Comunicada con mi enemigo.©

[9] Problemas. parte 1.

Me despierto por la alarma del celular pero no abro los ojos. Lo buscó con una mano bajo de la almohada; al sentirlo lo agarró y abro los ojos, el flashazo de la pantalla me hizo cerrar los ojos involuntariamente, trato de apagar la alarma con los ojos medios abiertos y lo logró.
Apago el celular y al darme cuenta lo grande que era me hace despertarme de una.

¿Me compraron otro celular? Con emoción me siento y lo veo detenidamente ni siquiera me importaba el dolor de cabeza; Era grande, el doble del mío y empiezo a chillar de la emoción.

-¡Grácias Mamá!. -Al usarlo veo que tenía muchas apps y feliz lo apago dejándolo abajo de la almohada.

Al mirar a mi alrededor todo me parecía extraño o solo el dolor de cabeza lo hacía parecer extraño, me froté los ojos con mi mano y me pegué unas suaves cachetadas con ambas manos para reaccionar mejor.

Aunque la luz estába apagada pude ver que no era mi habitación, alarmada salto de la cama lo cuál me provocó un leve mareó y una punzada en la cabeza pero lo ignoró.

Veo mi alrededor para buscar un interruptor de luz; al divisar uno corro hacía el y lo prendo.

Si, definitivamente no era mi habitación.

¿Qué hago aquí?.
¿De quién es esta habitación?.
¿Entonces no me regalaron un celular?.

Esto ya me estába deprimiendo, la habitación se me hacia conocida pero las puntadas en mi cabeza no me dejaban pensar o recordar con claridad.

Era una habitación ordenada pero nada combinaba, diría de que es de un chico; esa idea me asustaba un poco al no recordar que paso ayer.

Caminé con sigilo hacía la puerta, estaba descalza y eso me favorecía, no queria hacer ruído, agarre la perilla pero la puerta estaba cerrada.
Entre en pánico y empecé a intentar abrir la puerta a la fuerza pero sin hacer ruído.

Me aleje de ella al ver que era inútil sacudirla, me sente en la cama y miré por todas partes para buscar algo que me ayudara salir de allí.

Había una computadora, una netbook y una tablet sobre un escritorio, un armario con libros, dos puertas y nada mas, nada me ayudaba a salir de aqui.

Suspire, me levante y empece a desarmar la cama para buscar mi celular, arranque las sabanas y tire las almohadas pero solamente estaba el celular que obviamente no era mio.

Voy hacía el escritorio y en el trayecto pasé por un espejo, me espante lo que vi ¿Como no me di cuenta antes?.

Estaba en bombacha y una remera larga azul de mangas cortas de hombre me cubría, me acerqué al espejo frunciendo el ceño, me agarro de los costados del espejo y me miro de cerca sin poder creerlo; estaba completamente despeinada y mi maquillaje estaba todo corrido para todos lados y involuntariamente grito espantada.

Corro hacía la puerta de mi costado, al entrar le agradezco a los santos; era un baño, abro el lavamanos y me quito todo el maquillaje a puras penas, arregló mi cabello que estaba suelto peinandolo.

Al entrar en razón podia saber de quien es esta habitación revisando el celular.

Salgo del baño ya mas presentable y voy directo a la cama toda desarmada para buscar el celular pero al levantar una almohada escuchó que alguien estaba abriendo la puerta con llaves.

¡Perfecto! Voy a ver quien es el que me secuestro y podré saber si paso algo anoche.

En el lugar donde estoy; en el costado de la cama y en frente pero lejos de la puerta, me cruzo de brazos frunciendo el ceño pero mientras se abría la puerta me agarró lo cobarde y desate mis brazos con cara de panico.