Obligado a enamorarse (parte 2)

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Tarea: tener una conversación con Gundam Tanaka - ¡INICIO!

"Oye, Tanaka, entonces... ¿cómo está el asunto?"

Bien. Buen comienzo. Casual, profesional, charla adulta. No hay espacio para ninguna conversación extraña sobre sexo animal o rituales demoníacos. Maldita sea, Kazuichi hizo que esta socialización fuera genial.

"Los dioses de este mundo me han mirado afortunadamente y me han otorgado éxito en mis esfuerzos comerciales".

Hm... si.

Sí...

Gundam Tanaka no tenía una idea literal de lo que era una conversación normal. Kazuichi sintió su cerebro gritar dentro de él, y deseó desesperadamente haber estado lo suficientemente borracho como para salirse con la suya gritando en voz alta. Desafortunadamente, dos vasos de plástico solo llenos de cerveza ni siquiera fueron suficientes para que Chihiro Fujisajki zumbara. ¿Qué mierda realmente estaba mal con este tipo?

La lucha interna de Kazuichi no pasó desapercibida para el otro, y Gundam lanzó un suspiro dramático puntuado por un giro de ojos. "Significa que va bien, mortal".

"... Oh. Uh-huh, si. Eso es genial."

Tarea: Tener una conversación con Gundam Tanaka - ¡FALLÓ!

Como si fuera una señal, Sonia se volvió hacia los dos hombres adultos, con una vacilación de travesura presente en sus ojos al verlos. Casi como si ella... supiera algo. Se mordió el labio inferior con los dientes mientras sonreía, moviendo el brazo con fluidez para unirlo con el de Chiaki. Maldita sea, ¿cómo lograron las chicas lucir impecables haciendo literalmente cualquier cosa?

"Chiaki y yo vamos a hablar con Mahiru y Saionji. ¡Fue muy agradable verlos a ustedes dos!" Les susurró, su tono era muy obvio de que a los dos hombres no se les permitía acompañarlos a la reunión de su club lésbico. No es como si Kazuichi quisiera unirse de todos modos. Probablemente iban a hablar sobre diseño de interiores y... cualquier cosa que les gustara a las lesbianas.

"Oh... bueno, sí, fue lindo verte a ti también, Sonia", dijo Kazuichi, ofreciéndole una sonrisa, haciendo todo lo posible para ocultar su horror por haber quedado a solas con el hombre del infierno. Literalmente, de ahí es de donde el tipo insistió que venía.

"Del mismo modo." Fue todo lo que Gundam replicó, cruzando sus brazos sobre su pecho mientras las dos chicas se despedían. Mientras observaba las formas en retirada de los dos, era silenciosamente consciente de la creciente tensión entre él y el hombre gótico. Bueno, es hora de escapar.

"... Entonces, me alegro de escuchar sobre el negocio, Tanaka. Fue... agradable hablar contigo", dijo, ya dando algunos pequeños pasos hacia atrás. Gundam solo volvió la cabeza y lo miró.

Y dio un paso en su dirección.

La mente de Kazuichi se apagó e inmediatamente retrocedió un paso por puro hábito, escuchando el crujido de la hierba bajo sus zapatillas de deporte. ¿Espera qué? ¿Cuándo se había vuelto tan silencioso? La música había disminuido mucho en volumen, dejando a los dos hombres de pie allí en lo que parecía un silencio sofocante.

Gundam simplemente dio dos pasos más hacia él. Kazuichi gritó en su cabeza como una niña sorprendida indecentemente por sus amigos. ¿Por qué diablos era el otro siguiéndolo? Mierda, tal vez Kazuichi lo había ofendido y ahora iba a patearle el trasero. Eso era justo lo que necesitaba para terminar esta noche.

Kazuichi empujó su suerte y dio un paso más hacia atrás, tratando de ver si el otro lo seguiría una vez más.

"Mortal, ¿qué estás haciendo?"

Deja que tu cuerpo hable (Traducción)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora