Capítulo 32: Clase de Corazón

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"Tae, puedo explicarlo" fueron las primeras palabras que salieron de los labios de Tiffany que parecían sellados casi con pegamento, la rubia avanzó al interior de la cafetería y la americana miró de reojo a las dos muchachas "Tiffany, yo lo siento, yo no..." "Olvídalo, lo iba a saber de todas maneras" comentó dejando caer sus hombros "¿Por qué te quedas parada allí?" Jessica tomó un sorbo de su café y le miró desde su lugar "¿Cómo?" pidió extrañada la castaña, la estudiante de diseño rodó los ojos "Oye, deja de ser tan estúpida y síguela dentro de ese maldito lugar para trabajadores, ella quería que la siguieras y hablaran en privado ¿qué no entiendes a la torpe de mi amiga?" Sooyoung miraba impresionada a su novia y Tiffany asintió aturdida por las palabras agresivas de la mayor, desapareció del lugar y Jessica se llevó una mano a sus cabellos "Si no fuera por nosotras, esas dos seguirían girando como el gato y el ratón en un círculo vicioso" volvió a disfrutar del sabor de su café, la castaña retrocedió a su puesto "Y ahora... ¿qué se supone que son?" pidió desde su lugar detrás del mostrador, Jessica le miró y sonrió "Pues ahora son como el sol y el mar, siempre se encuentran y en algún punto desde nuestra visión humana llegan a tocarse"

La americana tímidamente abrió la puerta utilizada por el personal, sus pasos lentos y nerviosos acompañaban a su mente y corazón que tampoco habían estado preparados para este momento, observó a la rubia sentada de espaldas a la puerta "Taeyeon" "No puedo luchar contra eso Miyoung, no tienes que explicarme nada" Taeyeon se acarició la parte trasera de su cuello y suspiró volteándose a mirar a la americana "¿Cuándo me ibas a decir esto? ¿Acaso te cansaste de que no pusiera ni un poco de esfuerzo?" pidió disgustada la mayor, Tiffany se sentó frente a ella y tomó sus manos "No te lo quise decir antes porque... no encontraba las palabras para decírtelo" se relamió los labios bajando la vista a las manos entrelazadas, aún le parecía tierno que aquellas suaves manos cupiesen perfectamente entre las suyas "¿Cuándo te dijeron esto? ¿Es definitivo?" pidió soltando una de sus manos para alcanzar el rostro de la castaña, acarició delicadamente su mejilla, Tiffany la miró directa y detenidamente a los ojos, parecían una tormenta que pronto se avecinaba "Fue hace un mes atrás, estábamos presentando las maquetas del centro cultural y uno de los profesores me habló sobre la entrega de proyectos que se llevó a cabo el semestre pasado, tres de nosotros pasamos a las finales, pero solo yo había destacado para una universidad en específico-" señaló mirándole, Taeyeon bajó la vista, sus ojos intentaban encontrar un punto y evitar que las lágrimas cayesen en ese momento, no quería verse débil "... La Universidad de Melbourne me ofrece una beca completa, estadía, pasajes y todo lo que tenga que ver con los asuntos universitarios por tres años." Taeyeon sintió como su corazón se encogía al escuchar sus últimas palabras, Tiffany aún apretaba sus manos por temor de que la bajita arrancara del lugar "Es un tiempo muy largo" habló la bajita intentando tragarse el nudo que cada vez se cerraba más en su garganta "Puedo rechazar la oferta si tú me lo pides... ¿qué importa Melbourne si te tengo a ti?" Taeyeon le miró de hito en hito, sus labios entreabiertos expresaban todo su desconcierto, pero esa mirada firme en el rostro de la americana le hacía temblar, sabía que estaba hablando en serio. "No me pidas que decida por ti."

"Les traje un poco de helado y chocolates, todo está en el congelador-" abrió un poco la puerta el castaño mirando de reojo al grupo reunido alrededor de la cama de la rubia, Irene levantó la vista y se puso de pie, caminó hasta la puerta "... Irene, me puedes explicar ¿qué le pasó a mi hermanita?" pidió intrigado el joven, Irene miró de reojo y suspiró saliendo de la habitación "Tiffany unnie se irá a estudiar a Melbourne" el mayor de los Kim desvió la mirada, se llevó una mano al rostro y soltó el aire contenido volviendo a fijar su vista en la estudiante de derecho "¿Es oficial? ¿De verdad se tiene que ir?" preguntó angustiado, Irene se cruzó de brazos, estaba tan frustrada como él "Escuché de Jessica unnie que ella le dijo que no se iría si tan solo se lo pedía"

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