Pesadillas

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Día 11 - Muerte de tu personaje favorito

La alarma del celular lo sacó de su sueño, gruñendo de frustración ante la idea de despertarse aunque no es que tampoco estuviera durmiendo muy plácidamente. Su sueño solo se trataba de él vagando por las completas y solitarias calles de Beacon. Como si nunca hubieran vivido nadie ahí. Aunque fuera bastante perturbador y le dejará una pesada sensación en el pecho, acompañado de temor, desde lo que paso con el Nogitsune, su noches eran así. Sueños que rozaban los limites hacia una pesadilla.

Pero no siempre, ya que hubo otros cambios para bien.

10:00 am

Sábado 30 de febrero 2016

Reviso su móvil, sus ojo estrechándose, todavía acostumbrándose a la claridad de la luz de la pantalla y sintiendo sus párpados pesados ante la sensación de un despertar repentino. La amarga sensación sin quitarse todavía, oprimiendo su pecho, queriendo ignorarlo pero haciéndole imposible ante los repentinos pensamientos que venían a su cabeza. "Fue solo un sueño, un mal sueño". Pensó cuando de repente le llego un mensaje que estaba esperando.

De: Sourwolf <3

Te espero a las 10:30
En el loft

No tardes

Igual de escueto por texto como lo es en persona, eso no le impido a Stiles sonreír al leer el mensaje. Habían empezado algo con el mayor y a pesar de no saber cómo clasificarlo y que solo sea un "algo", le era suficiente. Lo que el moreno dejaba mostrar ante él, no lo hacía frente a la manada. Se sentía privilegiado de ser quien le hacía sonreír, muy pocas veces y algunas ocasiones, con mucho esfuerzo, pero lo hacía. Y era hermoso. Esa era la razón por la que su corazón latía en su pecho.

Ignoro el dolor en su pecho. Debía ser la emoción de reunirse con Derek.

Sabiendo que el moreno era riguroso con el horario, la puntualidad era sumamente importante, lo supo en sus citas que no eran citas porque todavía no definían ese algo, entonces eran "no citas" aunque obviamente son citas, y se dirigió hacia el baño para una ducha rápida.

En 10 minutos ya se encontraba en su Jeep, yendo hacia la cafetería para comprarle el café a Derek y su desayuno, porque si, los fin de de semana desayunan juntos en su No citas. "Claramente es una cita". Más que nada porque el moreno siempre le espera a que se despierte para desayunar juntos, aunque no se lo haya dicho, simplemente fue el estómago del lobo un par de ocasiones.

Esos pequeños detalles eran los que lo tenían cayendo por Hale, casi como secretos fueran pero los terminaba descubriendo, nunca le preguntaba y tampoco buscaba, solo dejaba que pasen. Como la vez que llegó al loft con el Jeep en sus últimas y sin siquiera decir algo, Derek lo reparo en cuestión de horas. Fue como las películas, camisa de tirantes, grasa y aceite, músculos flexionándose - "¿Ya han visto sus bíceps?"- y poco de sudor. Mejor vista del mundo. Aunque ya se podía decir que ya estaba completamente rendido por el Hale.

La suerte estaba de su lado y solo tardo 5 minutos para comprar el café y los demás, estando nuevo ya de camino hacia el loft de Derek. La hora en su celular le mostró que eran las 10:29 y ya se encontraba subiendo por el montacargas, silbando una canción. A pesar de su amargo despertar, tenía la sensación de que sería un excelente día.

Se equivocó.

A penas abrió la puerta corrediza, su mundo cayó, de sus manos resbalandose el café. El nombre del moreno solo hizo eco cuando entro en el tenebroso vacío y la desgarradora escena frente suyo. Todo el loft estaba destruido, escombros por el suelo, el gran ventanal totalmente destruido, y o peor de todo... era la sangre que adornaba el lugar.

-¿¡DEREK?!

Su voz quebrada era solo el preludio del tormento que estaba comenzado a sentir, el miedo totalmente logrando que la desesperación lo fuera destruyendo sin ni siquiera moverse de su lugar. Le estaba costando respirar y sentía sus piernas temblar, en cualquier minuto podría caerse, hasta que sus ojos nublados de lágrimas que no dejaría caer, enfocaron algo a lo lejos.

Era una nota.

Juguemos en el bosque mientras el lobo no está

Su corazón se detuvo y sus rodillas fallaron. Como si fuera una broma de mal gusto, la canción del juego infantil sonaba en el bullicio de pensamiento que se había vuelto su mente, hasta solo repetirse lo que más temía "¿Lobo estas?"

No sabe cómo reaccionar, solamente se encontraba con la pistola en mano que Braeden les había dejado a la manada, corriendo hacia su Jeep. Con sus manos temblorosas, logró meter llave y arrancar hacia la obvia pista en la jodida nota. Las lágrimas caían por su mejilla a pesar de no darse cuenta, sus labios repitiendo constante y rogando por favor, su pie sin apartarse del acelerador.

La mansión Hale estaba frente suyo. Volvió llamar a Derek pero nada. Su corazón latiendo dolosamente, su cuerpo temblando a lo diferente que parecía todo a su alrededor, tan desolado y silencio, como si los árboles hubieran perdido la vida y fueran testigo de algo terribles. Sus músculos congelándose ante la nueva nota clavada por una flecha.

Juguemos en el bosque mientras el lobo no está
¿Lobo estas?

Parece que el lobo está muerto

-Y tu eres el siguiente -Fue una voz femenina muy conocida.

Y un disparo fue lo último que escucho Stiles.

~o~


Obviamente no iba a escribir implícitamente la muerte de Derek ni mucho menos que fuera casi afirmativa ¿a que me refiero? Es un final abierto.

Reto de los 15 díasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora