yo, no la podía dejar sola allí. Así que puse una mano en sus piernas y otra en su cuello, para poder levantarla  y la subi por la escaleras, hacia mi habitación. Ella rápidamente se agarro de mi cuello. Lo que por una extraña razón hizo que se me acelerara el corazón.

La acosté en mi cama, y cuando la estaba por dejar, me toma del brazo para que no me vaya. No se si era por el alcohol, o porque en verdad necesitaba alguien que esté a su lado, pero a pesar de que sea el mismo tipo con el que tuvo dos discusiones en menos de un día, ella me hizo quedar.

La deje dormir, y luego, ya cuando despertó no puede evitar hacerle una broma, provocando su odio.

Cuando termino de explicarle lo sucedido aquella noche, ella sigue mirandome con desconfianza en sus ojos, agregando:

-Así que ahora eres un príncipe, que me rescató de la torre y me llevó a su habitación, y me dio un beso en la frente, para luego galopar en su corcel?- No pude evitar largar la carcajada que me provoco su tono sarcástico.

-Tienes una gran imaginación, preciosa- Pone los ojos en blanco

-Bueno, ya pasaron tus cinco minutos. -Dijo-  Ahora me vas a dejar irme antes que mi madre venga en helicóptero a buscarme.

-Con mucho gusto mi lady-hago una reverencia para ver como se enfada un poco mas y le abro la puerta, robandole una sonrisa. Se despide asintiendo con la cabeza. Es muy orgullosa, pero antes de que pudiera perderla de vista, le grito.

-¿COMO TE LLAMAS?

se da vuelta y no me responde, me sonríe, y sigue caminando.

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Foto de Julia(dove Cameron)en multimedia

Amores de los que duelenDonde viven las historias. Descúbrelo ahora