¡No escuches mis latidos! [chaelisa] [Finalizada]

capitulo 14

Él presidente park sentía su corazón latir rápidamente al finalizar la llamada, su pequeña hija había sido secuestrada. Su madre aun costado llorando casi sin consuelo, teniendo a jin abrazándola en él mismo estado. Namjom había llamado a todos los amigos cercanos a rose. Habían prometido venir lo mas rápido posible.

—¡Esto es tu culpa! —grito la señora park aun con lágrimas en los ojos. Jin la tomo del brazo impidiéndole golpear a su padre — si hubieras sido mas responsable, Chaeyoung no estaría pagando esto.

Él señor park no dijo nada, se limitaba a escuchar los reproches y reclamos de su esposa y aunque le constara admitirlo sabia que tenia razón. Si él hubiera pagado la deuda con él presidente chawn, rose no estaría pagando su deuda. Se marcho de la sala, luego de esa llamada, haría hasta lo imposible por recaudar ese dinero.

—Todo esta bien — jin abrazaba a su madre intentando tranquilizarla. Aun si él no lo quisiera también sentía culpa. Miro de reojo a namjom quien se encontraba en un rincón mirándolo tiernamente. — debes ir a descansar —ordeno jin, sujetando a su madre, a pesar de que la señora park se negó, la dulzura y él encanto de su hijo la convencieron.

Namjom se limitó a esperarlo y mirar como él pelinegro baja de nuevo las escaleras, pero ahora solo. Se acerco a él y lo envolvió en un abrazo, sabia que jin lo necesitaba. La puerta de la entrada resonó fuertemente como si quisieran tirarla a patadas. Namjom fue él que abrió la puerta para después encontrarse con la mirada desesperada de jennie, taehyung y jisoo.

—¡Donde esta rose! — grito desesperada jennie, mirando por cada parte de la casa —¡dime que es una mentira! —su voz se escuchaba mas débil, como si quisiera romper en llanto, jin se acerco a ella y la envolvió en un abrazo.

—Yo también desearía que fuera una mentira— le susurro al oido.— tranquila jen, volverá con nosotros.

La castaña dejo salir sus lágrimas, su mente estaba tan confusa como lo estaba ella, jisoo no pudo evitarlo y al ver llorar a jennie hizo exactamente lo mismo.

—Chicas tienen que estar tranquilas — pidió taehyung mirando a ambas y caminado hacia ellas, suspiro un poco antes de continuar — rose nos necesita, debemos estar fuertes.

—Tae tiene razón — dijo namjom a un costado del menor. Jin asintió mientras jennie y jisoo sesaban sus lágrimas.

Tomaron asiento y se limitaron a mirarse entre ellos, jennie había decidió salir y marcharse en él jardín, jisoo le siguió detrás sin hacer mucho ruido para que la castaña no se diera cuenta. La castaña se dejo caer en una de las bancas que se encontraban en él jardín, su mirada triste y su corazón latiendo la hacían sentirse aun mas miserable.

Dejó salir su lágrimas, sintiendo como su corazón era roto. Jisoo se limito a verla en ese estado y aunque él corazón se le estrujó al ver a jennie así, no se acerco, suspuso que jennie quería pasar un momento a solas. Se deslizó en él césped y tomo asiento allí. A pesar de la escasa distancia que tenía entre jennie, los sollozos de la castaña eran audibles para jisoo.

Pasaron un gran rato así, hasta que jisoo tomo la suficiente valentía para acercarse a la castaña.

—Todo estará bien —aseguro tomando asiento a lado de jennie, la castaña se sobresalto al ver a la peliroja aun lado de ella —No llores jendukie —pidió dulcemente dejando a la vista su tierno puchero.

La castaña limpio sus lágrimas, soltó un suspiro para fijar su mirada en la peliroja.

—¿Jendukie?—- pregunto un tanto confusa por tal nombramiento— mi nombre es jennie.

Jisoo dejo a la vista sus dientes blancos, mostrando esa angelical sonrisa.

—Lo se —respondió aun con la dulce sonrisa en su rostro— pero te puse un apodo, ¿te gusta?.

Jennie no dijo nada, aparto su mirada de la peliroja para mirar él césped. ¿Jenduki? No sonaba tan mal.

—Es lindo —dijo regresando su mirada a jisoo, una dulce sonrisa apareció en él rostro de la castaña. Jisoo sintió su corazón palpitar rápidamente — ¿puedo ponerte un apodo a ti?

Jisoo asintió y la castaña paso su mirada, como si escaneara a la peliroja.

—Que te parece...— bajo la mirada y solto un suspiro antes de mirar  fijamente como la peliroja le sonreía — ¡Jichu! -—exclamo.

—¿Jichu? — probó él nombre cuestionandolo un poco — Me encanta. — sonrió segura.

Jennie le devolvió la sonrisa, no había algo mas mágico que la sonrisa de jennie. Por cortos segundos la castaña se sintió segura, feliz, completa. Jisoo le acaricio la mejilla de forma dulce.

¿Que tan mágica era kim jisoo? Tan solo con esa tenue sonrisa jennie ya sentía que podía combatir todo lo que se le viniera enfrente.

—Hay algo que quiero preguntarte- su manera drástica de alejarse solo hizo que jennie ladiara la cabeza. Asintió como señal de respuesta para que jisoo preguntara— ¿Aun....aun amas a rose?

Una pregunta directa y sin rodeos, jennie aparto la mirada de los ojos color miel de la dulce peliroja, no dio respuesta ni nada por él estilo.

—Supongo....que esa es tu respuesta— se limito a decir jisoo, su corazón estrujandose por siquiera imaginar que jamás tendría una oportunidad. —Creo que es mejor que entremos..él frío podría afectarnos.

Su voz ronca era demasiado clara para jennie, la castaña no dijo nada e hizo caso a lo que jisoo dijo, quizás una pequeña parte de ella se sintió rota al hacerla sentir así. Pero no importaba si jennie no podía quererla, quizás solo quizás jennie había dudado al intentar decir "Si".