31 de diciembre de 2008
Lo malo de vivir tan lejos de tu familia, es que, en fechas como hoy, los hechas de menos más de lo normal.
Es en estas fechas cuando quieres recibir un abrazo de tu madre, o escuchar historias de la abuela, esas que cuenta para entretener a sus bisnietos. Caminar por la ciudad, el último día del año, sola, es la cosa más triste que podías pasar en tu vida.- ¿Grace? - Reconocía ese tono de voz. -Hola Grace. - Dijo con una sonrisa en su cara. Esa sonrisa que tanto me encantaba. -
- Hola Max -Conteste de igual forma.
- ¿A donde vas, Grace? - Pregunto mientras acomodaba su gorro de lana.
-Estoy caminando sin ningún rumbo. -Dije mirando a los lados.
- Que casualidad, yo casualmente caminaba a tu apartamento.
Mi corazón dio un vuelco. No puede evitar preguntar que tenías que hacer en mi departamento.
- Oh, solo iba a saludar. -Dijiste meneandote sobre tus pies.
****
Como explicar esto Max.
Me pone nerviosa que estes en mi apartamento, el último día del año.
Me pone nerviosa, el pensar que preferiste recibir el 2009 a mi lado.
Espero esta sea una noche maravillosa, aunque con el simple hecho de que estes tu aquí, ya la hace perfecta...- ¿Grace? ¿Esta todo bien? - Dice con tono suave al otro lado de la puerta.
- Eh... Si, ya voy. -Buscó con la mirada, donde meter ese pequeño cuaderno para que Max no lo vea. Encuentro un hueco lo demasiado grande para tapar el cuadernillo y lo escondo ahí.
Abro la puerta y ahí esta el, recargado en la pared. ¿Como es que alguien puede ser tan perfecto sin siquiera planearlo?
-Pense que algo malo había sucedio, Grace. - Dice mientras se incorpora y mira detrás mío. - ¿Puedo pasar al baño?
- Ehmm... -Digo mirando hacia mi pequeño escondite. -Eh si, yo... Yo ire a limpiar la mesa.
Salgo corriendo de esa escena lo más rapido posible. Puedo escuchar como la puerta es cerrada. Me giró viendo la gruesa puerta color café. Espero mi escondite sea demasiado bueno como para que Max no encuentre mi cuaderno, el cual esta dedicado en su mayoría a mis encuentros con el.
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Enamorandome Del Café.
Short StoryUn café. Un chico. Una cita. Un amor. Nadie sabe como se enamorara de alguien. Quizá pueda ser en un accidente. En un vistazo o en un local. Quizá alguien pueda enamorarse por servir solo café.