Estaba el androide frente al tablero de Ajedrez, el hacia un movimiento con piezas blancas, se levantaba de su asiento recorría la distancia entre la mesa y se sentaba en la silla opuesta a mover las piezas negras: ''JAQUE MATE!'' se decía así mismo, dibujaba una ligera sonrisa entre sus mejillas de plástico y acomodaba las piezas de nuevo.
Tres horas después; seguía el androide frente al tablero, el hacia un movimiento con piezas blancas, se levantaba de su asiento recorría la distancia entre la mesa y se sentaba en la silla opuesta a mover las piezas negras, esta vez con torre a h5: ''JAQUE MATE!'' se decía así mismo, dibujaba una ligera sonrisa entre sus mejillas de plástico y acomodaba las piezas de nuevo.
Pero esta vez se detuvo, había perdido la cuenta de cuantas partidas jugadas y el propósito de su existencia, entonces recorrió la habitación con la mirada y encontró una puerta semi abierta, había herramientas, así que se decidió ir a echar un vistazo, adentro habían partes y piezas que el conocía, brazos, piernas y circuitos, entonces el androide tuvo una idea...
Dos años después; Estaba el androide frente al tablero de Ajedrez, el hacia un movimiento con piezas blancas, esta vez sentado en la silla opuesta, un androide mas hermoso y cálido, con la inocencia de sus primeros movimientos, movía las piezas negras, en el siguiente turno el primer androide canta: ''¡JAQUE MATE!'' de forma violenta y feliz, dibujaba una ligera sonrisa entre sus mejillas de plástico y acomodaba las piezas de nuevo.
Tres horas después; seguía el androide frente al tablero de Ajedrez, el hacia un movimiento con piezas blancas, sentado en la silla opuesta, el androide mas hermoso y cálido, pero ahora con mayor dedicación, mueve las piezas negras y con caballo f6, canta: ''¡JAQUE MATE!'' de forma violenta y feliz, dibujaba una ligera sonrisa entre sus mejillas de plástico y acomodaba las piezas de nuevo.
''¡JAQUE MATE!'', ''¡JAQUE MATE!'', ''¡JAQUE MATE!'', ''¡JAQUE MATE!'', durante 3 días seguidos, el primer androide no vio ninguna, entonces por primera vez sintió aquello que había sentido su padre alguna vez, frustración, golpeo la mesa y tiro las piezas y en un reproche su cabeza desprendía tornillos y humo hasta que en un click la luz de sus ojos desapareció y y su cuerpo cayo inerte al lado de la mesa.
El androide nuevo se levanto de su asiento y acomodo las piezas, y al igual que su antecesor; hacia el primer movimiento con blancas, se levantaba y recorría la mesa para jugar con las piezas negras, sin saber el por que de su propósito...
... A un lado de la mesa del tablero, a unos cuantos metros yacía el cadáver de una persona, con su bata de científico, un anciano al parecer, con un libro de Ajedrez a su izquierda, un arma en la mano derecha y una bala en su cráneo, y claro, una cara de frustración.
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Historias Cortas Para Una Larga Noche.
Misteri / ThrillerAntología de historias cortas. Recomendadas para antes de dormir, justo en donde cobraron vida.