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A veces se sorprendía de lo rápido que pasaban los meses, desde que tenía a daiki el era un niño muy tierno y ya le estaban comenzando a salir sus primeros dientes ya que daiki cumplía los ocho meses de edad, ahora todo era una lucha entre izuku y los dientes de su pequeño, quien en busca de quitar aquella comezón lastimaba sin querer a su madre.
Era un día lunes, ya habían entrado a verano, y estaban a la vuelta de la esquina de volver a tener el invierno, izuku se encontraba dándole pecho a su pequeño ignorando el rotundo dolor que le acusaba.
-katsuki ven ven.—dijo moviendo su mano Katsuki se acerca y ve a Daiki dormido en el sillón. -
Era gracioso ver al bebé sin camiseta regordete y con aquellos pañales que le quedaban algo grande debido a sus muslos gordos.
-es tan lindo. —susurro el alfa para no despertarlo. —
-lo se.— susurro de igual manera el Omega sintiendo los brazos del más alto pasar por su cintura y besándole él ccuell, soltando una risa se da vuelva mirando encantado a su esposo.
-te amo Alfa. — el alfa sin poder evitarlo, siente sus mejillas calientes y sonrie levemente-
-yo también te amo.— Katsuki llena el rostro del pecoso con besitos delicados y llenos de amor. — te veo.
Por alguna extraña razón, desde que conocieron el significado de "te veo" en aquella película estadounidense basada en seres de un planeta llamado Pandora los cuales eran llamados navi, han utilizado esa frase más allá de los te amo.
-te veo. —Dijo izuku sonriendo levemente mientras juntaban sus frentes.
Un quejidos los saco de aquella burbuja, al mirar hacia atrás notaron unos ojitos rojos brillantes mirando con el ceño fruncido a su padre alfa, mientras intentaba gruñir y demostrar que el mandaba en la casa.
-oi a quien le gruñes mocoso insolente.—dijo katsuki mientras también le gruñia a su propio hijo demostrando la gerarquia. —
No era extraño que todos creían a daiki alfa, por sus actitudes y por el simple echo de ser muy apegado al hijo de los Kirishima, Akihiro.
-Dios mío ¡que les dije de gruñir!.— soltó izuku mientras iba a la cocina a prepararse algo de comer, amamantar a un ser le consumía todos sus nutrientes, al igual que las noches algo intensas de su esposo y el.
Cuando ya pudo comer algo, Suspiro y tomó a daiki lo llevó a su cuarto y le coloco ropa, había elegido una jardinera junto a unos zapatos, tomo las llaves y camino al auto junto con Kacchan habían decidido ir a visitar a sus amigos ya que Kirishima se encontraba enfermo y algo desanimado.
Ganaron a daiki en su silla de bebés y cuando estuvieron ya listos Katsuki prendió el auto y partieron a su hogar, se tardaron media hora en llegar ya que al ser fin de semana se generaban demasiados problemas en las carreteras, al Llegar katsuki se bajo mientras que izuku sacaba al niño de su silla quien no podía evitar estar algo inquietó.
Al momento de entrar al hogar, daiki estiraba sus brazos hacia akihiro, esperando ser visto por el bebé de 10 meses.
Estuvieron toda la tarde en la casa de kaminari y kirishima al llegar la noche decidieron marcharse más daiki no quería lo mismo, lloraba y pataleaba mientras que bakugou lo llevaba en sus brazos, se fueron a casa y apenas llegaron daiki callo dormido debido al cansancio de llorar, no pudieron evitar suspirar se alivio, mientras dejaban todo en el primer piso, y subían al segundo a descansar
El pecoso recosto a daiki en la cuna y el se fue a duchar luego de algunos minutos se coloquo la pijama estaba demasiado cansado, ver a los gemelos sumando a su pequeño cachorrito había sido una completa guerra, recostandose, no le dio ni tiempo a esperar a su marido, y callo en brazos de la diosa luna para recobrar energías para el siguiente día.
Últimamente estaba demasiado cansado, y muy sensible, debería ir al doctor por si acaso.
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