19

6.5K 822 75
                                    

  Cuando el sol pintó colores de tonalidades claras en el cielo e iluminó rincones obscuros en las calles, el joven de cabellos negros yacía alistándose para otro de los largos y un tanto hostigosos días de su vida cotidiana en las mañanas.

  Vistió un vestuario casual con una sencilla camiseta blanca, jeans azules y sus botas cafés Timberland favoritas.

  Se paró frente al espejo, y se aseguró de haber escogido un atuendo adecuado de llevar y sencillo, como era de su agrado.

  Se sonrió a si mismo en aprobación, y a un costado de su reflejo, su vista se desvió a la ventana.

Su sonrisa se suavizo y bajo la vista al suelo.

Esa noche sería su salida con Taehyung.

  Un pequeño salto apareció en su pecho al recordarlo y suspiró liberándose de sus pensamientos para luego dar camino hasta la puerta de su habitación y salir de casa.

🍂

  Mientras caminaba, su vista se centró en el suelo lleno de montones de hojas secas provenientes de los árboles en cada lado de la carretera, y el vago recuerdo de su madre llego.

  Ésta había dicho prometer regresar en cuanto el otoño llegará, pero como Jungkook ya tenía previsto, no fue así. Había pasado ya un mes entero desde que partió a Japón. Su madre desde que recuerda, siempre solía ser de el mismo modo; desaparecía meses y regresaba a casa un mes o acaso dos, para luego volver a partir.

  No es que fuera una mala madre, en lo que cabía era amable, le llamaba un par de veces al mes, se preocupaba por su salud y se aseguraba de que no careciera de dinero. No tenía más quejas, y por más que ella no cumpliera las promesas de llegar a casa, seguía siendo su madre y única familia.

  de pronto, un empujón en su hombro provocó que se apartase de sus pensamientos y antes de que lograse levantar la mirada, perdió de vista al causante y simplemente chasqueó con molestia, para después tomar camino hasta su clase.

🌺🌺🌺

  Al llegar, la clase estaba a punto de comenzar y sin tomar atención a algo más, se apresuró a tomar asiento en el primer pupitre que visualizo.

  La clase transcurrió con el tema de las partes de una célula procariota, y dos par de amigos frente suyo platicando en su mayoría acerca de las chicas de la clase. Una conversación bastante ajena al interés de Jungkook, por lo que no hizo nada más que ignorar.

💐

  Al escuchar las palabras "pueden retirarse", de parte de él profesor, el azabache no perdió el tiempo y se apresuró a tomar su mochila y salir del aula.

🍁

  Observó que el sol hacia del día uno resplandeciente y tranquilo, por lo que detuvo sus pasos a punto de salir del plantel, y decidió no desaprovechar el buen clima que en unos días no volvería a haber durante unos largos meses.

  Tomó asiento en un banco de madera cerca de un árbol que ofrecía un poco de sombra y suave brisa, y se colocó auriculares para leer así sin ningún problema el libro que extrañamente aún no había podido terminar desde hace meses.

  Pasaron no más de 10 minutos en tranquilidad, hasta que un grupo de "chicas problema" a unos pasos de él, llamo su atención, pues notó que varias de ellas lo observaban.

  No era algo nuevo, estaba acostumbrado a que las chicas lo observaran a lo largo de los días en la escuela al llegar e irse. Cosa que le era bastante molesto, por lo que prefería no ver su entorno y pasar de chicas sonriéndole. En términos "incoherentes" para Jungkook, era alguien "popular" pero del extraño tipo en que todos sabían su nombre y él desconocía los de todos.

  Suspiró con pesadez, cerró su libro con molestia, guardo sus auriculares y se puso de pie. Pero antes de lograr dar un paso, un agarre en su hombro lo detuvo.

  —¡Que tal tu día! –Habló quien estaba bastante cercano a ser su único amigo en la escuela, pues a pesar de todo, no era que hablaran mucho.

  —Lo de siempre. –Respondió con una pequeña sonrisa ladina desanimada.

  —No me puedo ni imaginar cuán difícil es la popularidad .– dijo el rubio en forma de gracia a pesar de ser de igual manera popular pero de una manera sutil.

  —Pues sin duda, algo que envidiar no es.

  —Todos saben tú nombre, chicas saludándote, maestros con preferencias a ti... ¿Qué más que envidiable puede ser?

  —Una molestia, eso es lo que es, mientras que yo simplemente deseo ser uno más de entre tantos y que no me observen como si fuera algún tipo de entidad divina. –Respondió con molestia.

—¡Deberías de ver más el lado positivo!

  —Supongo. –Dijo luego de un suspiro, de pronto la vista anaranjada de las nubes le recordó que Taehyung no tardaría en llegar.

  —¡Demonios! debo irme, Jimin-hyung,  hablamos otro día. –Aviso y corrió antes de que el nombrado lograse decir una palabra.

  ¿Cómo pudo olvidar algo tan importante como lo era esa noche?

  Sus planes de vestir algo adecuado se habían echado a la basura, y por si fuera poco, dejaría plantado a Taehyung.

  Una presión comenzó a doler en su pecho mientras corría lo más rápido que su cuerpo le permitía.

  Doblo en una pequeña calle en dónde el bosque comenzaba a ser más denso, y al final de aquella calle, se adentró en el bosque hasta visualizar su hogar.

  Llegó a la puerta con el corazón a mil, y se recargó en sus rodillas intentando apaciguar su respiración.

Ya había anochecido.

¿y si Taehyung ya se habría marchado?

  Recompuso su postura y abrió la puerta para luego cerrar detrás suyo y subir las escaleras hacía su habitación.

  En la densidad de la obscuridad, observó la ventana abierta en la que las cortinas eran movidas por la brisa, de afuera hacia adentro.

Con aquello, supo que Taehyung se había ido.

  Apretó la mandíbula conteniendo las ganas de gritar el nombre de su tan querido peli-gris, extendió la mano hasta la pared a uno de sus costados y encendió la luz.

🌙🌟

Nightmare [梦魇] ☽ VkookDonde viven las historias. Descúbrelo ahora