Era su casa. ¿Por qué esos malditos seres se habían metido a su casa? Si pudiera hubiera bautizado aquella tierra como OMAR 2. Lo hacía sentirse cómodo. Lo hacía sentirse en casa. Pero entonces aparecieron estos seres, mitad hombre mitad pulpo con partes de escorpión. Tan solo con verlos uno se quedaba petrificado de terror.
Pero Omar era fuerte. Siempre había sido fuerte. Había estado en una guerra y nunca se había acobardado. Pero estos seres eran diferentes. Era como si los malditos los hubieran estado esperando. Era como si esta galaxia llamada ANDROMEDA no quisiera visitantes de otro lugar. Como si cada ser estuviera destinado a vivir en su propia galaxia, y aquellos terribles seres fueran los vigilantes del universo. “tú no puedes salir de tu galaxia” parecían decir con cada movimiento.
Y Omar los odiaba. Junto a su grupo de 4 personas habían logrado acabar con varios de ellos. Los malditos los habían atacado por la espalda y habían engullido a uno de ellos. Pero su respuesta fue oportuna. Como siempre Omar llevaba su rifle de pulso M41.
Una serie de disparos ahuyentó al primer pulpo. El siguiente no huyó, por lo que pudieron acabar con él. Cuando llegó el tercero ya estaban preparados. En formación de rombo cada uno con un arma acabaron así con 5 de ellos.
- Debemos volver a la nave. Allí estaremos seguros.
Omar como líder del grupo decidió ir a la vanguardia. La nave no estaba muy lejos. Apenas algunos pasos más. Deberían ser rápidos, antes que llegaran más pulpos.
- Muévanse rápido, tenemos que llegar.
De repente, un gran zumbido se extendió a lo lejos. Aparentemente dentro de la nave. Omar se detuvo. Hubo un pequeño estruendo y una gran explosión surgió del área F, destinada a la experimentación. La explosión fue tan grande que la nave se tambaleó. Por un momento pareció resistir, pero un segundo después comenzaba a derrumbarse.
Omar cayó de rodillas. Acababan de perder su única vía de escape. Habían terminado con varios de esos pulpos pero de nada valía si no encontraban un refugio pronto.
Oía a lo lejos sus ronroneos. Venían más de esos pulpos. Se acercaban poco a poco. Se acercaban por todos lados. Omar examinó su arma rápidamente. Estaba dispuesto a luchar. Pero… la munición. Había dejado el resto de la munición en la nave ¡Malditos! ¡Malditos seres! Nunca más volveré a la tierra.
- ¡MALDITOS! – Fue el último grito de Omar. Y la última bala que tenía en aquel rifle M41 terminó incrustándose en su cerebro. Prefiero morir así pensó Omar antes de apretar el gatillo.
Luego todo se hizo negro.
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EL ULTIMO VIAJE
Science FictionDescubre la fantastica aventura de la tripulación del HORIZON en el primer viaje tripulado fuera de la Galaxia.