Enamorada De Un Bombero |K. S|

Capítulo 1: El Primer Contacto

Seis meses. Eso es todo el tiempo que llevo preparándome para mi primera operación en cubierto fuera de la ciudad. A principios de año nuestro comisario nos informó de qué uno de nosotros –preferiblemente una mujer–, se tendría qué meter infiltrada en una estación de bomberos por un tiempo ilimitado. Según sabemos por la denuncia de una antigua oficinista uno de los tenientes puede estar abusando de alguna que otra trabajadora del parque y ya que el chico tiene fama de mujeriego puede no ser la única mujer a la que le ocurre esto.

– ¿Jefe Boden? La chica nueva de Los Ángeles acaba de llegar.

– Perfecto, dígale que entre y de paso llame a los tenientes.

Para ser exactos llevo en Chicago un par de semanas pero ellos no lo saben. Piensan qué acabo de llegar a la ciudad hace escasos días, justo con el tiempo justo de acomodarme en mi nueva casa y conocer mínimamente la ciudad para no sentirme desorientada aunque detrás de eso hay otras razones. La principal es que necesitaba conocer a fondo a los integrantes de mi turno, tanto bomberos como a paramédicos ya que tengo entendido por la denunciante que son como una gran familia.

La mujer que anteriormente la escuchaba hablar con el jefe de la estación sobre mí me da permiso para entrar al despacho. He sido puntual como siempre aunque la Olivia que voy a ser durante este tiempo infiltrada no es la misma que la de Los Ángeles. La chica que dejé hace unas semanas allí no tiene nada que ver con este personaje. Aquí soy una chica joven recién expulsada de la policía huyendo de mi ex novio pero no tiene nada que ver con eso, en realidad es todo lo contrario. Tengo novio desde que estaba en el instituto y obviamente sigo en la policía porque sino no estaría aquí.

– Buenos días, soy Olivia Perry.

– Un placer –comenta dándome un apretón de manos–. Bienvenida a Chicago.

– Gracias.

Sé quién es a la perfección y parte de su vida. Es dos veces divorciado y está casado con Donna, también tiene un hijo junto a ella. Habla mucho con Peter Mills que era hijo de un amigo suyo cuando era joven y así algunas cosas más.

– Me sorprende lo joven que eres y la facilidad que tienes de encontrar nuevos trabajos, sobretodo los cargos importantes.

Tenía claro que iban a pedir una ficha a los superiores para conocerme un poco mejor pero no que la tendría encima de la mesa cuando llegara.

– Bueno, crecí con la idea clara de ser policía y por suerte pude entrar en la academia muy pronto...

– ¿Y por qué le expulsaron?

– No me gustan las injusticias de ningún tipo y por defender lo que me parecía correcto les hizo ver que quizás lo más apropiado para ellos fuera echarme.

– Ajá. Pero lo que no llego a entender es ¿por qué has cambiado de especialidad?

– Necesitaba un cambio de aires o de rutina, aún no he logrado aclararme –reímos para destensar el ambiente–. Pero estoy muy contenta de poder estar aquí.

– Me alegro –golpean suavemente la puerta del despacho–. Pasen tenientes.

Ahí está.

Kelly Severide.

– ¿Ella es la aspirante? –pregunta el otro hombre que le acompaña al demandado–. Soy el teniente Matthew Casey.

– Encantada, Olivia Perry de la academia de Los Ángeles.

– Kelly Severide –se presenta antes de apoyarse sobre la mesa de Boden–. ¿En qué camión irá?

– Todavía no lo he decidido –responde el jefe–. Voy a darte la oportunidad de elegir, si al cabo del turno no estás segura de querer pertenecer a ellos te daré la oportunidad de cambiar –acepto su propuesta–. Casey es del camión 81 y Severide del escuadrón 3, está en tus manos.

– Bueno, ya que al final del día podré cambiar de equipo si no me veo capacitada, creo que me quedaré con el 81.

– Oh... –grita sorprendido el que ahora es mi teniente– ¡Bienvenida!

Río.

Sé que a mi jefe le va a parecer mal que haya desaprovechado esta oportunidad ya que haber elegido el otro camión supone abrir otro método para buscar la verdad pero no deja de ser una estrategia. Empezaré por acercarme a todos sus amigos mientras que a él lo dejo de lado y él mismo será el que se acerque a mí pensando en que algo mal ha hecho conmigo para que yo no quiera tener ningún tipo de relación con él.

Llega al despacho por segunda vez la recepcionista y nos informa de que unos tenientes de otro distrito acaban de llegar, eso hace que Boden y Matt se vayan a encontrarse con ellos dejándonos a Kelly y a mí a solas.

– Con todo el respeto novata, estás loca por haberte venido sola hasta aquí y encima siendo bombero.

– Y con el mismo respeto teniente, a veces las mejores oportunidades se desaprovechan porque nos parecen locuras y lo que no nos damos cuenta es de que son las mejores.

– ¿No has tenido una vida fácil, verdad?

– Digamos que soy lo que ves gracias a muchos altibajos de mi vida.

– Eres un poco borde.

– No, eres tú que estás buscando una excusa para decirle a mi teniente que no encajo en su camión.

– ¿Perdona? –pregunta sorprendido ante mi respuesta–. Te estás equivocando.

– Conozco a muchos tíos como tú y sé que te ha jodido no haber sido el elegido pero mira el lado bueno, no vamos a tener que discutir por trabajo.

Los hombres cuando se trata de una chica se llevan las cosas a lo personal, todo varón quiere ser el elegido sino se ofenden y este chico es así. Se lo calla porque para él eso es ser más hombre y lo que no entiende es que enfadarse por eso sí es ser menos hombre.

– ¿Pero por qué el camión en vez del escuadrón? Nuestra vida es más emocionante.

– Todo bombero tiene una vida emocionante, no por estar en el escuadrón cambia la cosa. Para ser uno de los mejores bomberos de la estación veo que te importa más la emoción que salvar vidas.

– Es la opinión de una novata.

– Lo sé.