Capítulo 6

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CAPÍTULO 6

A la mañana siguiente Jason pudo dormir en su cuarto aunque fue un logro pues Bizarro quiso que se quedara en la enfermería por si acaso pero al final le dejó. Debía de admitir que esa noche le costó dormir era como si faltara algo a su descanso, por mucho que abrazara la almohada (ya que era dado a dormir así) sentía que era mucho más pequeña de lo normal y sintió frío a pesar de que tenía varias mantas.

– Buenos días – saludó Artemis que parecía cansada

– Hoy mismo te ayudaré con la investigación, no te tienes que preocupar

– Bizarro ya está en ello – bostezó

– Genial, pues voy a ver cómo le va, tú vuelve a dormir o lo que sea que lo necesitarás – le recomendó el líder

– Eso haré – bostezó de nuevo – pero si me necesitáis llamadme – fue a su cuarto para volver a dormir.

Jason fue a ver al clon a su laboratorio donde estaba analizando todos los resultados que le mostraba el ordenador

– ¿Alguna novedad?

– No, son demasiado listos, ni mi superordenador puede localizarles – dijo sin apartar los ojos de la pantalla pero después suavizó su expresión seria y le sonrió amablemente – ¿cómo estás?

– Mucho mejor, no te preocupes. Yo iré por la ciudad para buscar pistas

– No es recomendable que salgas todaví... – de pronto sonó su móvil y suspiró por un momento cuando vio el número – lo siento, tengo que cogerlo – atendió la llamada – hola Mark, se me había olvidado por completo que habíamos quedado pero hoy no puedo porque... – escuchó el pulso de Jason acelerarse y como fruncía el ceño mientras se iba.

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Jason iba por las calles de Gotham en su moto todavía de mal humor y sin explicárselo, ¿de verdad que estaba sintiendo celos? Esto le superaba demasiado y no entendía esa rabieta y esa furia que sentía ahora pero eso era bueno puesto que ahora tendría que sacar información y la furia siempre era una buena aliada en esas situaciones.

Llegó a una zona de los suburbios cerca del puerto, si necesitaba información de la yakuza sabía que podría conseguirla ahí puesto que ahora dominaban ese territorio. Preguntó a cualquiera que tenía en sus fichas que estaba compinchado con ellos pero ninguno le daba las respuestas que necesitaba hasta que al fin dio con el tipo adecuado, solo le había costado un brazo fracturado y varios golpes pero al fin había conseguido la pista que le ayudaría.

Le dieron el chivatazo de que había un lugar donde lo solía frecuentar una mujer que trabajaba para el mercado negro, en especial todo lo relacionado con el comercio de personas, y que ella podría saber quien era tipo que estaba comprando tantos niños. Tuvo que esperar hasta la noche para llegar al sitio y poder entrar algo que le costó bastante pues era el último sitio de moda de Gotham y la lista era muy exclusiva pero gracias a su experiencia logró colarse sin llamar la atención.

En aquel sitio bien decorado y exclusivo encontró a la mujer tal y como le indicaron. Ella llevaba un traje tradicional chino de color rosa oscuro y negro, pelo negro muy largo y facciones delicadas, quien viera a esa mujer no podría relacionarla por una traficante pero Jason ya sabía que en este mundo las apariencias engañan. Estaba rodeada por varios matones que la protegían mientras bebía un cóctel elegantemente servido y en cuanto Jason se acercó a ella ellos se pusieron en medio

– Tranquilo chicos – dijo sin mirarlos e hizo un gesto para que se acercara – ¿una copa Red Hood? – preguntó tranquila al del casco

– Necesito información – fue directo al grano

El amor no existe... o eso creía (Bizzajay)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora