La Enfermera Jelsa

Chapter 10

El grupo de amigos seguían en la sala platicando de cualquier cosa. Tadashi seguía esperando a que Elsa volviera, pero esta ya había tardado mas de lo normal.

-Iré a buscar a Elsa- Dijo el pelinegro.

-Relájate Tad, yo iré - Dijo Hiccup y se encaminó a la habitación de Jack.

--*--

Elsa estaba feliz, pero confundida no sabía que pasaría ahora. Si saldrían o seguirían como amigos, tal vez eso lo decidiría Jack.

-Vamos nos están esperando.- Dijo la rubia levantándose de la cama, Hiccup entró a la habitación.

-Chicos ¿Por qué tardan tanto?- Preguntó el castaño.

La rubia por un momento entró a una zona llena de nervios, ¿Qué diría Hiccup de ella si sabe que en su trabajo se enamoró de su hermano?.

-Ya vamos, vete.- Dijo Jack seco, El castaño salió y cerro la puerta consigo.

El albino se levantó de su cama, y observó a la rubia unos momentos

-¿Qué me vez?- La rubia se ruborizó. Jack la tomo de la cintura y la pegó a él.

-Adoro cuando te sonrojas enfermerita.- Elsa desvió la mirada nerviosa, Jack la soltó de su agarre-Vamos.

El par de albinos llegaron a la sala nuevamente, Elsa se sentó alado de Jack, en lugar de donde estaba antes con Tadashi.

-Que tardados- Dijo Kristoff.

-Da igual, da igual- Dijo la platinada.

La lluvia de ideas continuó, la zona era un poco incómoda, Tadashi veía mucho a Elsa, cosa que Jack notaba bastante. Merida terminó de anotar las ideas que sus amigos y prometido le habían brindado.

-Pues... creo que eso es todo- Sonrió la chica de rizos.- Solo falta ir a la agencia, gracias chicos.

-No fue nada Mer- Respondió Rapunzel con una sonrisa.

La visita se retiró, Hiccup y Merida platicaban en la sala de estar junto con Elsa, el peliblanco solo los observaba desde el marco de la puerta de la cocina, mirando con detenimiento a la rubia, causando un leve sonrojo en esta, el ojiazul soltó una sonrisa.

-Ya quiero casarme, todo será perfecto. - Dijo la peliroja con ilusión.

-Así será, pero debo llevarte a casa pequeña- Dijo el castaño tomando a su amada de la mano.

-Elsa un gusto conocerte, cuídame a este grandulón.- Dijo la ojiverde con una agradable sonrisa, Elsa asintió sonriéndole.- Y a aquel gruñón canoso también.

-Oye!-Se quejó Jack.

Todos comenzaron a reír.
Hiccup se retiró con su prometida, La rubia subió a la habitación del abuelo de Jack.

-¿Qué tal?- Preguntó la rubia.

-Elsa, mañana quiero pasar tiempo allá abajo. Quiero que llames a mis amigos de la casa #345.- Dijo el señor con una sonrisa.

-Es una buena idea señor, eso haré.

Elsa cumplió con su trabajo y bajo las escaleras con cuidado, se detuvo en la cocina a prepararse un emparedado. Su celular comenzó a sonar, era la madre de Jack, quien venía entrando.

-Señora Frost!- Elsa contestó, Jack la miraba de reojo.- ¿Cómo? ... Oh.. Que bueno, me da mucho gusto, Yo les daré la noticia. Buenas noches Señora Frost.- Elsa colgó la llamada e inmediatamente Jack le miró fijamente.

-¿Qué quería?- Preguntó quitándole de las manos el emparedado a Elsa, esta rodó los ojos

-Tus padres regresan en 3 días, quería que les dijera... Que tiene una noticia muy agradable que darles.

-Eso quiere decir que... en 3 días...-

-Si, en tres días me voy.- Afirmó la rubia.

Jack rodó los ojos.

-Eso no me interesa, en 3 días vuelven los dolores de cabeza.- Era obvio que le interesaba.

-Esta bien Jack.- Elsa salió de la cocina a paso rápido.

"Muy bien Jack, eres un estupido" Pensó el peliblanco.

Elsa entro a su habitación, No se sentía muy bien. Tal vez era por la respuesta de Jack o tal vez el saber que ya no estaría con él.
Era obvio que él jamás la visitaría a su casa y mucho menos a su próximo trabajo, o al menos así pensaba ella.

Continuará.