Capitulo 1.

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Estaban justo aquí frente a nuestros ojos, llenos de sangre y con poca fuerza.

Mi madre lloraba al decirle sus últimas palabras a mi hermano, nuestro padre no evitó hacer una broma como siempre. Menma y yo solo observábamos como sus cuerpos inertes caían al suelo después de haber sellado el kyubi en Naruto.

La barrera se rompió al caer mi madre al suelo. El tercero y varios jounin llegaron llegaron ya para el desastre. Mientras mi hermano mayor sostenía al rubio tembloroso yo estaba agarrando a mi madre mientras lloraba.

—Kushina... —la vos del tercero era de angustiada pero ya no había oportunidad de salvarla.

—Tanquila hija... Siempre estaremos con ustedes... —me regalo una pequeña sonrisa mientras que miraba al anciano. Yo no paraba de llorar—... Sandaime... Cuide de mis hijos... Onegai. —Esas fueron sus últimas palabras antes de cerrar los ojos para siempre.

—¡OKAA-SAN...! —Grite apretando fuertemente su cuerpo con el mío. No podía parar de llorar pero sobre todo no podía dejar de sentir este dolor tan inmenso que acaba de formarse en mi corazón.

*🍥*

Meses después.

— ¿Sabes que las cosas cambiaran a partir de ahora, verdad? —Menma me agarró de los hombros, estaba de espaldas viendo por la ventana de mi habitación.

Naruto jugaba con sus muñecos mientras que yo estudiaba los jutsu de nuestro clan. En un año entraré a la academia y tengo que estar preparada.

—Eso lo sé bien desde que mamá y papá murieron ese día. Pero si te digo la verdad nunca hemos sido bien tratados en la aldea. Sólo aparentaban al ser hijos del Hokage más nada —dije con algo de mala gana mientras apretaba el pincel hasta romperlo por la mitad.

Suspiré pesadamente mientras me recostaba en el suelo. Mi hermano me veía desde arriba negando con la cabeza, suspiró igual de pesado que yo recostándose a mi lado también. Poco después llegó Naruto y se acostó arriba de los dos.

—Estas muy regordete Otouto —sonreí picándole la nariz como siempre hacia recibiendo una carcajada de su parte.

—A partir de ahora tenemos que cuidarnos más entre nosotros (Tn)_____, juntos podremos salir adelante.

—Eso lo sé bien Onii-chan —me recosté en su hombro cerrando los ojos, no me vendría mal una siesta.

*🍥*

1 Año Después.

6 Años.

Era el día de la ceremonia de apertura para los nuevos niños a entrar a la academia, mi hermano estaba con Naruto en brazos mientras me veía con una sonrisa, yo alce mi pulgar y le regale una sonrisa dándole toda mi confianza. Cuando volví a girar mi rostro nuevamente pude observar como un niño de cabello negro me miraba extraño.

— ¿Tienes algún problema? —Levanté una ceja en señal de fastidio.

—Ninguno, es solo que tu cabello parece un tomate.

—¿Qué dijiste?

—Dije que pareces un tomate —hablo nuevamente con un tono fastidioso.

—Pero que niño tan molesto —le dije antes de entrar y perderme entre la multitud.

(...)

—Estaremos en el mismo salón. ¡¿No es grandioso?!

—Para mi desgracia, no. —Le dije al chico mientras trataba de quitármelo de encima, se me había pegado como chicle y eso me comenzaba a molestar.

La Hija de Kushina | Obito x TuDonde viven las historias. Descúbrelo ahora