El futuro de una Súper Villana

Buscando el perdón junto a la oscuridad

CatCo.

-Mamá, ¿por qué no invitamos a Alex a almorzar?-

-¿Qué?-

-Por favor-

Sam estaba sorprendida por esa repentina sugerencia de su hija, ya era toda una adolescente y aun así lograba convencerla con esos ojitos tiernos de borreguito apaleado, suspira sonriendo cerrando su laptop ya que se encontraba en la oficina principal que alguna vez ocupó la prestigiosa Cat.

-Ruby amor, ella está con su esposa ahora sería una descortesía-

-Ella terminó con Maggie—sonreía ampliamente y eso había dejado boca abierta su madre.

-¿Cómo sabes eso?-

-Por la noche estuvimos chateando y sabe lo imprudente que a veces puedo ser así que me lo dijo, ya sabes que me quiere como a una hija—eso último había sonrojado a su madre—por lo que ya no tienes excusas-

-Yo... bueno—rascaba su cabeza—de acuerdo le llamaré para invitarla a almorzar si es lo que deseas-

-¡Genial!-

Esperaba encontrar el número de teléfono de la pelirroja en su vieja agenda pues era claro que no tenía en su nuevo celular, cuando por fin lo encontró sintió un hueco en su estómago pero no quería verse cobarde ante su hija así que tomando un gran respiro tecleo los dígitos y de inmediato se escuchó el sonido de espera.

<¿Bueno?>

-Hola Alex-

<Sam, que gusto saber de ti>

-Sí bueno—comenzaba a ponerse nerviosa—verás a Ruby se le ocurrió la genial idea de invitarte a almorzar, pero quizás estés ocupada-

<Será un honor almorzar con ustedes Sam, iré de inmediato a CatCo yo invitó la comida>

-No Alex como crees que...-

<Será todo un honor Sam, te veo en una hora>

-Parece ser que Alex acepto de una forma... ¿intrigante?—miro a su hija—algo me dice que ya lo habías planeado todo con ella-

-Disparates mamá—sacude la mano inocentemente.

-Sí eso debe ser-

Pasando la hora Alex había llegado a CatCo con comida china, era lo más adecuado puesto que a Ruby como a su hermana le encantaba, el personal la conocía muy bien pero se les hacía extraño que apareciera cuando Kara ya no trabajaba ahí hasta que todos posan sus miradas en la nueva jefa, Sam sale a recibirla junto a su hija la cual se abalanza a la agente dándole un fuerte abrazo.

-Qué bello recibimiento—corresponde al gesto—bien chicas a comer-

-Muero de hambre—Ruby toma la bolsa para llevarla a la terraza dejándolas solas.

-Gracias por aceptar el plan nada improvisado de mi hija—sonríe al ver el gesto de Alex—soy inteligente, ¿lo sabías?-

-Cierto, ¿cómo pude pensar que te engañaríamos?—ríe caminando a su lado y las tres toman asiento disfrutando del día, eso es lo que necesitaba la agente ahora que su hermana estaba prácticamente desaparecida ya que si bien Lena había vuelto a L-Corp. Kara simplemente no era hallada así como su hijo recién llegado del futuro—debo decir que me ha encantado venir—menciona con alegría—no podía concentrarme en el trabajo así que ambas me ayudan mucho-

-¿Aún sin noticias?—pregunta Sam preocupada.

-No, pero no hablemos de eso—mira como la castaña asiente—por cierto me enteré que se han quedado sin fotógrafo—entrecierra los ojos riendo.