Capítulo 14.

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Su aliento estaba en mi cara, su mirada de hecho me asustaba a muerte, pero la cosa más terrorífica era el decepcionado tono de voz de ―has fallado― de Jake Steve. El tipo que iba a hacerme llorar y destrozar mi club.

―¿Por qué hay un tubo vacío en el escenario, Sr. Payne?― dijo Jake. ―Esto no es aceptable. Me prometió un espectáculo 'maravilloso', ¡y aún así usted sabe que una de las reglas establecidas en todos los clubes nudistas es nunca dejar un caño vacío!―Entonces, sonrió como si de pronto estuviera sorprendido. ―¡Especialmente el tubo del centro!

Traté de sonreírle, siguiéndole la corriente, como si todo fuera parte de mi plan. ―Sí, Sr. Steve, ¿pero ha visto a las otras chicas? Están haciendo un gran trabajo, si me permite decirlo. Mi Jane tiene un número fantástico por presentar en un momento, y el público parece estar disfrutándolo ―contesté, pero por dentro estaba acobardándome como una asustada niñita. Andy tenía razón, había jodido todo el espectáculo.

―Será mejor que me presente algo mejor en este segundo acto, porque usted sabe que llevaré su club al abismo si no lo hace― dijo sinceramente. Y entonces la risa llegó como si estuviera genuinamente perplejo. ―¡Este es retorcido! ¿Quién deja libre su tubo del centro? ¿Por qué no solamente poner a una de sus chicas ahí? ¿Qué hay de su Jane?

―Solo espere― contesté con un tono de falsa sensación de esperanza. Necesitaba un milagro, y desesperadamente uno rápido.

Suspiré, tome una calada de mi cigarro y miré hacia abajo y ahí estaba, el milagro.

Katy me sonrió mientras la veía desde mi tarima. Se deslizó de vuelta en su asiento, y por cómo lo hizo debía estar un poco borracha. Le sonreí de vuelta y entonces me dio un pequeño saludo. Por supuesto, saludé de vuelta y le di un largo trago al buen whisky, cuando mi mirada se enfocó en el escenario para notar el inminente tubo vacío del centro.

Un último intento, pensé. Señalé la botella de whisky y traté de indicarle que podía venir acá y beber conmigo. Tal vez si podría mejorar su estado de ánimo, podría cambiar de opinión sobre bailar para mí. De todas formas, sacudió su cabeza. Tomé otro trago.

La vi por un ratito más, mientras su amiga Lily se acercaba con otro trago gratis que le habían dado en el bar. Katy parecía feliz de verla al principio, pero luego, de pronto pareció como si algo estuviera sucediendo. Traté de descifrar por qué Lily se veía tan paralizada y horrorizada, y parecía como si Katy estuviera haciendo exactamente lo mismo. Entonces, seguí la mirada de Lily y me di cuenta de que mi plan estaba finalmente puesto en acción.

Me congelé de emoción. Lily estaba viendo a Alina y a Logan, y ahora, también lo hacía Katy.

Me alejé de mi tarima y fuera de la vista de otros, tratando de ser discreto. A pesar de que quería ver y observar cómo finalmente descubría la verdad sobre su 'prometido' y su 'colega', había algo que me apartaba de ello. ¿Culpa? ¿Conciencia, tal vez? No estaba seguro, pero de todas formas no fui capaz de mirar. Tal vez no quería ver a Katy ser literalmente herida.

Entonces, empecé a escuchar gritos. Reconocí la voz de Katy y gemí. ¿Por qué no pude solamente decírselo desde el principio, en vez de dejar que todo esto sucediera? Pude haber sido un poco más amable, al menos. Pero no, tuve que dejarlo hasta ahora. No podía soportar la idea de que ella estuviera tan enojada como se escuchaba. ¿Eran el alcohol y las drogas lo que me hacían un maldito marica?

Eso esperaba.

En ese momento, Harry llegó. ―Las chicas están listas para la siguiente parte, Sr. Payne. ¿Quiere que coloque las luces ahora? Han pasado quince minutos.

―Excelente, Harry. Sí, tan pronto como sea posible, por favor.

Casi inmediatamente, las luces disminuyeron y todos dejaron de hablar. Excepto una persona quien estaba gritando al máximo de sus jodidos pulmones. Incluso yo podía escucharla fuerte y claro desde mi plataforma. ¿Qué carajo estaba haciendo? Eché un vistazo hacia abajo y apenas podía distinguirla bajo las luces tenues. Estaba justo donde Logan estaba sentado.

―¿Crees que soy aburrida?― gritó.

Las luces se encendieron en el escenario, iluminando convenientemente donde Katy estaba parada. Logan estaba encogido en su asiento, obviamente no quería hacer un escándalo en frente de todas esas personas que estaban observando. Se veía malditamente asustado y era jodidamente divertido. Continué viendo a Katy. La música empezó a sonar, una de mis favoritas, Can't Get You Out Of My Head. Entonces Katy miró a su alrededor

Miró hacia mi lugar y entonces miré hacia el tubo del centro y de vuelta a ella. ―Tú no eres aburrida― dije bajo aliento y le asentí. Miró de vuelta al tubo y me asintió. Se giró de vuelta a Logan con lo que parecía la sonrisa más diabólica en su rostro.

Todo el público rugió, lo que pareció impulsarla. ¿Katy de verdad iba a hacer esto? Casi no pude mirar. Pero, otra vez, no podría perderme lo que estaba a punto de hacer por nada del mundo. Mi mandíbula cayó cincuenta pies cuando se puso de pie en el escenario.

Jódeme

Caminé hacia debajo de la tarima donde estaba y me dirigí hacia un pasillo entre asientos. Ahí, en frente de mí, estaba Katy, caminando hacia el escenario. La miré con absoluto asombro. A pesar de que estaba definitivamente bajo el efecto del alcohol, se paró en el escenario con sutileza, como se esperaría de una bailarina. Caminé más cerca y me detuve justo al borde del escenario, justo a un lado de donde estaba sentado Logan. Echó un breve vistazo hacia donde yo estaba, pero sus ojos se desviaron rápidamente para ver lo que estaba presentándose en el escenario: algo que definitivamente iba a extrañar.

―¿Qué diablos está haciendo?― escuché a Alina susurrar, pero Logan la espantó con sus manos.

Mientras la introducción llegaba a su fin, colocó su mano en el caño, me reconoció y entonces colocó sus pies a la distancia de sus hombros. Después, la música principal empezó a sonar, acompañada de la voz, y empezó a moverse. Quería mirar a un lado para ver qué expresión tenía Logan, pero la vista era tan tentadora para arrastrar mis ojos hacia otro lado. No me atrevía a hacerlo, por miedo a perder de vista algo importante.

Sujetó el tubo ligeramente y meció sus caderas de lado a lado. Era como una especie de recuerdo de cuando irrumpí en su casa estúpidamente. Pero esta vez todas sus inhibiciones se habían perdido, y ahora lo estaba haciendo correctamente: sensualmente, sintiendo la música.

―Deja que la música fluya por tu cuerpo, Katy― susurré. No estaba seguro si me había escuchado o no, pero me respondió como si lo hubiera hecho.

Sus movimientos eran más vigorosos ahora, como si la música y el ritmo se deslizaran dentro de ella, y estuvieran jugando a través de las formas de su cuerpo. Sus caderas se balanceaban y afilaban cada vez más cerca del caño, mientras cerraba sus ojos. Estaba tan borracha, pero eso la hizo bailar absolutamente fantástico. Ella era la indicada.

―Siéntelo― susurré de nuevo mientras la veía subir y bajar.

Se sostuvo del tubo con más fuerza ahora, y arrojó su cabeza hacia atrás. Su pie derecho se levantó para engancharse alrededor del tubo con su talón, causando que la silueta de su cuerpo luciera sublime. Tomé esta oportunidad para mirar a Logan, pero su expresión solamente imitaba a la mía: asombro, excitación, estimulación y, ciertamente, impresión.

Se echó para atrás aún más y empezó a girar alrededor del tubo, usando solamente su mano y pie derecho como soporte. ¡No te caigas! Coreé una y otra vez en mi cabeza, pero su giro fue perfecto, y sus ojos permanecieron casi cerrados y apasionados.

Escuché aclamaciones viniendo de atrás de mí y una ronda de aplausos. La audiencia estaba obviamente encantada por Katy, como yo estaba. Ni siquiera estaba seguro si alguien se hubiera podido concentrar en mis otras chicas que estaban detrás de ella. Diablos, ni siquiera me di cuenta dónde estaban la mayor parte del baile.

Mientras la canción hacía un crescendo hacia el coro, Katy detuvo su balanceo. Los gritos cesaron y se convirtieron en confusión. Pero ella solo les dio a todos una sonrisa sombría, la cual indicaba que tenía algo debajo de su hipotética manga. Me vio a los ojos, y llevó su mano izquierda al tirante derecho de su vestido. La audiencia se volvió absolutamente loca, así como mi polla.

Oh, joder.

Violet  « Liam Payne »Donde viven las historias. Descúbrelo ahora