capítulo 2

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Escuchaba los gritos desesperados de mis padres y los médicos.
No entendía nada, mi pecho dolía tanto... Mi cabeza daba vueltas y mis ojos se abrieron dejando ver una luz, esa luz comenzó a tomar forma y todo a mi alrededor también... Trate de pronunciar palabras pero me di cuenta que tenía algo que molestaba mi garganta, noté que tenía un tubo en la garganta y mire a mi madre quien se encontraba a mi lado llorando tomando fuerte mi mano, mi padre al verme se levantó rápidamente y se acercó a mi tomando mi otra mano, y sonrió besando mi frente. El doctor al ser informado por una enfermera de que estaba en la habitación, vino rapidamente y pidió a mis padres que se retiraran un momento para su pudiera revisarme, una vez que terminó de hacerlo mis padres volvieron a ingresar.

-Doctor Mark ¿Qué es lo que tiene nuestra pequeña Lara?- Dijo mi madre tomando del brazo a mi padre.

-Bueno señor y señora les tengo una mala noticia. Al parecer los resultados de los estudios determinan que Lara sufre de un problema cardíaco que hace detener el corazón hasta un punto de simular la muerte por unos minutos. Esto puede llegar a causar la muerte de Lara sino es tratada de urgencia- Dijo el Doctor mirando nuevamente los estudios.

-¿Qué? ¿Nuestra hija puede morir? ¿Qué hay que hacer? ¿Por cuanto tiempo tiene que ser tratada?- Dijo mi padre tratando de calmarse y consolando a mi madre.

-Esta enfermedad se da en raros casos pero tiene cura. Poner un marca pasos el cual impedirá que el corazón se detenga o un trasplante de corazón. Pero debió al estado de su hija no podemos hacer nada ya que tiene heridas internas y podría morir si la operamos. Por el momento sólo nos queda esperar y anotarla en la lista de trasplantes- Dijo el Doctor mirando a mis padres

-Esta bien Doctor... ¿Cuanto tiempo tendrá que estar aquí?- Dijo mi padre aún algo nervioso y llorando.

-Hasta que sus heridas sanen, tal vez entre una semana o dos podrá ir a casa e volver a su vida pero con un poco más de cuidado. Por eso tendrán que tener a alguien que la cuide todo el tiempo- Dijo el Doctor abriendo la puerta de mi habitación.

-Esta bien Doctor muchas gracias. Les informaremos a todos- Dijo mi madre saliendo de la habitación junto con mi padre mientras lloraban.

Él Doctor cerró la puerta y se acercó, sonrió mientras le decía a una de las enfermeras que le ayudará a retirar el tubo de mi garganta. Luego de unos minutos, mi garganta ya se había acostumbrado y podía hablar con dificultad

-Bueno Lara ahora tienes que descansar todo lo que puedas así te recuperas lo más pronto posible y por favor mantente tranquila- Dijo el Doctor despidiendose y retirándose de mi habitación.

Trate de dormir pero no podía mi cabeza no me deja ya que en ella sólo daban vueltas algunas preguntas "¿Qué me pasó?" "¿Qué accidente?" "¿Por qué estoy aquí?" "¿Por qué me sucedio a mi?"...

El último latido...Donde viven las historias. Descúbrelo ahora