¿Afrodita otra vez?

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Habia pasado mas de 2 horas despues de que desperte en mi suite, aun siento mis oidos zumbar y un cosquilleo en mis piernas, estomago y cabeza.

Estamos en una tienda llamada Blitzen's, solo ibamos yo y magnus, Leo se habia quedado para apostar, (¿no me preguten por que?) y Jason decidio quedarse patra conocer nuevas tacticas de batalla, aunque escuche Gunderson le decia "nuestra unica tactica es ver cuantas cabezas logramos decapitar antes de morir"

Y ahora me ven aqui, en una tienda de ropa.

-Hey Blitz -llamo Magnus- ¿Estas aqui?

En el camino, Magnus me explico que Blitzen es un enano mas alto y que la mayoria de los otros enanos, ya que no es del todo un enano, que es hijo de su tia Freya.

-Aqui estoy chico -dijo Blitzen antes de salir para recibirnos

Yo siempre me habia imaginado a los enanos como los del señor de los anillos, ya saben, todos bajos, con barba hasta la cintura y un aspecto no tan salvaje como el de Hefesto, y aunque ya me habian dicho que Blitzen no era del todo un enano, no esperaba que Blitzen estuviera increiblemente elegante.

-¿Que puedo hacer por ti? -pregunto

Aqui fue donde entre yo, contandole quien soy (solo lo basico), mi propuesta de matrimonio y ya saben, el resto

-Vaya -dijo Blitzen- pues felicidades, pero no puedo ayudarte.

¿Escuche bien?

-¿Como? Pero eres un enano

-Lo soy -concordo Blitzen- pero no soy un enano de forja, soy un sastre.

-¿Y no hay manera en que puedas ayudarlo? -dijo Magnus con un tono de suplica en su voz

-Hay una manera -murmuro Blitzen- ¿Tienes las medidas para el anillo?

-Eh......¿los anillos tienen medidas?

-Pues claro -dijo Blitzen- ¿creias que todas las mujeres tiene el mismo tamaño de dedos?

-Pues si

Blitz apreto el puente de su nariz y dio un largo suspiro- De acuerdo ¿tienes alguna foto con ella?

-No, para nosotros los griegos es peligroso

-¿No hay nada que tengas? Solo necesito echar un vistazo a sus manos y con eso esta listo 

-Yo puedo ayudar -dijo una voz femenina a nuestras espaldas y no pude evitar que un escalofrio recorierra mi mente.

Al darme la vuelta, al pie de la puerta de entrada, estaba Afrodita

-¿Usted es...? -inquirio Magnus

-Yo soy Afrodita, diosa del amor -dijo Afrodita y me sonrio en mi direccion- Bien pensado Percy, y dime ¿que tal tu estadia en el Valhalla?

-¿Usted me estuvo siguiendo? -pregunte tratando de no sonar descortes

-¡Por supuesto que si! ¿Creiste que Atenea y yo  no sentimos curiosidad? Ademas ¿por que crees que son invitados de honor?

-¿Usted hablo con Odin? -pregunto Magnus

Afrodita se volteo a verlo- Un hijo de Frey, se nota que es primo de Annnabeth, y eres muy mono, ya veo porque Alex esta enamorada de ti -dijo y las mejillas de Magnus se tornaron rojas

-Y si -presigui Afrodita- hable con Odin, solo tuve que decir que se trataba de una boda y acepto de inmediato.

-¿Y como dijo que puede ayudarnos? -inquirio Blitz

-Uhmmm un hijo de Freya -murmuro Afrodita- definitivamente tienes ese aire de Vanir, nunca entendi por que Freya preferia entablar...."conversaciones" con los enanos por las joyas si bien podia utilizar el embrujahabla -Afrodita sacudio la cabeza y aparto el tema con un ademan de la mano- Pero en cuento a como puedo ayudarlos...

En vez de seguir hablando, vi como lenntamente se transformaba por completo en Annabeth, en serio, si no fuera por que tenia varios rasgos diferentes cuando vino, hubiera jurado que era la Annabeth real la que estaba enfrente de mi.

Afrodita/Annabeth estiro la mano hacia Blitzen -¿Asi servira? -pregunto con el mismo tono de voz

-¿esta segura que asi se parece? -inquirio Blitz

-vaya que si -dije yo

Blitz solo tuvo que ver su mano por unos segundos para anotar algo en un papel

-Tendre que cobrar un par de favores, pero no te preocupes -me dijo Blitz- a mas tardar estara listo en dos dias

-De acuerdo -dijo Afrodita dirigiendose a mi- tus amigos ya estan esperando en la estacion de autobuses, yo me quedare con Blitzen, Annabeth ya ha de estar ansiosa de verte de nuevo, hasta pronto Percy -dijo antes de besarme.

No pude hacer nada, me quede estatico, sentia como mi cuerpo y mi mente trataban de procesar lo que estaba sucediendo en este instante, no supe cuanto duro el beso, pero lo que si supe fue que le correspondi y no tienen idea de lo sucio que me senti en ese instante.

-Por favor no vuelva a hacerlo -dije despues de que Afrodita se separara de mi

-Solo queria saber como besas, lo cual haces muy bien -dijo ella antes de quiñarme un ojo

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Magnus y yo habiamos acordado no decir nada, nos despedimos de llos amigos de Magnus y subimos Leo, Jason y yo al autobus, el resto del trayecto estuve en silencio.

Cuando llegamos al campamento busque a Annabeth, y efectivamente, estaba en su cabaña, agradaci a los dioses que estuviera sola en ese momento.

-Ah hola -saludo- no te oi entrar ¿Como estuvo la.....,?

No la deje hablar mas, me acerque a ella casi corriendo y reclame sus labios, ella tardo un poco en responder pero inmediatamente llevo sus manos a mi cuello, yo tome sus muslos y los alce, ella rodeo mi cintura con sus piernas y nos pegamos a la pared.

La besaba, olvidando el sabor de los labios de afrodita, los cuales no podia dejar de pensar duarnte todo el trayecto, me separ de su boca para empezar a besar su cuello y ella gimio, meti una de  mis manos en su camisa, trazando un camino de caricias en su espalda.

De reojo vi a un buho, en una rama baja, lo podia ver claramente atra ves de la ventana, cuando nuestras miradas se cruzaron y el buho inclino la cabeza.

Pude escuchar la voz de Atenea en mi cabeza diciendo "¿Pero que haces pequeño loquillo?"

Me separe de Annabeth, y vi como me examinaba con la mirada

-¿Estas bien? ¿Paso algo? -pregunto con el ceño fruncido- digo, no es que no me hubiera gustado, de hecho me gustaria continuar.

-No, no es nada -dije besando su cuello- solo que te extrañe, tuvimos que quedarnos en un hotel, ya era demasiado tarde para irnos

-Entiendo -dijo ella aun aferrada a mi cintura con sus piernas mientras acariciaba mi cuello trazando pequeños circulos- ¿las cosas salieron mal?

-Era un nordico -mentí- llegamos cuando una manada de lobos comandada por un gigante lo estaba atacando -bueno, eso era medio cierto- no llegamos a tiempo, pero habia una valquiria en la zona y lo recogio.Al menos eso quiero pensar.

-Lo siento -dijo ella- se que al menos pudo terminar en el Valhalla.

-Cierto -dije yo- tengo que irme estoy un poco cansado

-Claro -dijo ella bajando de mi cintura- ire contigo

-¿Segura?

-Claro -dijo ella y me susurro en el oido- y si no te sientes lo suficientemente cansado, podemos hacer algo mas antes de dormir

Sonrei, y mire de nuevo al buho que segui mirandome acusatoriamente, yo me encogi de hombros y le lance una mirada que claramennte decia "Lo siento, pero la verdad no lo siento"

Y Annabeth y yo nos dirigimos a mi cabaña tomados de la mano.

La Gran Fiesta del OlimpoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora