ENCANTADORAMENTE PERDIDO(KURT COBAIN)

CAPITULO 10

El Jueves por la mañana ya me encontraba mejor. Es necesario decir que Kurt fue muy importante en esto, en todo esto. Le conte sobre Sophie y no estuvo de acuerdo con que le mintiera, pero aún así me apoyó. También le hable sobre mi miedo, ese que me preocupaba.

-No creo que me hubiese gustado otra chica que no seas tu. Anne sabes por que me gustas?-negue con la cabeza despacio- por que cada vez que pienso en ti, mi sonrisa se hace grande y mi corazón late rápido así no estés conmigo. Porque se que puedo contar contigo si algo malo sucediera. Todo con respecto a ti me interesa. Todo Anne. Eres una muy buena artista y eso nadie lo puede negar. Tu padre estaría muy orgulloso de ti. Nunca pienses que no lo estaría, porque te amaba Anne y se que talvez esto no tiene que ver con la respuesta a la pregunta que te hice pero quiero recordartelo. No quiero que sufras. Amo tu historia, amo tu pasado, este presente y quiero pasar un futuro contigo. Anne te amo. Se que es la primera vez que lo digo, sé que no es el mejor momento pero es así como me siento. Tenia que decirtelo, me estaba matando. -soltó un suspiro- yo...- lo bese tanto como pude. no quería parar, me faltaba aire pero no importaba sus labios eran tan suaves y este era el momento perfecto para responderle. Junte nuestras frentes y sentí su respiración ligeramente agitada. Cerré los ojos.- También te amo Kurt. Mucho.

Lo recuerdo muy bien eso quitó todos mis miedos e inseguridades. Trate de estar calmada y pensar en positivo. Sophie se sintió traicionada. Lo siento y mucho, porque la extraño, extraño sus malos chistes, sus risotadas, sus abrazos de reconforte, sus anécdotas, las constantes quejas de sus padres sobre su carrera. Todo. Extraño a mi amiga.

El viernes desperté mucho mejor con lo que me había dicho Kurt un dia antes. Si que me arreglo la semana entera.

En la mañana mamá no fue a trabajar. Le tocaba turno de noche así que pasariamos el día juntos. Los cuatro. Resulta que le conte a mama sobre Kurt, y dijo que le gustaría conocerlo. Solo faltaba Sophie, que no era muy seguro que viniese.

Para mi sorpresa Kurt se llevo muy bien con mi mama, hasta entro en la cocina con ella y preparo los spaguettis junto con el pastel. Me excluyeron por que dijeron que yo era la del cumpleaños y yo no debía hacer nada.

"-Ve a tu habitación, porque no conseguiras hacer cambiar de opinión a tu madre y a mí, preciosa. - me dio un beso en los labios y cerro la puerta de la cocina."

Esa fue su excusa para luego bajar y encontrarme con una muy bonita decoración y la mesa servida con el pastel en medio.

¡Feliz cumpleaños! gritaron todos al unisono.

Los abrace fuerte y nos sentamos juntos en la mesa. Kurt y Matt parloteaban como si se conociesen de toda la vida. Para mi buena suerte Matt nunca le contó nada a mama sobre la vez que vio a Kurt en las mañanas, ella lo podria haber tomado a mal.

Sonó el timbre y una extraña sensación me aviso que era Sophie.

-Yo abro.

Me levante de la mesa y fui hacia la puerta. Abrí y ahí estaba ella con un paquete envuelto en sus manos, y no podía faltar una sonrisa.

Me lancé a sus brazos y una lagrimas resbalaron por mi rostro.

-Los siento Sof.

-No hay nada que disculpar Annie. Yo lo entiendo. Al parecer quieres mucho a ese muchacho.-asenti limpiandome las lagrimas.

-Lo amo.

-Ya me lo imaginaba.-sonrió.- Ten ¡Feliz Cumpleaños!-estiro el paquete hacia mi.

-Gracias.-lo sacudi para intentar averiguar que era.-Adentro lo abro.

Entramos y todos en el comedor saludaron a Sophie con un abrazo. Al final le presente a Kurt.

Fue bueno. Mis seres queridos estaban reunidos en una sala. Hablando y jugando de vez en cuando y compartiendo temas de conversación. Sophie me sonrió, mi madre lo hizo también al igual que Matt y Kurt. Aunque el ultimo me prometió el regalo después. Una sorpresa, la misma que prometió hace un tiempo atras.

El regalo de Sophie fue una cámara. Una nueva cámara que compro para mi con ayuda de sus padres, la dedicatoria iba departe de ellos y en especial de Sof.

Que más podía pedir. Una bella tarde. Y sonrisas compartidas.