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Martina Simonet

-Éste es el último ataque chicas, tienen que dejarlo todo, vamos a jugar con 7, hagan el cruce de pivots y definición de la lateral izquierdo, 10 segundos tienen- dijo nuestro técnico y le di un sorbo al Gatorade- Suerte, especialmente para vos Martina- me miró, asentí y juntamos nuestras manos en el centro.

-Un esfuerzo más, si no sale la jugada tratemos de conseguir la falta directa, pero nosotras podemos- habló Victoria, la capitana.

-¡Dale, carajo!

-¡1, 2, 3!

-¡Ferro!

Fuimos a la cancha y esperamos la orden del árbitro.

-Suerte, Martu- le sonreí sin mostrar los dientes a Victoria- Vos podés.

El árbitro dio la orden y movimos la pelota, mis compañeras empezaron el cruce y me fijé rápidamente en el reloj.

5 segundos.

Corrí cuando mi compañera tenía que darme el pase, con éxito me lo dio y con un último salto, lancé la pelota y después mi cuerpo tocó el piso.

-¡GOL!- se escuchó en el estadio y la chicharra sonó dando por finalizado el partido.

Sonreí y dejé que mis ojos se llenen de lágrimas.

Éramos campeonas.

-¡SOS UNA GROSA!- dijo Sofi y se tiró encima mío- ¡TE AMO!

-¡TE DIJE QUE IBAS A PODER, PELOTUDA!- reí al escuchar a Victoria

Sentí más peso y escuché muchas felicitaciones acompañadas de puteadas. Todas se levantaron y me ayudaron, nos pusimos en ronda y empezamos a saltar.

-¡DALE CAMPEÓN, DALE CAMPEÓN, DALE CAMPEÓN!- cantábamos y nos abrazábamos.

Salí de la ronda y busqué a mis hermanos y amigos. Al verlos corrí hasta ellos y abracé a cada uno.

-¡Sos la mejor!- dijo mi hermano, Diego, al abrazarme.

-¡Felicidades Martina!- me abrazó, Sebas mi otro hermano y después Pablo, el tercero.

-¡Capa!- besé la mejilla de Pablo.

-¡Viste que sos una grosa!- Leo me abrazó con fuerza - No sabes lo que sufrí, boluda- reí y me separé.

-¡Muchísimas felicidades, Martu!- Anto me abrazó.

-Gracias, Anto.

-¡Siempre nos hacen lo mismo! ¡Sufrimos hasta los últimos segundos!- solté una carcajada al escuchar a Gio- Un partidazo te mandaste- besó mi frente y me abrazó.

Saludé a los demás y corrí hasta mis compañeras para seguir festejando.

(...)

El momento de la premiación llegó y estábamos todas ansiosas.

-El premio a la jugadora revelación de éste año va para... ¡Martina Simonet!- abrí mis ojos sorprendidas y las personas aplaudieron.

¿Yo?

-¡Bien ahí, Martu!- gritó una de mis compañeras.

-¡Dale boluda, subí!

Subí al escenario y con una sonrisa recibí el premio. Posé para algunas fotos y bajé. Sinceramente pensé que éste premio se lo iba a llevar Camila, la jugadora de River.

-El premio a mejor arquera va para... ¡Clara Fernández!- aplaudí y grité cuando mi compañera subió al escenario.

-¿Cuántos premios faltan?- preguntó Sofi y me encogí de hombros.

-Falta el de mejor jugadora y el de la goleadora, acá presente- Flor me abrazó por los hombros.

-Tremenda campaña te mandaste- habló Sofi y sonreí.

-El premio a la goleadora del año, con un total de 78 goles a lo largo del campeonato, va para... ¿otra vez?- miré al comentarista con una sonrisa- Está con todo ésta chica, ¡Martina Simonet!- reí y subí al escenario.

Recibí el premio y posé para algunas fotos, ésta vez me pidieron que me quede junto a Clara.

-Y el premio a la mejor jugadora del año, va para... ¿Es en serio esto? - miré confundida a Clara, que se estaba riendo- ¡Martina Simonet!- miré sorprendida a todos lados.

Mejor jugadora, tiene que ser un sueño.

Fui hasta el chico y reí por su cara.

-Estás on fire vos- reí de nuevo y le correspondí el abrazo.

Minutos después llamaron a las jugadoras de River para entregarles las medallas de plata y por fin llegó nuestro turno.

-Con la número cinco, jugadora revelación, goleadora del campeonato y mejor jugadora, paren, ¿algo más?- dijo de nuevo el chico y provocó risas- ¡Martinaaa....- dejó la frase el aire para que el público complete la frase.

-¡SIMONEET!- subí de nuevo a recibir mi medalla y esperar a la copa.

-Y por último, la capitana, ¡Victoriaa...

-¡CRIVELLI!

La Maga subió al escenario y recibió la copa para luego posicionarse entre nosotras, movimos nuestras manos ansiosas.

-¡TRES!

Victoria levantó la copa y el predio estalló.

Me pasó la copa y la besé, la levanté y sonreí a más no poder.

Cumplí un sueño, salir campeona con mi club.

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