Corazón de obsidiana

Primeras Impresiones

A la mañana siguiente Luna había regresado a casa por si misma; pero su sorpresa había sido que en el comedor había una nota:

"Lo siento. Yo lo siento..."

Luna subió rápidamente a revisar las habitaciones, y su sorpresa fue que las cosas de Celestia y Cadence no estaban...

"¿Dónde está Celestia? ¿Cuándo volverá?..."

Capítulo 4. Primeras impresiones.

A mitad del verano; Luna presentaba un caso de abandono, por lo cual, la ciudad le agendo al programa de emancipación por abandono, quien le tendría a un cuidador cada mes quien le daría una mesada, debido a sus altos méritos académicos y por la desaparición de sus padres; los padres de Candy estaban al tanto; pero Luna no deseaba dejar su casa; pues creía firmemente en que en algún momento regresarían Celestia y sus padres, quizá su hermana Amore y su esposo también estarían buscando a la pequeña Cadence.

Las vacaciones de verano habían terminado, Canterlot High abría sus puertas a los nuevos aspirantes por un futuro mejor. Candy y Luna se mantenían juntas entre cada clase; más el tema de la familia de Luna, no debía hacerse público.

Esto por momentos le daba esperanza a Luna que pronto su hermana quizá regresaría si ella se destacaba en la escuela; pero la idea seguía circulando y resonando en su mente "¿Dónde está Celestia? ¿Cuándo volverá?" Pues nadie en la escuela estaba enterado sobre la situación en la que vivía.

Al receso; Luna y Candy se encontraban comiendo una ensalada y entonces en ese primer instante lo conoció a él. El Director Star Swirl se acercó a Luna – Señorita Faust, es una alegría encontrarla- Luna y Candy miraban al chico nuevo –Les presento a Roy Somber – el chico miraba a Luna y sus miradas se quedaron fijas–Es un alumno nuevo de intercambio; es un genio que promete grandes expectativas- él era un joven de cabello largo oscuro y atado en una coleta, jeans y zapatos oscuros, camisa a un estilo gótico y ojos carmesí que lo hacía ser altamente vistoso-Sé que quizá es repentino en este momento, pero el comité de estudiantes, está ocupado y me parecía perfecto que usted le diera una visita guiada- el chico se acercó a Luna.

-Buenos días señorita- el joven tenía un acento extraño –Espero podamos ser grandes compañeros- se sonreía y extendía la mano hacia Luna

-Ah... Buenos días- Era enigmático, su sola presencia hacía sentir confundida a Luna; pero no podía negar que le parecía un chico interesante –Me llamo Luna Faust- ambos chicos se habían quedado perdidos en sus miradas, el director se retiraba con la seguridad que había hecho lo correcto, mientras que Candy se encontraba en primera fila de quizá el primer romance de su amiga.

-Pues yo los dejos solitos mis tortolitos- Candy tomó sus cosas y en son de cotilleo, dejó sola a su amiga frente al chico

Luna y Roy caminaban por los pasillos, ella explicaba sobre los logros de la escuela, le mostraba las aulas y lo que había en cada una, pasearon un poco más por el gimnasio y finalmente llegaron a las áreas verdes donde se encontraba el invernadero; él solo hacia pequeñas preguntas pero estaba gustoso de escuchar a la chica peliazul, ver el ánimo que tenía por la escuela le parecía tierna.

-Y finalmente hemos llegado al corazón de la escuela, el potro de Canterlot- Luna mostraba la parte final de la visita, la estatua que era símbolo de orgullo de la escuela y explicaba su origen -¿Qué te parece?-

-Entonces eres orgullosamente Potro de Canterlot ¿cierto?- el chico hizo hincapié al finalizar la visita guiada de Luna

-Si- dijo ella efusivamente-¡No hay nada mejor!-

-Imagino que tu familia debe estar orgullosa de tenerte en una escuela tan prestigiosa- el chico habló con naturalidad; pero estas palabras detuvieron el ánimo feliz de Luna y aunque intentó ocultarlo; se sintió abatida en un instante

-Eh... Claro, mi familia...- miró su reloj- bueno, es momento que volvamos con el director para que conste que has terminado tu visita, será un placer tenerte en la escuela- Luna miraba al chico, que estaba aún mirando hacia la estatua, no se había percatado en absoluto en las reacciones de ella

-Es curioso- el chico seguía estático

-¿Qué cosa?- Luna se mostraba semi-animada

-De donde vengo, nadie presenta esa alegría y amor por su escuela- tocó la escultura y luego volvió a mirar a Luna –Creo que ya quiero formar parte de Canterlot High- sonrió para ella, quien también le correspondió –Pero...-

-¿Pero?- Luna se mostró intrigada

-Te voy a ganar- el chico sonrió –Luna Faust, he escuchado que eres una chica bastante inteligente; primer lugar en las olimpiadas del conocimiento del estado, ganadora del torneo de ajedrez pero segundo lugar en el rally de ciencias de investigación juvenil, todos afirman que podrías ser más lista que tu hermana... Yo creo que podría ganarte a ti o a tu hermana- su semblante de chico calmado se había transformado a uno retador y de supremacía.

-Es que... creo que no te entiendo- Luna dio un par de pasos atrás

-Eres lenta para ser una nerd - el chico se acercó a ella, tomó de su brazo y la puso contra la parte plana de la estatua, colocó sus manos a los lados de ella para acorralarla y la recorría con una mirada algo maliciosa –Tu trono como la estudiante modelo se acabará antes de comenzar- acarició su mentón de la chica, para luego guiarlo a los labios de él y así ella sintiese el golpeteo de su aliento mientras hablaba –Pero si me aceptas como tu rey, podría dejarte siempre el segundo lugar...-

Un impulso hizo que Luna empujase a Roy y huyese a su bicicleta para luego pedalear a casa. Su corazón latía con fuerza, estaba sonrojada y a la vez sentía ganas de llorar. Entró a la seguridad de su casa, que aunque estaba sola, era mejor que seguir ahí parada junto a ese extraño chico.

El teléfono sonó luego de un par de horas; Candy estaba preocupada por su amiga, pues se había retirado antes de que acabaran las clases y aunque aún vio al chico nuevo, no se acercó a preguntarle por qué ella se había retirado antes. Luna se contuvo de decirle lo que este muchacho sabía de ella, y por lo mismo solo dijo que se sentía un poco mal.

La primera noche como estudiante en Canterlot High antes representaba que Celestia hiciera una serie de bocadillos especiales mientras que cantaban y bailaban felices viendo el álbum de fotos de papá cuando conoció a mamá; esa era la tradición; sin embargo Luna estaba sola, y aunque podía recordar esos momentos y prepararse algo especial; estaba realmente confundida.