At First Sight [SF9, Taeyang y Tú]

✧9✧

—¿De que hablas?— dije finjiendo no estar nerviosa pero eso ni yo me lo creía.

—Mentiste cuando te pregunte sino te habías saltado las comidas, si lo hiciste por eso estas así ahora ¿realmente no piensas en tu salud?

—Lo lamentó no volveré a hacerlo— dije algo triste pero a la vez estaba feliz por dentro mi alma volvió a mi cuerpo cuando dijo lo de las comidas pensé que ya me había atrapado pero tal vez ahora en adelante me vería como una mentirosa.

—Ven acá pequeña no te pongas triste, te prepararé algo de comer pero esta vez te lo comerás todo sin dejar un poco ¿esta bien?¿si?

—Si— salio de la habitación y se dirigió hasta la cocina a preparar una rica sopa por mi mente pasaban tantas cosas solo me preguntaba porque hacia estas cosas por mi un extraño no lo haría ni siquiera alguien de mi familia.

—¿Porque demora tanto?¿ya habrá terminado? Mejor voy a ver antes de que Incendié la cocina— reí por un momento y estaba a punto de abrir la puerta pero de pronto el apareció con un tazón de sopa.

—¿Que tratas de hacer?— ella era muy desobediente de las 10 veces que le decía que no hiciera algo ella iba y lo hacía 9 veces.

—¿Yo?¿nada?¿y tú?—en mi mente solo me pasaba que porque era así de mentirosa realmente yo no soy así pero entendería que él pensara así de mi ya que yo le había prometido que ya no lo haría.

—Digamos, que te creó— le dije con una sonrisa, yo ya no quería regañarla a la final yo sabía que no me haría caso.

—Esta bien— le respondí con una sonrisa igual de grande que la de él, en ese momento me sorprendió con su mirada inevitable en mis labios sonrientes e incluso se veía algo desconcertado como si hubiera regresado algún recuerdo a su mente, el solo hacia que me ruborizara. Fue cuando decidí dejar de hacerlo para hablar.

—¿Te pasa algo?—le dije intrigada por saber su respuesta.

—¿A mi? Nada— dije algo nervioso realmente ella era muy linda y lo era mucho más cuando sonreía, ella solo traía recuerdos tras recuerdos en mi mente. Cada vez me atraía más y más.

—Ohh pensé que te sucedía algo te veías algo distraído— dije sin poder evitar reírme ya que yo me di cuenta de que estaba mintiendo.

—Ya te dije que no me pasa nada, sabes empiezo a pensar que la fiebre te esta afectando, mejor come tu sopa— ella era muy lista aunque parecía que en mi clase no aplicaba su inteligencia.

—Como digas— le dije tratando de aligerar el ambiente que se tornaba algo incómodo.

—Ten ahora comete toda no me iré hasta que te la acabes— dije seriamente.

—Bueno, pero si esta mala entonces no te podrás ir nunca de aquí porque si es ese el caso yo no me comeré eso— en mi mente había una parte que quería que sucediera eso ya que su compañía me resultaba muy agradable.

—Tranquila no sucederá eso— yo estaba muy seguro de que eso no pasaría, yo llevaba a años viviendo solo desde muy joven así que yo preparaba mi propia comida y a mi parecer no era mala.

—Haber la probaré. Umm esta deliciosa— realmente el parecía tener experiencia en la cocina. Sabia que no se quedaría mucho tiempo ya que se me hacia inevitable comerla.

—Viste, te lo dije— ella comía sin interrupción alguna, se acabo todo realmente esta era una de las pocas veces que me hacia caso porque ni en clases lo hacia.

—Umm estuvo muy rico, muchas gracias— enseguida sabia que el ya tenía que marcharse ya que así habíamos quedado antes.

—De nada— realmente disfrutaba cada minuto que podía estar con ella pero esta vez ya no me quería marchar así que decidí quedarme hasta que ella se durmiera.

—¿Supongo que ya tienes que marcharte?

—¿Acaso ya me quieres echar?— inevitablemente solté una risa.

— No no es eso, yo solo decía. Por mi se puede quedar.

—Tranquila solo me quedare hasta que te duermas.

—Bueno pero le diré algo yo duermo muy muy tarde puede irse ahora si quiere, yo estaré bien no se preocupe por mi.

—Ya te dije que me quedare hasta que te duermas.

—Después no me diga que no le advertí.

—No te preocupes— tal vez ella no estaba muy consciente solo hablaba boberías parecía que había perdido la noción del tiempo ya que mañana seria fin de semana así que me acerque a tocar su frente para ver si su fiebre había calmado o era eso lo que la tenia así.

—¿Que haces? ¿porque te acercas tanto?— dije nerviosa ya que se fue acercando a mi rostro.

—Realmente mirate estas hirviendo en fiebre espera aquí iré a la farmacia por algunos medicamentos de paso traigo unas compresas frías para ponerte no te muevas— parecía que todo lo que hacia solo lograba que ella empeorará.

—Esta bien, por favor no tardes mucho— antes de irse él asintió con la mano y se fue lo más rápido posible.