CAPÍTULO 46

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Al estar transformados jugamos como dos cachorros, aunque a veces el juego se tornaba agresivo, pero así es la naturaleza de ambos lobos.
Ambos escuchamos un aullido, pero no cualquier aullido, es el de Abraham y sé que está molesto. Este resuena por todo el bosque y Antony de inmediato me mira.

– ¿Escapaste? ¿Por eso no te olí? –pregunta por el link.
– Abraham no me dejaría salir y mi loba lo necesitaba, tuve que hacerlo –respondo y comienza a mirar para todos lados.
– Aquí solo me podrán oler a mi, pero te verán y Abraham va a matarme, o a ambos.
– Lo siento –digo y escuchamos el crujir de unas ramas detrás de nosotros.
– Estamos muertos –dice y nos giramos para ver a un hombre musculoso de cabello castaño, ojos verdes y con algunos tatuajes por su cuello. La ropa cubre, pero estoy segura de que este baja por su pecho.
«Podría lamer todos sus tatuajes sin ningún problema» pienso y rápidamente me retracto.

— ¿Por que solo olemos a uno de ustedes? —pregunta acercándose— ¿Quién es el intruso?

Ninguno responde y Antony me mira suplicando que deje de ocultar mi olor, pero honestamente estoy tan asustada que me resulta imposible concentrarme en eso.

– Es un Alpha, estaba arreglando asuntos con Abraham –dice por el link.

— No me gusta esperar —gruñe— ¿Quiénes son?
— Mi Beta y mi Luna —escucho la voz de Abraham detrás de nosotros y sé que estoy muerta. Intento mantener la calma y mantenerme firme, pero no creo poder por más tiempo.
— ¿Por que no podemos olerla? —pregunta mirándome.
— Al parecer la pequeña Lunita quería escapar, pero tendrá que medir las consecuencias de sus actos —su voz suena diferente y se que no es él, es su lobo.
No lo pienso más y corro lo más rápido que puedo hasta llegar a mi bolso, escucho como todos me siguen, así que tomo el bolso entre mis dientes y corro hacia mi escondite, sin olor no podrán encontrarme.

Al llegar me escondo y una vez más vuelvo a ser humana, me cambio y salgo dejando de ocultar mi olor, a los segundos tengo a 3 grandes lobos gruñendo frente a mí.

— No iba a escapar —digo y cuelgo el bolso en mi hombro— solo quería libertad para la bestia pero no me dejas salir de casa, tuve que hacerlo a mi manera. 

Uno de ellos sigue gruñendo y sé que es Abraham.

— Además de que Antony estaba ahí para cuidarme, si no te llame a ti fue porque estabas ocupado, me voy a casa —digo y comienzo a caminar siendo seguida por ellos.

Caminamos por la manada y todas las miradas se dirigen a mi, no es normal que una persona vaya siendo escoltada por dos Alphas y un Beta.

Al estar dentro Sarah me da mi desayuno mientras que Antony y el Alpha se van con Abraham a su despacho.
— Gracias a la Diosa que estás bien —escucho la voz de Cora y me giro para verla junto a Jackson.
— No puedes hacer eso Chloë —dice Jackson y evito rodar los ojos.
— Supongo que vinieron a prepararme para el gran sermón que me dará Abraham, ¿no? —pregunto y tomo del zumo.
— Pues llegaron demasiado tarde —escucho la voz de Abraham y mi cuerpo se tensa— te espero en mi despacho —dice y me levanto de mi asiento.
— Suerte —susurra Cora cuando paso a su lado.
— Necesitaré más que eso —murmuro y veo a Antony dedicarme una mirada de Te lo dije.

Él y él Alpha salen del despacho y entro quedándome sola con Abraham.

Ahora solo un milagro podrá salvarme de esto.

END OF THE DAY  ||A.M||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora