Jake y Shelly se detuvieron ante la puerta de la cabaña de Connor, ella admiró la construcción de madera y ladrillo barnizada. Era más grande que la suya y podía adivinar que hasta más acogedora y menos sombría.
Por la mañana, ella había ido al gimnasio con Aiden, estaba progresando mucho en su resistencia, por su fuerza aún no se asentaba.
Por la tarde, tuvo una sesión muy interesante con Liam, aprendió técnicas de combate completamente nuevas e interesantes.
Después de eso, ella y su hermano se encontraron con una nota pegada en su puerta que les indicaba que debía asistir a una reunión en casa de Connor.
Jake golpeó la puerta dos veces, en un par de segundos esta se abrió.
— ¡Hola! —Los saludó Connor a ambos con una deslumbrante sonrisa—. Adelante.
El ambiente interior era simple, acogedor, varios de sus compañeros ya habían llegado, Kaylee y Luke estaban sentados en un sillón doble color crema, Hunter estaba ubicado en uno de los dos sillones individuales que completaban el juego, por todo el resto de la sala de estar había cojines enormes de muchos colores.
Casi de inmediato advirtió la figura de Liam en un banquillo alejado, tenía los codos apoyados en sus rodillas, se inclinaba ligeramente hacia adelante con ambas manos apoyadas una sobre la otra, mirando el suelo, tenso, con su mirada perdida en vaya saber dónde.
— ¡Shelly! —exclamó Riley, alegre—. ¡Ven, siéntate por aquí!
La joven la llevó hacia un extremo de la sala, se ubicó en un cojín a su izquierda, después, Connor se sentó a su derecha.
Ella miró el rostro suave de su amiga, sus ojos marrones destellaban, Riley era una chispa vibrante que contagiaba su energía positiva a dónde quiera que estuviese.
— ¿Dónde están todos? —le preguntó a Connor.
—Algunos están en la cocina — respondió con su clara mirada fija en ella y se acercó—. Los demás están por llegar.
—Cuidado —dijo Riley—. A este tipo le gusta jugar.
— ¿Y a quién no? —respondió él con picardía.
Shelly se limitó a sonreír tímidamente, rompió el incómodo contacto visual.
Buscó a Liam, seguía en su lugar, todo en él mostraba la fuerza que llevaba por dentro, lo que más le intrigo fue el hecho de que tenía toda su atención centrada en Connor.
Este lo ignoró.
De pronto, una mujer de cabello ondulado marrón y piel apenas bronceada avanzó desde la puerta abierta que daba a otra habitación, sus ojos eran asombrosos, de un exótico color caramelo, y estaban fijos en ella.
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La redención de Liam [Serie Ice Daggers 5]
Romance"Lucha contra el prejuicio... Ríndete al amor..." El sentido del bien y el mal que el indiferente, frío y letal Liam Gallagher tiene lo ha llevado a ir en contra de sus principios y aceptar bajo su protección a dos jóvenes humanos que han perdido a...