Capitulo 7. Dolor

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Los personajes le pertenecen a la grandiosa Rumiko Takahashi



- indica dialogo

"indica pensamiento"

"habla bestia interna"




Sesshomaru



Se desplazó con rapidez hacia el origen del aroma encontrando a Shinrin y a la miko en la habitación, está se encontraba en el suelo con el rostro ensangrentado y el yokai con una fusta apunto de golpear nuevamente a la miko, Yako no necesitaba ninguna explicación ante lo sucedido, tomo al yokai del cuello sosteniéndolo en el aire de manera que poco a poco sus garras se encajaban en la piel del yokai provocando que varias gotas de sangre corrieran entre los dedos de Seshomaru.

Su mente estaba completamente nublada, observaba como el yokai peleaba por zafarse de su agarre mientras rogaba por su vida pero ningún sonido llegaba a la mente del Daiyokai solo el sonido de las fuertes pulsaciones de su corazón enardecido, poco a poco apretaba el cuello del yokai aumentando la cantidad de sangre que era derramada por el yokai.

Deseaba hacer sufrir lo más posible al yokai por lo cual liberaba momentáneamente el cuello de su víctima para que tomara oxígeno y no perdiera la conciencia, provocando un mayor sufrimiento, quería que muriera lentamente entre sus garras pero la miko lo sujetó del brazo y fue cuando reacciono y logre escuchar que ella también gritaba

-SUELTALO SESSHOMARU-


Tiro el cuerpo de su víctima contra una de las paredes de la habitación y sujeto el brazo de la miko inmediatamente después, se encontraba sumamente molestó y el ver su cara con sangre asía que aumentara su furia, por lo que decidió curar aquella herida, comenzó a lamer el corte que tenia de manera brusca.

Su lengua se sentía rasposa en la piel de la miko además de que le causaba cierto dolor con lo que esta trataba de liberarse.

-Auchh me duele Sesshomaru- la miko con sus manos trataba de zafarse del agarre del Daiyokai

Era inútil el resistirse pues el Daiyokai paso de tomar su brazo a sujetarla por la cintura eliminando la poca distancia que existía entre los dos, mientras con la otra mano sujetaba el rostro de Kagome para tener libre acceso a su rostro

-no me detendré, te lo mereces por detenerme de matar a esa escoria-

Las lamidas dejaron de ser rudas para tener toque de sensualidad que aceleraban el corazón de Kagome y ocasionando cierto rubor en ella. Sus sentidos se agudizaron más y ya no solo su lengua la excitaba sino también el brazo en la espalda que la reclamaba celosamente elevando su adrenalina al máximo

-aaaaah Se-Seshomaru para por favor- La sensualidad con que la miko pronuncio el nombre del Daiyokai disipo el enojo de este para dar paso al deseo, aligero su agarre mientras observaba a la miko

Kagome dejo de forcejear para mirar fijamente al Daiyokai -Fue mi culpa yo tome la ave y la deje libre-

- cof cof si señor Sesshomaru cof cof dejo libre una ave muy valiosa- El Daiyokai nuevamente cambio de estado de ánimo, se encontraba en una montaña rusa de emociones entre la miko y el yokai.

Le hervía la sangre al escuchar la voz de esa rata pero no dejaría que culpara a la miko

-¿Cuánto por el ave?-

-Pues esa ave es invaluable señor, era el último Fénix, pero podría aceptar algo a cambio-

-Habla ya -

- Pues si está dispuesto a compensarme, con el ojo de Hakuchoo estaría saldada la deuda-

Le sorprendió mucho su declaración, "¿Cómo se atrevía a pedirme tal joya? y ¿cómo sabe él de su existencia?"

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