2 | Ella es, Sol

3 | Fue pasajero

Cualquiera diría que ambos estaban por besarse, pero no pasó, mucho antes Sol giró viendo hacia el frente y quedó sería, «Que estaba apuntó de hacer», se puso de pie y se sento en su cama, Tyler estaba en proceso de levantarcé y acercarse a Sol, posiblemente ya no aguantaba las ganas de decirle que la extrañaba, la amaba, y la necesitaba.

—Hola Levin.

Escuchó decir a Sol en el celular, Levin le había marcado, Tyler sintió un nudo de coraje en la garganta y sin decir nada siguió forcejeando la puerta, llamaba a las chicas, pero era inútil, seria mucha casualidad que alguien de el servicio los escuchara y abriera.

—¿Starbucks?,— escuchó decir a Sol con un rostro de «Rayos».

Era mas que obvio que el chicó invitó a Sol a salir.

—Hoy, no puedo Lev, mañana talvez sí.

Tyler quería salir de esa habitación ya, ¡Eso era mas que un infierno para el! ¡No lo soportaba! Su sistema no lo recibía, sentia una rabia inmensa, haci que recordó una buena opción; el celular, movió los dedos ágilmente y marco a su madré.

—¡Mamá ven a sacarme de la habitación de Sol!¡Merli me encerró!.

Sol observó el acto de el chicó, y decidió seguir en lo suyo.

No pasaron ni cinco minutos cuando Valeri llego con las niñas y abrieron la puerta.

—Graciosa,— dijó Tyler a su hermanita.

Cuando cerraron la puerta nuevamente Sol aventó el celular en la cama, y se dejó caer en ella misma, ¡fingió la llamada! Era la única buena manera de intentar calmar las ganas de besar a Tyler y decirle que lo quería, y que jamás quería perderlo otra vez.

En momentos pensaba que Levin seria la estrategia perfecta para olvidar de una buena vez a Tyler, pero... para que hacer eso si ya tiene a Tyler nuevamente. «Maldita confusión».

(...)

—¡Esto está buenísimo!,— dijó Sirel atascándose el espagueti que la cocinera hizó, obviamente con la receta de Monica.

—Es la comida de los dioses,— seguio Gael.

Por su parte Sol estaba sentada con ellos, en las amacas de el jardín, era algo muy cómodo y lindo, a excepción si no estuviera taaan incómoda.

—Cuéntanos, ¿Que hacias en España?,¿Tenias novia?,¿Salias con alguien?,— preguntó Sirel viendo de reojo a Sol, sabiendo que esa respuesta pondria a la rubia sacando humo por los oídos igual que ella lo hizo con él en el colegio.

Por su parte Sol se puso temblorosa, quisiera o no, su respuesta dependía de la comodidad de como dormiría esa noche.

—Pues, no tan exac...

—¡Si tenía novia!,— dijó Merli batiendose,— se llamaba Dana, es de España.

—Claro que no,— respondió Tyler rápidamente.

—Haber Merli, cuentanos mas,— Sirel sonrió sarcásticamente.

—Merli, deves estar con mamá,— Tyler se puso de pie.

—Se llama Dana, una vez vi que se besaron en el jardín,— dijo la pequeña sonriente limpiamente.

Sirel sonrió al ver como Sol detenidamente observaba las palabras de la pequeña, estaba tan concentrada en lo que decía la niña, que no se dió cuenta como todos la veían comprobando que sintió celos, y si sintió celos es porque aún lo quiere, Tyler estaba nervioso, ¿era verdad?, encerio estuvo con alguien después de Sol, el chicó llevó a su hermanita adentro, junto a Mar y Nesee.