30 One Shot Challenge [Monsta X • HyungWonho]

06. Moda

Tenían muchos años saliendo, tanto que ahora, hacía ya mucho tiempo vivían juntos, compartían todo, disfrutaban de su vida y su intimidad en los momentos fuera del trabajo que era el único lugar donde no podían verse.

Hoseok despertó temprano, dejando al menor dormir, era día libre de ambos, por lo que podrían flojear y tener un día para ellos dos.
Observó a Hyungwon dormir, le besó en el rostro un par de veces, riendo un poco cuando el alto le abrazó y se acurrucó contra su cuerpo.

—Woonie despierta. —susurró con cariño el mayor, acariciando los cabellos ajenos.
—No... —gruñó el chico frotando su rostro contra el fornido pecho ajeno.

Permanecieron así un rato hasta que Hyungwon despertó completamente y se sentó en la cama mirando a su novio, con ensoñación, esperando alguna respuesta de él.

—Quiero ponerme tú ropa, seguro me queda grande. —fue lo que dijo Hoseok con una sonrisa abrazando a su menor.
—¿Qué dices? Está hecha a la medida, la vas a arruinar.

Hyungwon no se creía eso, Hoseok era idiota pero ¿tanto? El menor era notoriamente más alto que Hoseok, pero mucho más delgado, entonces la ropa o le quedaba estrecha y larga o de entrada la rompía y dejaba su costosa ropa hecha a medida, valiendo nada.

—Quiero verme a la moda, como tú.
—Confecciono tu ropa a la medida y gratis, deja el drama Hoseok.
—Te pago si arruino tu ropa. —insistió Hoseok, dejando besos en el rostro del más bajo.

Hoseok en toda su expresión era la debilidad del alto, y más ahora que se veía pequeño y adorable haciendo pucheros y actuando como un niño para conseguir que el menor accediera, por. Lo que tras un par de minutos rogando, Hyungwon aceptó y Hoseok salió disparado del cuarto.
El menor tenía miedo, Hoseok era demasiado musculoso, él sólo era un palito y toda su ropa era confeccionada por él mismo, así que sólo su delgaducho cuerpo pasaba por aquellas prendas, estaba asustado, demasiado, y tendría que pensar en nuevos diseños porque su ropa se estropearía completamente.

Hoseok entró como si fuese un modelo, con una camisa demasiado ajustada, donde los botones parecían luchar por cerrar la prenda, en bóxer y un abrigo largo que se arrastraba por el piso y que ni siquiera le cerraba.

—Dios, Hoseok, me voy a volver loco... —habló con dramatismo el menor.

La imagen le causaba gracia, pero sí no fuera su ropa, seguramente estaría muerto de risa, pero no, no le causaba ni una pizca de gracia, no podría usar eso, seguramente quedaba todo holgado y feo, era un mar de sufrimiento.

—Me veo fashionista, soy todo un icono de la moda. —hablaba Hoseok convencido de aquello, viendo luego la cara de sufrimiento de Hyungwon y eso le causó más gracia.
—No eres un icono de la moda, eres un icono del desastre. —dijo sonriendo por fin ante las ridículas poses de su novio.
—Pero eres el desastre que amas. —Hoseok se montó en la cama y gateó hasta Hyungwon.— Y no te preocupes, es sólo ropa, preocúpate cuando me rompa la cabeza por idiota.

El alto carcajeó abrazando a su novio y ayudándole a sacarse esas prendas, regalando besos en el rostro de Hoseok, quien estaba risueño y a gusto con Hyungwon.

—No vuelvas a hacerlo, te ves ridiculo, para eso confecciono tu ropa, para resaltar tus atributos. —dijo al dejarle nuevamente en ropa interior.— Mi ropa te queda larga y estrecha, como la tuya me queda corta y ancha, no lo hagas otra vez, tu nivel de idiotez no puede aumentar.
—Me amas así, lo sabes. —se quejó el mayor empujando un poco al más alto quien cayó en la cama riendo.
—Sabes que te amo, así que cállate y págame las costosas prendas que arruinaste.
—¿Aceptas pago en especie?

Ambos rieron y continuaron con su día de relajo, eran una pareja estable, pero Hyungwon ni loco iba a permitir que eso volviese a suceder, era su preciada ropa y aunque amaba a Hoseok, esa ropa era lo que daba parte d ellos ingresos a la casa.
Pero se amaban, y eso no iba a cambiar por un par de prendas costosas arruinadas