¡... No te vallas ahora..!

¡¡Fiesta, fiesta, fiesta!!

Al fin es sábado, finalmente había llegado el día en que Xime celebraría su fiesta de XV años, estaríamos todos sus amigos hoy con ella demostrándole el gran cariño y apoyo que le tenemos hacia ella.
Empecé mi sábado en la mañana como siempre suelo hacerlo, empecé alistando el vestido que usaría esta noche al igual que estaba buscando las zaptillas adecuadas para la ocasión, finalmente de tener el vestido negro con piedras grisáceas alrededor del cuello y los tacones de plataforma, me encamino con mi madre para repasar el plan de esta noche.
- Saldrán de casa a las 5:30 de la tarde, se irán el  auto por el cual tu hermano tendrá que conducir, trataras de ayudarlo cuando te lo pida ya saben que con muchísimo cuidado. No por tu terquedad de llegar temprano le dirás a tu hermano que acelere o que se vuele el semáforo estando en rojo, no beban alcohol y no acepten sustancias de sus amigos que saben que se drogan. Finalmente los espero aquí en la casa a las 2 de la mañana, sean puntuales y estén sobrios- dijo mi madre repasando el plan y dejando más en claro que no jugáramos en creernos los mortales manejando.
- Más que perfecto, ¿podrías prestarme un bolso para llevarme unas zapatillas de piso por si me canso?- le dije a mi mamá mientras jugaba con mi cabello enredándolo en mis dedos.
- Esta bien, pero que combine. Nada de colores extravagantes cuando tu vestido es muy formal, ha por cierto casi se me olvida, te portas bien por favor- dice mi madre con una mirada amenazante.
- Eso es más que obvio, ¿Qué es lo que puedo hacer? Soy una niña buena y casi nunca hago cosas malas- le dije alagándome.
- Si claro, te portas tan bien que retaste a todos tus amigos a una carrera de tacones cuando la mayoría ya no estaba sobriamente- dijo con un gran sarcasmo
Lo único que hice fue alargar una carcajada, aquella vez de la carrera de tacones fue tan divertida que jamás olvidaré el día en que me di cuenta que envidiaba a mis grandes amigos por que sabían caminar mejor en tacones que cualquier otra mujer.
Para poder apresurar el tiempo empecé a ordenar un poco mi habitación, empecé limpiando el escritorio en donde seguía teniendo uno que otro trabajo del año anterior, al igual que unas fotografías en donde salíamos todos mis amigos y yo, era tan feliz con ellos, en verdad les tengo un gran cariño a cada uno.
Seguí pasando las fotografías, en donde cada una tenía un significado especial, por ejemplo en una donde salimos mi mejor amigo y yo, recuerdo que tome esa fotografía con el pretexto de que no teníamos fotos, pero en realidad era para un portarretratos que le di el 14 de febrero en muestra de nuestra amistad.
También aquí hay bastantes en donde salen Hazel, Sabri, Mora, Ari y yo cuando solíamos sentarnos todos los días en la esquina principal hasta el fondo, donde tenía a las mejores personas en mi entorno, a los mejores comediantes, donde escuchaba las más sinceras sonrisas y sobre todo en donde podía cantar uno de nosotros y en vez de callarlo, ahí nos tenían a todos nosotros cantando a todo pulmón. Eran tan perfectos los días, como los extraño.
Seguí viendo las fotografías mientras escuchaba Somebody Else de The 1 9 7 5, sin darme cuenta ya eran las 3 de la tarde, por lo que deje las fotografías en el escritorio y empecé a alistarme para poder llegar a tiempo.
Finalmente después de secar mi cabello, tuve que plancharlo por lo que tarde una hora, pero finalmente lo logré, salimos a tiempo y mi hermano me llevaba a la fiesta, en donde la recepción sería en el salón Kristtal.
Al entrar se veía todo tan precioso, era realmente hermoso, ver todos los adornos, la mesa de dulces, pero principalmente ella que se veía tan hermosa en aquel vestido esponjoso de color rojo que hacía juego con su maquillaje y su peinado, podía decir al cien porciento que Xime se veía perfecta.
No pude evitar mostrarle una sonrisa cuando tuve que saludarla, le dije lo bien que se veía y ella me abrazo por un buen tiempo.
Al estar con mis amigos estuvimos tomándonos muchas fotos, empezábamos a charlar sobre a que hora se estarían marchando y que si en la noche bailaríamos. Sin darnos cuenta la noche empezaba a caer en donde empezaron con las primeras llamadas para la presentación de los bailes, al llegar a la tercera, todos entramos y empezamos a buscar un buen lugar para verla bailar.
Así empezó la noche, presentó sus bailes donde en cada uno de ellos se veía espectacular, los modernos habían quedado bien a pesar de que Alexis nuestro amigo que puso la coreografía se las veía de color negro por el hecho de que a veces los chambelanes se daban el lujo de no asistir a los ensayos sabiendo que no estaban nada blanditos para el baile.
Finalmente todo salió a la perfección, al terminar con la presentación de sus bailes, todos nosotros nos acercamos para abrir la pista de baile, todos cantaban y todos bailábamos con mucha alegría. Varias chicas me jaloneaban al centro de la pista con ellas para bailar y jalonear a más amigos con la finalidad de que daramos todo un espectáculo en el centro de la pista del baile, ahí estaba con Marijo, Alex, Alison, Sam, Dulee, Sabri, Marwen, Robert, Goof y yo pasando una gran noche.
Antes de que se acabará, mi amigo Kevin me llevo hasta el estacionamiento en donde dijo que tenía algo importante que decirme, al principio me tense pero después de que empezará a hablar de que se ligaría a una chica de nuevo ingreso en mi colegio donde apenas sabía muy poco de ella, me causó un poco de molestia y enojó ya que a mi me daba un carajo lo que hiciera hoy en esta noche.
Creí que estaba bromeando cuando me lo dijo, pero en realidad no fue así, cuando mire a Kevin pude ver que estaban besándose. ¿pero que carajo está pasando con el? Si le decía a Kevin que no tenía menos de 1 hora que había visto a la chica besarse con otro de mis amigos, estaba segura que el la terminaría ignorando por el resto de la noche; pero solamente lo ignore.
Cuando se separaron para tomar un poco de oxígeno, me encontraba en ese momento con mi mejor amiga y me estaba contando que con la chica que estaba Kevin ya estaba pasada de copas, a lo que yo no le creí por que sabía que solamente ella apenas llevaba consumiendo 1 cerveza y media por lo que no podía hacer tanto efecto, una cosa era estar pasada de copas y la otra muy diferente era montar una escena absurda. Finalmente se marchó cuando llegaron por ella.
Yo me encontraba sentada afuera del salón, donde se encontraban mi hermano y sus amigos, dos de ellos eran guapos, uno era muy simpático y muy divertido, pero el otro chico era un poco callado y daba la pinta de tímido.
- Hola- dice un chico sentándose a mi lado sonsacándome de mis pensamientos.
- Que tal- respondí sin quitar la vista del teléfono que tenía en mis manos.
- ¿Es táctil?- dijo aquel chico poniendo sus dedos en el teléfono haciendo que el mensaje que estaba escribiendo se hiciera un poco confuso.
- Aja- contesté irritada mientras alejaba el teléfono de sus manos.
- Uy que mujer- contesto mientras se levantaba y se marchaba con una botella en su mano.
Me sentía mal y un poco cansada por lo que le dije a mi hermano que cuando quisiera ya nos podíamos marchar, el solamente asintió y siguió hablando con otro de sus amigos que se me hizo buen rollo.
- Hola- dijo Kevin ya que reconocí su voz.
- Asentí-
- Creo que estas molesta por lo que acabo de ocurrir esta noche- respondió con un toque de pena.
- Oh no, claro que no. A mi me vale un carajo lo que hagas, ¿por qué creerías que estoy molesta?- respondí mostrándole indiferencia.
- No lo se, te conozco y puedo notarlo en ti. Lo lamento, solamente es que ya estoy un poco tomado y la verdad creo que si me gusta esta chica- me lo dijo mirando al suelo.
- Pues estás equivocado. No tienes que lamentarme nada, sabes lo cuanto que odio que te emborraches ¿no? Pero bueno, al final de cuentas no es mi vida Eduardo, sabes que tienes novia y que hasta rogaste para que consiguiéramos un pase para ella, pero oh ¿Qué pasó? Se te olvidó en menos de 5 minutos y te largaste a caldearte con esta chica. Sigue así Eduardo, putea y juega con los sentimientos de las demás, no hay problema- dije cabreándome más de lo que ya estaba.
- Lo siento- me contestó arrepentido.
- No me tienes que pedir disculpas. Me voy, no me siento bien y quiero ir a casa- contesté mientras lo dejaba ahí sólo.
Mi hermano me siguió hasta el coche, abrió para ambos y nos trepamos en el. No comento nada acerca de la pelea que tuve con Kevin, solamente para romper con el silencio puse The Reason de Hootobank mientras conducía de camino a casa. Así es como terminó la noche, una noche llena de respiraciones entrecortadas.

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Holaaaa!
Lo siento si está bastante extenso este capítulo, pero es que en realidad me acordé de como fue aquel día, desde que desperté hasta que volví a tocar la cama.
Ese día fue un éxtasis de sentimientos, lo ame tanto pero también lo odie un poco. Espero que les haya gustado, comenten y por favor inviten a sus amigos que conozcan de esta historia.
Los quiero . Baiiii :3