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❝¿Una cita?❞
Suelo pensar en ti cada mañana al despertar.
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—¿Te han dicho lo parecida que eres a tu padre?
Hikari lanzó el kunai que sostenía en su mano hacia el árbol que tenía en la mira dando en el blanco antes de mirar a su amigo.
—Tu que sabes de mi padre. -dijo mirándolo con el ceño fruncido
—Lo que todo Konoha sabe, que fue un gran ninja, un genio y que no tenía una personalidad muy bonita... como la tuya.
—¡Que tratas de decir Daiki! Si no te gusta mi personalidad simplemente no deberías hablarme.
—Enserio que eres como el Hikari.
El enojo era evidente en el rostro de la Hyuga, sus manos se cerraron formando puños y unas pequeñas venas se formaron a los lados de sus ojos. No le gustaba que hablaran de su pabre aunque ciertamente lo que le decían era cierto.
La mirada aperlada de la Hyuga puso nervioso al muchacho, hacer enojar a Hikari era demasiado peligroso. Además de ser ágil en batalla tener el byakugan la hacía más peligrosa.
—Hey, tranquila no te pongas así. -dijo tomándola por los hombros con una sonrisa- Me gusta como eres, Hikari Hyuga.
Los ojos de Hikari volvieron a la normalidad y no pudo evitar sonrojarse al sentir el rostro de su amigo tan cerca.
—¿Quieres almorzar conmigo? -propuso el
El corazón de la Hyuga se aceleró y sus manos comenzaron a desprender un poco de sudor debido al nerviosismo, como solía pasarle muy seguido a su madre.
—Quedé con Sakura para aprender algunos jutsus médicos, lo siento. -dijo rápidamente la chica alejándose de su amigo- De hecho, se me hace tarde. Adiós.
