Parte 27. No me dejes otra vez

3.5K 143 77
                                    

Con la llegada de la paz, por fin Megatron y Optimus pueden hablar
-------------------------------------------------------------

-¡¿Crees que fue fácil para mí aceptar que te amaba, después de todo lo que hiciste?!-. Prime quedó paralizado ante sus propias palabras. Habían estado tanto tiempo guardadas que sin soportarlo más, salieron solas. Finalmente había llegado el momento de hablar con la verdad y ambos lo sabían.

-¿Qué...dijiste?-. Optimus soltó bruscamente a un sorprendido Megatron dejándolo nuevamente en el suelo para después darle la espalda sin poder mirarlo de frente.

-No podía creer que estos sentimientos seguían en mí, pero hasta hace poco lo entendí. Ese día que te volviste un criminal y pusiste a Cybertron en tu contra fue el peor de toda mi vida. Como Orion Pax estaba destrozado y desesperado, y cuando Primus me entregó la Mátrix dándome el título de Prime, pensé que me olvidaría de lo que hubo entre nosotros y seguiría adelante. Pero...- hizo una pausa recordando con pesar su enfrentamiento con un Megatron bañado en el energon de Ironhide y prosiguió -cuando finalizó nuestro primer combate contigo derrotado y retirándote, de alguna manera, muy en el fondo sabía que mi amor por ti nunca se extinguiría; por eso me decepcioné de mi mismo. Ni siquiera con los asesinatos que cometiste, ni el haberme arrebatado mi hogar me hizo odiarte; aunque pude ser capaz de enterrarlo en lo más profundo de mi spark, esto que sentía nunca se fue-. Apretó los puños armándose de valor para encarar a Megatron quien se había puesto de pie mirándolo expectante y sin habla.

-Megatron, prometimos cambiar nuestro mundo por uno mejor, fue por eso que te pusiste frente al consejo y exijiste, pero lo único que recibí de tu parte fue desprecio y egoísmo ¡Le diste la espalda a tu gente! ¡A mí! ¿Siquiera signifiqué algo para tí? Entonces, ¿por qué insistías en tenerme a tu lado?¡Respondem...!- Los labios de Megatron lo callaron sorprendiéndolo, este tomó el rostro del Prime entre sus manos depositando un beso tierno que hizo a ambis cerrar sus ópticos. Después de un tiempo indeterminado, se separaron con lentitud conectando sus miradas.

-No te pediré que me perdones, Optimus, porque lo que hice es imperdonable, pero estoy dispuesto a decírtelo todo-. Musitó Megatron sin saber como proseguir.

-Verás, es...complicado. No es nada fácil de explicar y no soy bueno con las palabras, pero lo diré sencillamente...-. Optimus con seriedad se puso atento al argumento del otro mech.

-Es verdad que prometí cambiar el gobierno, obligarlos a mejorar la vida de los habitantes de cada rincón del planeta; y sí, quería cumplirlo, pero no era nada fácil hacerlo. Tu sabes que estuve mucho tiempo preparándome para ello. Tuve la necesidad de pedir la Mátrix porque si me convertía en Prime y recibia poder y autoridad, sería capaz de llegar más lejos, hacerlo más sencillo. Tenía tantas ganas de lograrlo, tantas ganas de regresar triunfante contigo que incluso estuve dispuesto a hacer un golpe de estado, una guerra...Sin embargo, nunca me detuve a pensar que es lo que tu dirías ni que sentirías si lo hacía, y cuando te paraste frente a esos viejos, toda esa visión se derrumbo. Pensé que si tu te hacías cargo de todo, yo ya no te haría falta, que no volverías a mirarme como antes por lo que conllevaba ser un Prime; además, tenía miedo de todo. Siempre fuiste tan pequeño y frágil, tan alejado del conflicto que inmediatamente me negé a aceptar dejar ese peso sobre tus hombros.
Todo fue por mi egoísmo y mi ambición de tenerte a como de lugar sin importar el modo, sin importar en qué debía convertirme para alcanzar lo que tanto deseaba; ese mundo para nosotros era lo que más quería, pero sin darme cuenta, a base de mis acciones todo se me fue de las manos hasta el punto en que ya no podía hacer nada. Cuando vi a Cybertron caer en la ruina y la corrupción,fue cuando me pregunté, ¿ahora que camino debo tomar? ¿Qué será de nosotros? Ese sueño imposible ya no existía. Mi propia oscuridad me consumió y quise hacer las cosas del modo inapropiado; rompiendo leyes, arrebatando vidas como las de esos ancianos, traer el caos a nuestra tierra; esa fue mi perdición, pero lo peor fue cuando me dí cuenta que te volviste mi enemigo tras haber asesinado a ese mech llamado Ironhide, ese amigo tuyo que me daba celos nada más mirarlo contigo; estaba tan inseguro que quise matar a todo aquel que te mirara o tocara. Supe que estaba loco, tan perdido con la idea de obligarte a tenerte que desvié mi rumbo en un sendero sin retorno.

El cybertroniano más deseadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora