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Al pasearse por la recepción del hospital, Jooheon notó que había menos personas de las que esperaba. Revolvió su cabello, sin saber qué hacer. Pues en los últimos días, recordó que antes del accidente y durante mucho tiempo, tal vez desde que estaba en la secundaria, iba a visitar a su madre; pero nunca se acercaba a ella, no dejaba que esta lo mirara.

No recordaba con exactitud porque lo hacía, tal vez por miedo a que esta lo rechazara. Pero, últimamente se sentía tan vacío, que se animó a presentarse ante ella, pues creía que una decepción o un rechazó más no dolería tanto. No solo eso. Ya había pasado poco más de un mes; cuando dejo a Changkyun pensó que dejaría de estar tan desencantado de la vida misma, que dejaría de levantarse pensando que todo era una mierda. Pero no fue así. Se sentía peor incluso. Estaba en un lugar, el que sea, pasándola relativamente bien, y luego todo se jodía aun más cuando se encontraba a si mismo deseando que Changkyun estuviese ahí.

Se sentía la persona con menos sentido del mundo.

Realmente esperaba que ver a su madre le hiciera sentir mejor. Aunque igual se sentía nervioso, pues que él recordara la última vez que habló con ella, no tenía más de ocho años.

Preguntó en la recepción por ella, y al decir que era su hijo, le dijeron que tomara asiento y esperara un poco. Tenía un ligero temblor en las manos, las empuñó en un intento de controlarlo.

... "Hazlo por mí" le dijo a Changkyun en la fiesta de graduación, cuando después de preguntárselo, este le contestó con una mirada de obviamente no quiero bailar contigo. Changkyun le dijo que estaba seguro que nadie en el instituto sabia que era gay, y quería que siguiera así, sin importar que esa iba a ser la última noche que miraría a todos esos idiotas. No quería que se fueran con una idea equivocada de ellos dos.

Pero Jooheon no tuvo que insistir, pues bastaba con dedicarle una mirada significativa y sonreírle, para que, a pesar de su evidente nerviosismo y su mal humor, las trémulas manos de Changkyun aceptaran las suyas...

Jooheon esbozó una pequeña sonrisa, sus manos habían dejado de temblar un poco al recordar esa noche. No habían bailado como una pareja, sino como simples amigos a quienes no se les antojaba bailar con nadie más. Uno al lado del otro, haciendo el ridículo, pero sin desperdiciar ni un tan solo segundo preocupándose por ello.

Esos pequeños recuerdos que antes no poseía lo estaban matando.

- ¿Jooheon-ah? – el aludido alzó la vista al escuchar esa voz. Su madre estaba enfrente de él, mirándole como si estuviese apunto de llorar. Jooheon, confundido, se incorporó solo para ser abrazado efusivamente – ¿Donde estabas? Hace casi tres meses que no vienes a visitarme, tampoco llamaste, simplemente desapareciste... pensé que te había sucedido algo... ¿Dónde está Changkyun-ah? ¿No vino contigo?

Jooheon frunció el ceño, confundido, mirándola fijamente, pues no entendía nada.

- Yo...Nosotros tuvimos un accidente – La preocupación de la Sra. Lee se multiplicó por mil ante la respuesta de su hijo – Tranquila, estoy bien – por lo menos físicamente. Jooheon la sujetó por los hombros, sonriéndole, antes de abrazarla – No fue tan grave...solo...yo lo olvide todo.

De verdad había creído, que de la única persona que había olvidado absolutamente todo, era Changkyun, pero al parecer no era así. Pues según lo que su madre decía antes del accidente, él (acompañado por Changkyun) la visitaba casi todos los días y cuando no podía hacerlo, llamaba.

Le contó a su madre (quien escuchó entre lagrimas y pequeños espasmos) todo lo que había sucedido en los últimos meses, el accidente, que no recordaba quien era Changkyun; también mencionó al doctor Ilhoon y el como este manejo su caso; por último, le contó que lo de Changkyun y él (porque de alguna forma u otra su madre sabía que estaban saliendo) no había funcionado al final.

It's Not Working ❥ JooKyunDonde viven las historias. Descúbrelo ahora