Al acercarse vió que el hombre no iba a caballo sino que él era mitad caballo, era un centauro.
- Soy Quirón-Dijo.
A Jayden le pareció muy amigable su tono de voz, ya que, la cara no se le veía debido a que llevaba un yelmo griego.
-Buenas tardes-Dijo una mujer que pasaba.
Lo cual aunque sabía que era la niebla extrañó mucho a Jayden. Ya que al fin y al cabo no dejaba de ser un Centauro de tres metros.
- acompañadme-Dijo Quirón.
Quien salió trotando hacia un bosque cercano. Tras media hora corriendo llegaron a un claro al fondo del cual había una entrada señalada por dos columnas, bajo la cual había durmiendo un perro de tres cabezas, al que Quirón llamó Señorita O'Leary, quien al despertarse se sentó dócilmente, dejándolos pasar.
El claro era natural el hombre no había llegado, estaba lleno de plantas mediterraneas arboles de copa alta formando un bosque tan frondoso que no se veía el final era todo tan verde que cautivó a Jayden. El olor era natural y la hierba tan fresca que pensó que a lo mejor estav soñando. De repente vió a un grupo de chicas cuidando los árboles y abrazandolos. Thomas le explicó que eran ninfas.
Al entrar fueron directos a una Palestra donde los esperaban otros chicos de su misma edad y más mayores.
Thomas lo presentó al resto, tras esto, cada uno volvió a lo suyo. Jayden se fue con Thomas y sus amigos a dar una vuelta por el bosque.
Los amigos de Thomas le dieron una bienvenida bastante acogedora y tras un rato con ellos sintió que tambien eran los suyos. Tras el paseo por el bosque volvieron al campamento y un grupo de chicos que pertenecían a la cabaña de Apolo lo invitaron a jugar al baloncesto.
