END OF THE DAY ||A.M||

CAPÍTULO 57

— ¿Qué significan tus tatuajes? —pregunta mientras pasa la esponja de baño por mi espalda.
— Este —señalo el tatuaje— es uno que nos hicimos junto con mi manada, algo que nos representa y nos une a todos. El que está en mi espalda baja es uno que me hice estando ebria y por una apuesta, pero me gustó el diseño y no lo retiré —digo y puedo escuchar una ligera risa de su parte— el último me lo hice en memoria a mi madre —finalizo.
— Nunca te hubiera imaginado así —ríe— si hace años me hubieran dicho que te harías un tatuaje me reiría en la cara de esa persona.                                                                                                              — Tampoco pensé que lo haría alguna vez —me sincero— tenía miedo, pero ese miedo se fue cuando quise que algo que representara mis lazos con la manada estuviera presente en mi para siempre, y fui yo quien sugirió hacernos el tatuaje.                                                                                                Ambos nos miramos y no puedo evitar sonreír cuando lo veo sonrojarse.
— ¿Qué significa el tuyo? —pregunto tomando su brazo.
— Poco a poco lo irás descubriendo —ríe— ¿Qué crees que significa?
— Lo único que logro descifrar es el numero 13, y si mi memoria no me falla, ese era tu numero de la suerte.
— Acertaste —sonríe y besa mi cabello— pero es hora de sacarte antes de que te arrugues como una pasita.
— Me gustaría ser una pasita —digo haciendo que ría.
— La Chloë normal regreso —dice mientras me envuelve en una toalla.
— Si, ya puedes ir a hacer tus cosas yo aún tengo que vestirme y peinarme —digo y frunce el ceño.
— ¿Quién dijo que me iría? Yo voy a vestirte y peinarte —dice y me carga— es lo menos que puedo hacer.
— Estoy bien, puedo hacerlo —digo y niega con la cabeza.
— No pienso quedarme meses en abstinencia así que debo ayudarte —dice y me sienta en la cama.
— Que considerado —ruedo los ojos y me tiende la ropa interior.
— Yo siempre, mi amor —dice en cuanto me guiña un ojo. Lo veo alejarse y sacar unos jeans y una hoodie roja.
— Gracias —digo mientras tomo la ropa y me la arrebata.
— Te dije que yo lo haría —dice y toma mis bragas— Y lo haré.
— Yo puedo sola —digo tomando mi sostén— no quede lisiada.
— No, pero quiero hacerlo —me resigno, y mientras subía mis bragas recorría mis piernas, pero logré empujarlo antes de que me hiciera perder la cordura.
— Vas a matarme —digo y subo del todo mis bragas— si fuera la Chloë que conociste en el bachiller, estuviera muerta antes de que pudieras terminar la primera vez.
— Eres una exagerada —rueda los ojos— no quiero matarte, y si fueras esa Chloë ni siquiera me hubieras dejado tocarte.
Al escuchar esas palabras recuerdos que había reprimido salen a la superficie, causándome algo de molestia.
— Tenemos que investigar —rápidamente termino de ponerme la ropa y me pongo de pie.
— ¿Hice algo mal? —pregunta nervioso.
— No, solo me preocupa el que me estén buscando, no me relacione mucho con vampiros y cuando lo hice fue de forma amistosa —respondo y lo abrazo, obteniendo un beso en mi coronilla.
— No te preocupes, yo te protegeré con mi vida de cualquier cosa —dice y toma mi mano— pero se que me mientes.
— Me invadieron los recuerdos, es todo, recordé cosas malas y me afectó —digo y suspira.
— ¿Recordaste lo que hice?
— No, fue algo más —susurro y entramos a su despacho donde se encuentran Tony y Antony.
— Hola chicos —saludo a ambos con una sonrisa, que al instante es correspondida.
— Hola Chloë —dice Tony— ¿Qué tal tu noche? —pregunta y Antony ríe.
— Se creen muy graciosos, el karma y la venganza existen amigos —digo y me acerco a todos los papeles qué hay regados en el escritorio— pero tenemos mucho trabajo por hacer.