Nightmare [梦魇] ☽ Vkook

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—Tenías razón... Tenías tanta razón...–Le habló al cuerpo inerte en sus brazos, mientras lágrimas que él ignoraba caían de su rostro.

Casi no podía escuchar el débil latido de su corazón.

Caminaba, dejando atrás los cuerpos y cuerpos de quienes se atrevieron a tan siquiera pensar en poder salirse con la suya al lastimar a su débil pequeño novio.

Comenzó a subir las escaleras que daban a la superficie y la nieve acompañada de un fuerte viento comenzó a halar el negro cabello del chico del que no apartaba la mirada.

Atravesó el bosque de aquella manera.

Miraba las marcas de su rostro, la horrible mordida de quién trato de abuzar y lastimar el hermoso cuerpo que poseía Jungkook, las marcas en sus muñecas aún sangrantes.

—Siempre tuviste la razón. Tu mejor protección era quedarme a tu lado... ¿Que es lo que e hecho?

Caminaba sin dirección alguna. Simplemente con la esperanza de lograr encontrar la salida de aquel bosque y buscar algún lugar en donde pudiesen salvar la vida de su amado.

Hasta que llegó a la carretera. Miró con esperanza al otro lado... ¿Un hospital?...

🌙.,' * • .,'* • ✨

Taehyung se detuvo. Montones de par de ojos ajenos se encontraban juzgando la dramática escena.

—Ayu-denlo.—Hablo entrecortado, con vulnerabilidad notoria en la voz, sin saber si se trataba del lugar correcto.

Una joven que vestía un traje blanco y se encontraba del otro lado de un escritorio se puso de pie repentinamente y desapareció por un pasillo.

Taehyung tenso la mandíbula.

El olor a sangre que Jungkook desprendía era insoportable, la intensa hambre que lo torturaba se encontraba luchando en él, tratando de perforar el control que amenazaba con desparecer.

Cerro los ojos con fuerza y presionó muy levemente el cuerpo en sus brazos.

No podía derrumbarse ahora.

Pensó en él. En su adorable sonrisa y perfecta personalidad de la que se enamoró tan perdidamente.

Justo cuando la sed comenzó a disminuir y abrió los ojos, una camilla llegó deprisa con varias personas más al rededor, vestidas de blanco.

Rápidamente se apresuró a recostar en la camilla con sumo cuidado el ahora frágil cuerpo de Jungkook, toco su manó y las lágrimas volvieron a comenzar a caer.

—Por favor, no me dejes...

Su mano quedo en el aire cuando comenzaron a llevarse la camilla.

No pudo hacer más, que quedarse observando como la camilla se perdía en la lejanía de aquel pasillo, sintiendo que se había llevado una parte suya.

La fuerza en sus piernas titubeó y sin evitarlo, se dejó caer al suelo de rodillas, devastado de que algo llegase a ocurrirle.

¿Que haría?

  ¿Que haría sin su motivo de despertar para ver un día más?