Zodiac, OS, Preferencias; Supernatural.

✡Sammy 1/2✡

One shot.

Tema:Casi mueres en un caso y Sam toma una drástica desición, con la cual no estarás de acuerdo, y eso traerá problemas.

Advertencia:Tendrá dos o más partes para que no se hagan tan largos los capítulos.
.....

Te encontrabas discutiendo con la señora Mills, ella era la anciana a la que intentaban salvar de un fantasma vengativo, el cual, por lo que habían investigado, sabían que había muerto en las alcantarillas del lugar, lo que significaba que en ese sector estaba en peligro.

- Vamos señora, por favor- suplicaste por cuarta vez ya harta.

- ¡Dije que no!-exclamó firme a su decisión- no puedo dejar a conejo sólo-continuó, ahora con una mueca de preocupación en su rostro.

- ¿Conejo?- preguntaste suspirando confusa, ya que desde que habías llegado no habías visto a ningún conejo.

- Si, conejo, mi gato-dijo obvia señalando a lo que suponías, era un gato disecado.

En tu rostro se formó una mueca de asco, que trataste de disimular, al ver al animal.

- Oh claro, tu gato... conejo, como no pude darme cuenta- hablaste sarcástica para ti misma- entonces toma a conejo y salgamos de aquí.

La anciana lo dudo por unos segundos, pero luego tomó a conejo en brazos, con la intención de por fin salir de allí.

Pero al instante las luces comenzaron a parpadear.

- Mierda- maldeciste por lo bajo al pobre gato conejo- vamos, Dolores hay que salir de aquí- apuraste a la señora.

- Oh, creo que olvidé pagar la cuenta de la luz- dijo la señora al ver como las luces se apagaban y prendían sin cesar.

- No lo creo, vamos- dijiste cuando lograron llegar a la puerta.

Al intentar abrirla, sentiste como eras impulsada por los aires, para luego estrellarte contra la pared. No había quedado ni un músculo que no te doliera, el impacto había sido demasiado fuerte.

El grito de la anciana hizo que volvieras en si, te paraste como pudiste y sacaste el arma de detrás de tu pantalón.

Viste como el espectro de una mujer corpulenta y con aspectos similares a los de Dolores Mills, se acercaba a ella.

Era su hermana, lo sabías, lo que no habían averiguado aún es porque quería matar a su hermana menor.

Sin pensarlo disparaste, logrando que el fantasma desapareciera, sabías que eso no duraría mucho a si que te apresuraste.

- Tiene que salir de aquí- hablaste apurada.

- Esa.. esa era.. mi hermana, Magda, pero ella está muerta, o estaba, cómo..- la señora titubeaba, pareciendo perdida.

- Ella sigue muerta, tranquila, luego le explicaré todo, ahora tiene que salir de aquí- repetiste, pero de repente Dolores cerró sus ojos y se desplomó en la dura alfombra- Oh, no, no, no, ¡señora! Despierte- susurraste desesperada, tomaste su pulso y suspiraste aliviada, solo se había desmayado.

Trataste de alzarla para sacarla de allí pero pesaba mucho más de lo que parecía, al notar que el fantasma no había vuelto deseabas que los chicos hubieran encontrado el objeto que mantenía a Magda aquí.
Como si al pensarlo los hubieras invocado, tu celular sonó.

- Maia, sabemos cuál es el objeto- habló veloz Sam, a través del teléfono se podía escuchar el ruido del motor del Impala, por lo que supusiste que estaban viniendo.

- ¿Que es? ¿Ya lo quemaron?.

- No, ese es el problema, no sabemos en donde esta, resulta que Magda tenía un gato, el cual paso a ser de Dolores después de haber muerto.

- Conejo...- dijiste- ¡conejo!- exclamaste ahora segura.

- ¿Que?, ¿de qué hablas? Te encuentras bien amor- habló preocupado tu novio.

- Si, tengo el objeto-.

No escuchaste lo que respondió Sammy, ya que Magda había vuelto, y parecía aun más enojada, sin temor alguno se acercó y comenzó a asfixiante, el celular había caído, por lo que podías escuchar a lo lejos los bajos murmullos que parecían gritos de Sam.

Cuando comenzaste a sentir que te desvanecías te arrojó lejos de ella, dejando el camino libre para llegar a Dolores, al lanzarte no se percató de que te había dejado a unos cuantos pasos de lo que le permitía quedarse aquí.

Sin hacer ningún ruido encendiste la chimenea y fuiste en busca de sal, lo único que encontraste fue un pequeño sobre dentro de una caja de comida rápida, al regresar te encontraste con el gato a un lado de la chimenea, perfectamente colocado sobre el sillón, instantáneamente te pusiste alerta, ya que no lo habías dejado allí.

Y como lo supusiste, el fantasma había vuelto, corriste lo más rápido que pudiste hacia el gato, pero Magda fue más veloz.

...
Lo termino acá ya que si lo hago más largo la segunda parte será demasiado corta.

Perdonen horrores ortográficos.

Hasta la próxima.