—Te estuve llamando toda la noche...—
—..Perdón..—
Se disculpó,su voz sonaba entrecortada y gastada.
Se encontraba en cama,con el dolor que sentía le fue imposible salir de allí.—¿Así que...gripe?—
El menor asintió,recibiendo un abrazo del castaño.
—Golden...¿Porqué ayer te fuiste así..?—
Cuestionó con preocupación el de orbes cielo,dejando en silencio el lugar por unos momentos.
—Me gustas,siento atracción por ti porque estas siempre a mi lado...pero no como para ser tu novio o algo,no me siento capaz,no me mereces y no se que carajos hicimos ayer en tu cama.—
No sintió culpa,más si dolores en sus interiores por hablar tanto con sus cuerdas vocales débiles.
—..A-ah,ya veo,lo sospechaba...—
—Perdona.—
Recibió una sonrisa.
—No importa..—
—..Quieres..¿Volver a hacerlo...? Tal vez..sienta algo si..Lo hacemos de una manera más lenta.—
Y minutos después,olvidándose completamente de cualquier cosa que hicieron o dijeron,ya estaban haciéndolo.
El rubio saltaba sobre el miembro del de cabellos castaños,con las manos en la nuca y tirando su cabeza hacía atrás para gemir como toda una puta.
El peli-rojo sonrió,ya habiendo grabado todo.
Era sencillo,cualquiera se podría confundir.'No me gustas.'
'Si lo hacemos otra vez quizás sienta algo'
Y lo que iba a ser lento,fue una relación sexual con desesperación y deseo.¿Golden,la nueva puta del colegio?
Gracias a su padre.