Nunca te valore

¿Relación unilateral?

Milo

Una tarde como cualquier otra me encontraba junto a mi persona más preciada, ambos nos encontrábamos descansando en un pequeño y cómodo sillón en la casa de Acuario, aunque Camus se encontraba recostado en el sillón con su cabeza en mi regazo. Mientras, yo me entretenía jugando con su suave y larga cabellera azulada, cuando de repente le pregunte:

-Oye, Camus ¿en serio me quieres?

-Ya vas a comenzar con tus preguntas tontas de nuevo, siempre tienes que arruinar todo con tus cursilerías. -Me respondió como siempre de manera cortante mientras se sentaba.

-Para mí no es una cursilería, solo quiero saber si de verdad me quieres, puesto que desde que empezamos a salir no me lo has confirmado o negado, de hecho, ni siquiera siento que estemos en una relación. Dime, ¿de verdad estamos saliendo?

-Si con eso vas a dejar de molestar, sí estamos saliendo ¿contento?

-Sabes, algunas veces me gustaría que fueras menos cortante conmigo, esto me comienza a molestar.

-Pues si te molesta no hagas preguntas estúpidas.

-Tu actitud me está hartando, hay veces que simplemente quisiera largarme de aquí. -Le dije un poco ofendido por su actitud.

- ¿Acaso te estoy deteniendo?

Con toda la dignidad que pude me levanté y conteniendo mis lágrimas me dirigí a mi casa, pero cada escalón que bajaba me sentía incapaz de llegar hasta la octava casa, que sin saberlo me tiré en el suelo de la casa de Sagitario, y como hace años que Aioros no está, la casa estaba vacía.

Me senté contemplando la vista que ofrecía aquel lugar y llorando me preguntaba una y otra vez si valdría la pena seguir con Camus, ya que, si soy totalmente sincero esta relación me está matando, aunque yo ame a Camus, ya no soporto el hecho que él sea incapaz de hacer algo lindo por mí, a pesar de que yo doy todo por él.

En medio de mi llanto, alcé la cabeza y vi la sombra de Shura de Capricornio, quien se dirigía hacia mí. Al principio pensé que burlaría de mi al verme en tal situación deplorable, pero en vez de eso solo se acercó con una increíble ternura y delicadamente seco mis lagrimas con las yemas de sus dedos.

- ¿Qué pasa Milo? ¿Por qué lloras?

-Shura, ¿acaso estoy mal al querer confirmar los sentimientos que alguien tiene por mí? -fue todo lo que pude preguntarle, ya que, me sentía incapaz de hablar.

-Déjame adivinar Camus ¿verdad?

-Simplemente siento que Camus no me valora, a veces creo que solo está conmigo porque yo lo obligue. No siento que esta relación sea real, que es algo que yo quiero, pero Camus no, y yo no quiero que la relación sea unilateral.

-Créeme Milo, nadie quiere una relación unilateral -me respondió mientras acariciaba mi cabello.

Él seguía abrazándome y tratando de consolarme, cuando me sentí mejor, me dispuse a dirigirme a mi casa. Le agradecí a Shura por su apoyo, cuando de repente me beso.

¡Sí Shura de Capricornio me beso! No supe cómo reaccionar, así que solo me dirigí a mi casa sin hablar y sin voltear atrás.