//Narra Ol
Iba con L por la calle viendo el amanecer, en total silencio mientras la luz anaranjada nos aclaraba la vista, aún cuando la luna no se había escondido ni el sol se había destapado de el manto oscuro y sin vida que le cubría y mirar esta escena me recordaba a cuando me tuve marchar. Aquel momento en el que una chica, de cabello largo y piel blanquecina, pequeña altura y que vestida de blanco se encontraba como si de un hospital se hubiese escapado se acercó a mí hoguera, a la hoguera en la que calentaba mis manos en el frío invierno y que nos daba luz en las noches en las que ninguna estrella brillaba y parecían apagarse de tristeza ella se acercó y me ofreció su mano "¿Quieres ayuda?", miré su clara palma y antes de darle la mano me paré a pensar y a mira mi mano, mi mano estaba esquelética y mugrienta y por un momento desconfíe de ella pero vi lágrimas en sus ojos al ver a mi madre que acurrucada junto a mi se encontraba tiritando.
- Hija... - mi madre comenzó a cerrar los ojos mientras más fuerte mi brazo cogía
- Señora, el futuro de su hija es bueno, dejela ir, le aseguro que en menos de una semana de el comienzo de esto usted podrá mantener una vida media, con un techo sobre su cabeza - dijo la chica mirando hacia otro lado
- Mamá, lo siento, debo ir - la besé en la frente y me levanté tras limpiarme el polvo que había sobre mis piernas
Eso es todo lo que recuerdo de aquella conversación, de el día en el que K salvó a mi madre, del día en el que mi futuro comenzó a prosperar, de el día en el que volví a tener un hogar y a comer comida de calidad, del día en el que el KELL nació pero solo con las letras de KL.
De repente noté como unas lágrimas brotaban de mis ojos y L se dió cuenta de esto
- ¿Que te pasa? - dijo mientras sacaba un pañuelo para limpiar mis lágrimas y alargaba su brazo para secar mis ojos
- Déjalo - dije sonriente - está fresquita - comencé a reír mientras a Liberty se le pintaba una sonrisa en los labios.
Volvimos a casa y en la única habitación que tenía nuestra vivienda K y E estaban preparando lo que sería el desayuno el día de hoy.
Tras largas horas de investigación y robo por la cálida noche de verano de Seúl cualquier cosa era buena para pegar un bocado y por suerte Kay había decidido que nuestro desayuno fuese delicioso, unas tortitas hizo y yo se lo agradeci con una sonrisa. Ya era mucho que nos hiciese el desayuno cada 31 que todos los días con este número en el calendario ella nos hacía un desayuno espectacular y delicioso, además gastaba gran parte de lo que ganaba en sus ligeros trabajos a tiempo parcial en esto porque ella quería compensarnos todo el trabajo que hacíamos aquella noche para que la siguiente fuese la gran matanza, la lluvia de sangre, la lucha del KELL.Mientras que L sacaba de la mochila todas las muestras de cabello de aquellos sospechosos que habíamos estado vijilando y robando a lo largo de la noche.
L debía investigar en lo que de día quedaba para que K, E y yo saludarnos a acabar con todos aquellos que como en el trayecto de la vida de el ELL nos habían jodido, violado, pegado, maltratado, gritado, levantado la mano, la pagarán, en lo que de vida nos quede la pagarán.
- Se acerca nuestro cumpleaños - dijo E limpiándose la boca mientras miraba a K
- No exageres, estamos en Julio y aún queda hasta noviembre
- ¿Cuántos cumplís? K eran 17 ¿No? - dije yo sonriente
K sólo afirmó con la cabeza, no le agradaba tener esa edad, o eso creo, pero ella nunca se sintió conforme con su edad física, siempre su edad mental era realmente adelantada a la física y le molestaba que nadie la tomase en serio por ser tan joven.
- Yo cumpliré 20 - dijo E mientras se ponía otra tortita sobre el plato
- Sois muy jóvenes, yo tengo 23 - dijo L, ella aún siendo la más mayor fue la cual más tarde reclutó K, solo ellas saben porqué tan tarde y como lo hizo ya que L no estaba por la labor de dejar a su gremio pero algo hizo K que tan especial tuvo que ser para que L se dejará convencer.
- Aún no creo como K pudo reclutar a Ol con solo 15 años - dijo E - además, sigo sin saber como K descubrió a Ol
- Sólo soy K, - dijo ella con un tono seguro - K es fuerte y siempre encuentra lo que quiere
//Narra K
Me siento horrible por haber dicho eso ,yo...