Leopard (OnTae)

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Pasaron algunos días desde que habíamos llegado a la casa, había mantenido mis charlas agradables con Onew durante las tardes en las cuales no debía salir con Jonghyun a completar la agenda, aun no he pedido salir al jardín como deseaba, quería mostrarle a Onew porque me gustaba tanto ese lugar, tal vez me dejen salir hoy ya que no hubo motivos en toda la semana para que me castigaran.

Finalmente Jonghyun antes de irse esa tarde me dijo que podía salir al jardin de nuevo, lo cual me hizo sonreír mucho por las ganas que tenia de salir allí, espere a que Onew viniera a verme como hacia cada tarde y prácticamente lo arrastre fuera riéndome ante sus preguntas de a donde íbamos. El jardín era realmente inmenso había flores de todas las clases posibles, rosas, girasoles, jazmines,tulipanes dalias y mis favoritos, los narcisos, también había algunas fuentes de agua y parras que formaban pequeños puentes, si no te volteabas a ver la casa pensarías que estabas en un bosque, era lo mas cercano a la libertad que tenia. Camine arrastrando a Onew hasta casi el centro del jardín y sonreía al ver su asombro al ver a su alrededor... -Cuando no estoy castigado me gusta pasar el tiempo aquí- le dije mientras me sentaba en el césped - a veces estoy durante horas aquí y tienen que venir a buscarme, porque si fuese por mi, me quedaría aquí todo el tiempo-

-Jamas vi algo así....- Lo veía realmente sorprendido mientras se sentaba a mi lado y sonreía, respire hondo sintiendo el aire fresco que nos rodeaba y cerré los ojos a la vez que me tumbaba en el césped, a los pocos minutos pude sentir que el hacia lo mismo, fui abriendo los ojos para mirarlo y sonreía al ver que él ya lo estaba haciendo...-Creí que no podrías verte mas lindo, pero claramente luces hermoso entre tantas flores...- reí levemente al escucharlo y golpee su brazo con mi codo, él también rió y se acerco mas a mi para luego tomar mi rostro con una de sus manos y acariciarme, volví a cerrar los ojos ante su toque y lo próximo que sentí fueron sus labios tocando los míos, no habíamos vuelto a besarnos desde aquella vez en la habitación donde casi nos descubren, fui respondiendo al movimiento de sus labios para luego seguir el de su lengua, nos abrazamos fuerte apegandonos el uno al otro sin dejar un espacio en medio, enredando nuestras piernas mientras profundizábamos el beso... Era lo mas maravilloso que podría haber sentido, mi cuerpo casi temblaba por la emoción de estar tan apegado a él, me sentía realmente protegido y amado a su lado. 

Cuando él se separo de mis labios, sentí el calor en mis mejillas y le sonreí a la vez que él también lo hacia y nos mirábamos fijamente, aun me costaba creer que él estuviese aquí, todo era demasiado bueno para ser real, de un día para el otro, él volvía aparecer en mi vida y me hacia sentir feliz de nuevo aunque sea por un momento, me daba esa pequeña esperanza de que algún día seria libre lejos de esta casa y de Jonghyun, podía ver en sus ojos que él quería eso, él quería sacarme de aquí y llevarme lejos, pero no era algo fácil de lograr, no había forma de que Jonghyun me dejara libre algún día, pero aun que jamas lo fuese estaba conforme con el simple hecho de que Onew estuviese aquí.

Nos quedamos por algunas horas recorriendo el jardín, le enseñe el nombre de cada flor que veíamos, él parecía realmente sorprendido de que supiera el nombre de cada una de ellas y sus características, realmente no había nada que hacer allí asique me dedique a aprender eso durante todos los años que había pasado allí y en estos momentos me sentía muy orgulloso de ello al ver cada una de sus expresiones mientras le explicaba.

Cuando comenzó a caer la noche volvimos a la casa, no tenia permitido quedarme mucho mas que ese tiempo, puesto que si se hacia de noche seria difícil encontrarme entre medio de tan inmenso jardín y eso desesperaría a Jonghyun, de todas formas no había forma de que pudiese escapar, ya que pasando todo el jardín el terreno estaba completamente vallado, pero Jonghyun mantenía su paranoia. 

Esa noche volvió a quedarse a mi lado como la hacia desde que habíamos llegado, se quedaba observándome hasta que se aseguraba que estuviese durmiendo y luego se iba a su habitación, me gustaría que pudiese quedarse a dormir conmigo, pero eso no seria posible, solo era un deseo tonto.